Als sie mich holten

„Als die Nazis die Kommunisten holten,
habe ich geschwiegen,
ich war ja kein Kommunist.

Als sie die Sozialisten einsperrten,
habe ich geschwiegen,
ich war ja kein Sozialist.

Als sie die Gewerkschafter holten,
habe ich geschwiegen,
ich war ja kein Gewerkschafter.

Als sie die Juden einsperrten,
habe ich geschwiegen,
ich war ja kein Jude.

Als sie mich holten,
gab es keinen mehr,
der protestieren konnte.“

(Martin Niemöller, 1945)

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Comentarios:

  1. Cuando vinieron por mí

    «Cuando los nazis vinieron por los comunistas,
    guardé silencio,
    yo no era comunista.

    Cuando vinieron por los socialistas,
    guardé silencio,
    yo no era socialista.

    Luego vinieron por los sindicalistas,
    guardé silencio,
    yo no era sindicalista.

    Cuando vinieron por los judíos,
    guardé silencio
    Yo no era un Judio.

    Cuando vinieron por mí,
    no quedaba nadie más
    que pudiese protestar.»

    (Martin Niemöller, 1945)

  2. So ist es – así es

  3. Ya lo has puesto otras veces. Esta vez ¿es por algo en concreto?

  4. Juana de Arco

    Efectivamente.

    Gracias por traernos esto, a ver si despiertan:

    – los adormilados
    – los que «van tirando y se dejan llevar»
    – los que dicen «ya lo harán otros, yo no sirvo para eso»
    – los que andan «a Dios rogando, pero NO con el mazo dando»
    – los que «se conforman con la rutina»
    – los que «ya hacen bastante»
    – los que tienen su vida resuelta y el resto del prójimo les repampinfla
    – los que dicen confiar en Dios, pero la realidad es que no se lanzan por miedo al «qué dirán» demostrando que no confian, etc, etc.

  5. Juana de Arco

    Interruptor. Todas las veces que se pongan son pocas, lo estamos viendo dia tras dia ante la situación que padecemos, en la que cada vez hay más permisivismo por parte de «los buenos», y de entre casi 43 millones de españoles, todos se van dejando llevar, y los que tienen la vida resuelta y asegurada, les importa un rábano lo que sufran los demás. Y luego alardeamos de todo, menos de mover un dedo, por cobardía o hedonismo.

    España va a peor, y brilla por su ausencia un grupo de personas que ponga manos a la obra, salvo nuestro Tea Party español = HO y todos sus miembros.

  6. Lo he puesto por algo tan inconcreto como una sensación. Cuando haces un retrato puedes ver los trazos del lápiz, puedes ver los contornos de la cara, los tonos grises y más detalles apreciables. Siempre hay algo que no consigues concretar: la expresión.

    El retrato de mi país está lleno de trazos que podemos concretar. Yo no soy más que un trazo en un contorno del papel, una línea insignificante en medio del conjunto. El retrato del que formo parte me provoca una sensación extraña. Mi ausencia apenas lo alteraría. La vida seguiría, como si nada. ¿Cuándo nos damos cuenta de que ocurre algo anormal en una sociedad? ¿Cuántos trazos tienen que faltar en su retrato? ¿Cuántos estragos tiene que hacer la goma de borrar, cuánta porción del papel ha de quedar en blanco para que empecemos a notar que falta algo y que el retrato está quedando muy mal?

    En fin…

  7. Ya sé que por muchas veces que se ponga nunca serán demasiadas. Simplemente preguntaba si era por algo concreto o simplemente a modo de golpe sobre la mesa para despertar a todos los “dormilones”.

    Elentir, el retrato del que formamos parte es dinámico, está en permanente cambio, así que si nos empeñamos en ser trazos “rebeldes”, que se mueven y cambian el aspecto del retrato, a lo mejor conseguimos que esto empiece a evolucionar a mejor. No perdamos la esperanza.

  8. «Un día de furia».

    La respuesta está en «Un Día de Furia».

    Cualquier día conseguiremos que se pase el efecto de la anestesia espiritual de nuestros queridos conciudadanos… y vean. Yo ya no pido que reaccionen. Solo que vean. A algunos nos queda el recurso del cabreo, y de meter el dedo en el ojo. Era eso, o lanzarse a la calle con el cetme.

    Y (de momento) no quiero que me confundan con un miembro del PSOE en el año 34: prefiero limitarme a la palabra. Pero esa la tengo afilada.

    atte;

    http://www.enestadodeguerra.com

  9. aris

    me imagino que es aplicable al artículo de Jorge Valin en el que defiende la libertad de expresión de un grupo de Facebook que pide que se quemen Iglesias con curas dentro.

    sería bueno repasar qué se decía del nazismo antes de que llegara al poder en Alemania o qué se decía antes de la II Guerra Mundial.

    saludos

  10. El Tíol Bastón

    Mucho tiempo fue atribuido a Bertolt Brecht, e incluso todavía continúa siéndolo según la leyenda urbana que aún circula por ahí, incluido en la Internet.

    Tampoco es cierto que se trate de un poema (de hecho, aunque la tradición urbana lo escribe línea a línea, carece de cualquier característica de verso, hasta el punto de que corren varias versiones: esta serie de repeticiones es más bien una enumeración, basada en las Bienaventuranzas del sermón de la montaña), es parte de un sermón en prosa titulado «Qué habría dicho Jesucristo», que el pastor luterano Niemoller pronunció en una iglesia en Kaiserlautern durante la Semana Santa de 1946 (recién acabada la II Guerra Mundial, pues).

    Creo que está bien traído porque les recuerda a ellos que han sobrevivido por un favor que les ha hecho Occidente al combatir a los nacionalsocialistas, pero en general no creas que me hace mucha gracia, porque pone un mal ejemplo al victimizar a los comunistas (y a los socialistas sí o no, según la versión), otros tantos que tal bailan con los nazis, (yo incluso, después del ejemplo de la Historia, los pondría aún por peores) y él ya debería de estar viendo qué ocurría con la Alemania ocupada por los soviéticos desde el primer momento, algo hacia lo que también debería haber alzado la voz. Pero lo fácil era hacer leña del árbol caído. Me parece que ahí estamos tocando un tema no de buenos y malos, sino de malos y peores.

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