Diez años de HazteOir.org

Como os adelantaba esta mañana, estoy en Madrid para asistir a la fiesta del 10º aniversario de HazteOir.org. Si el 7º cumpleaños de mi blog me anima a hacer reflexiones, ¿cómo no meditar sobre esta primera década que celebraremos esta noche?

Por una vez puedo decir que escribo una entrada desde el corazón de la noticia, y es que estas líneas las tecleo desde un PC desde la sede de HO. A mi alrededor veo hasta qué punto ha crecido esta asociación que conocí en la primavera de 2003, y con la que empecé a colaborar como diseñador ofreciéndome a rediseñar su logotipo, como os conté aquí en enero. Entonces HazteOir.org era básicamente una web en la que colaboraban unas docenas de personas. Recuerdo bien que cuando el PSOE ganó las elecciones el 14 de marzo de 2004 en HO éramos 81 socios. Hoy la cifra ya se eleva a más de 4.800, lo cual ha permitido una sede más espaciosa que el primer pequeño despacho en la madrileña calle de Comandante Zorita, y siempre respetando la máxima de HO para salvaguardar su independencia frente al poder político: no pedir ni aceptar ni un céntimo en subvenciones, una fórmula que es la clave del éxito de HO en un país como España, donde está demasiado extendida la idea de que es imposible organizar una iniciativa social sin recurrir al erario.

Hoy los voluntarios que colaboran con HO y sus distintas campañas se cuentan ya por miles. HO está presente de forma habitual en casi todos los medios de comunicación, siempre defendiendo los valores que se marcó como objetivos a alcanzar desde su fundación: la defensa de la vida y de la familia, el respeto por la dignidad humana y el bien común, una mayor participación de los ciudadanos en la vida pública... Hay que decir que es posible que en España el "milagro de HO" no se hubiese producido, o hubiese tenido un alcance más modesto, si la oposición parlamentaria no hubiese abandonado la defensa de esos valores. En muchos momentos, los ciudadanos nos hemos encontrado en España sin más oposición real al proyecto de Zapatero que la encabezada por HO y otras plataformas cívicas. Han sido unos valientes que han asumido a veces el enorme precio que implica en España defender esos valores contra corriente, desafiando un pensamiento único que no consiente discrepancias de ese calado y que a menudo las aplaca con unas formas impropias de una democracia. HO puede celebrar este cumpleaños con la cabeza bien alta, con el orgullo de quien no ha renunciado a la defensa de sus principios a cambio de favores, con la tranquilidad de quien no debe nada a los poderosos porque su éxito no se debe a la claudicación frente a los que gobiernan, sino a la firmeza de convicciones y a la independencia a la hora de defenderlas.

Para quienes conocemos desde hace tiempo a HO, esta plataforma, además, se mide en términos de humanidad. De Nacho, Gádor, Álvaro, Alberto, Víctor y las demás personas de HO con las que tengo trato habitual he aprendido muchas cosas buenas. El trato con ellos nunca ha sido el del mero compañerismo que te puedes encontrar en cualquier organización, sino de sincera amistad, de personas que comparten tus preocupaciones, que se interesan por ti, que son leales y que sabes que siempre van a estar ahí, sobre todo cuando más les necesites. Doy gracias de haberles conocido, y espero poder seguir compartiendo con ellos por lo menos otra década de esta apasionante iniciativa. ¡Felicidades HO!

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