No dejemos que nos emponzoñen

Con el paso de los años, y llegado el momento en que ya ningún partido me despierta interés, cada vez que se anuncian unas elecciones me vuelven a la memoria un montón de trazos gruesos con los que habitualmente se pretende simplificar algo tan complejo como los motivos por los que vota cada uno. Tengo amigos en casi todas las coordenadas del mapa político, salvo en aquellas que consideran justificable la violencia para conseguir sus fines políticos. Cuando digo "amigos" no hablo a la ligera: para mí es una palabra importante y no se la adjudico a cualquiera, sino a aquellas personas por las que siento un especial aprecio.

Cuando me hablan de votantes de uno u otro signo, pienso en Fulano que vota al PP porque es padre de dos críos y cree que sólo así podrá arles una educación libre. O en Mengano, que vota al PSOE y que teme, como funcionario, que una reducción del Estado la cueste el puesto y no tenga con qué alimentar a su mujer y a su hijo pequeño. Y así podría enumerar uno a uno, desde los citados -nombres figurados, claro- hasta los que votan al BNG, a UPyD y a otros partidos, o incluso los que ya no votan. Con la mayoría de ellos he charlado de política alguna vez sin traspasar los límites del respeto mutuo. Quizás eso sea más fácil porque ellos me conocen a mí y yo a ellos, lo que me lleva a plantear una pregunta: ¿se vería tan tenso y crispado nuestro pueblo si cada vez que hablamos de los votos pensáramos en estos términos? Es decir, pensáramos no en Mengano que es un borrego por votar a tal o cual partido, sino en Mengano, una persona con la que has compartido un buen trecho de tu vida, y que vota a tal o cual partido valorando ciertas cosas que no compartes, pero que no por ello deja de ser una buena persona.

Yo no soy relativista, y no pretendo hacer con estas líneas un ejercicio de relativismo. Busco la verdad, y sé que dos personas que defienden cosas contrapuestas no pueden tener la razón por igual. Creo que hay opiniones que son válidas, otras que lo son menos y algunas que no lo son en absoluto. Pero al margen de discusiones de ideas, que una persona esté equivocada en tal o cual asunto no hace que sea menos respetable como persona. Creo que esto es lo que se está olvidando en una España donde el guerracivilismo y la división entre buenos y malos ha vuelto lamentablemente al orden del día, en buena medida por culpa de unos políticos irresponsables que quieren sacar tajada del enfrentamiento entre españoles. Me niego a darles tal satisfacción. Me niego a perder a un buen amigo para que tal o cual dirigente político pueda obtener algunos votos más. Me niego a contemplar a mis compatriotas -que son personas con sus inquietudes y necesidades, con sus alegrías y tristezas, con sus esperanzas y sueños- como si fueran rebaños a los que colgar letreros en función de la papeleta que elige tal o cual conjunto el día de los comicios. En los próximos años vamos a tener que recorrer un camino muy arduo como nación para conseguir salir de la actual crisis política, económica y moral que estamos atravesando. Creo que sólo podremos soportar esa travesía y aguardar un buen fin al trayecto si reconocemos a personas, y no a masas anónimas, en las personas que comparten ese camino con nosotros. No dejemos que nos emponzoñen por unas elecciones, por favor.

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Comentarios:

  1. Estoy de acuerdo con la base de lo que has escrito, que el respeto a las personas jamás debe perderse por discrepancia en las ideas. No creo que nadie te lo puedas discutir, como tampoco creo que la lucha NO de ideas, sino de actuaciones que perjudican a todos sean cuales sean las ideas, deba ser acallado. Explico mi posición.

    Yo también tengo amistades que votan PSOE, AES y PP, otras no sé qué votarán o si votarán, pero la cuestión de a quien voten o dejen de votar no es importante para respetarles y seguir con la amistad. Lo que importa es precisamente a lo que tú te has referido, a «la preocupación que todos tienen por sus familias y sus trabajos», y es ahí a donde debemos dirigirnos, y es ahí donde tenemos la obligación de luchar, y de intentar abrirles lo ojos que mantienen cerrados porque no quieren ver la realidad de lo que hacen los de su partido favorito.

    Los que votarán al PSOE no se dan por enterados de que a ellos/as les llegará el turno de ser maltratados más de cerca por el socialismo, ahora mientras lo sufran los demás, «a mi que me registren», es lo que se denomina «insolidaridad» y una enorme falta de caridad, todo unido a un fanatismo que como tal es absurdo. Si ganase el PSOE, les llegará el momento en el que les quiten a sus hijos al servicio del Estado, les obliguen a abortar para «controlar la población» y les eutanasien. Pero claro, ahora todo esto lo ven muy lejos, ya sea por la edad, o porque aún no nos han radicalizado del todo.

    Los que votarán al PP «para echar a estos del PSOE», más de lo mismo. El PP de Rajoy tiene un 50% de culpa en la deriva que ha tomado España, no podemos exculparle ni en sueños. Ha permanecido mudo y pasota, mientras los ciudadanos ibamos sufriendo cada dia más, ha ido haciendo un impresionante ejercicio de dejadez, pensando SOLO en la estrategia para conseguir más votos, SIN LUCHAR por ningún principio decente en defensa de los no nacidos asesinados, de los cientos que se están eutanasiando a diario sin aprobar ninguna ley, apoyando a Javier Arenas que firmó la ley de eutanasia, sin oponerse como corresponderia, a una ley de educación adoctrinante, no rechistó ante la manipulación de la justicia y acoso y derribo de jueces justos, etc, etc. Solo ha estado haciendo teatro para mantener en el engaño a los votantes de siempre del PP.

    Como no tenemos quien nos defienda en la clase politica que es la que hace y deshace leyes, nosotros tenemos que hacer lo imposible para defendernos, y no solo en las urnas, sino desde blogs y medios de comunicación donde haya personas decentes y honradas del periodismo.
    Ya digo, no se trata de luchar contra personas, sino CON las personas y conra la situación a la que nos quieren llevar unos y otros.

  2. Muy poético. Demasiado inocente para describir la realidad política y social de la actual España.
    Yo antes del 11 al 13-M también tenía algún amigo de izquierdas…

  3. Elentir, estoy absolutamente de acuerdo contigo.

    Saludos.
    José María

  4. Marcial

    Como decía aquél chiste: «¿Se puede ser buena gente y votar PSOE?»

  5. Aniversarios para recordar, hay que empezar a dar por saco a la campaña socialista que nos espera, que no nos dirijan nuestros sentimientos:

    http://www.ciudadanosenlared.com/foros/viewtopic.php?t=10329

    Por si te va bien, te he puesto el enlace visto por ahí.

  6. Geheimnis, no pretendo ser poético ni inocente. He escrito esta entrada bastante harto de tantas campañas electorales en las que siempre ocurre lo mismo. A mí me gusta debatir ideas, no intercambiar insultos con el que piensa diferente. Debemos pedir a los políticos que rindan cuentas -los que han gobernado- y que expliquen lo que se proponen -quienes pretenden gobernar-, pero no podemos permitir que nos enfrenten por lo que votamos, no podemos dejar que sigan matando nuestras amistades para sacar unos puñeteros votos.

    Mira, el 17 de mayo fui a un mitin del PSOE en el que participó Rubalcaba. Los discursos fueron lo de siempre: atacar al PP. Ya había ido a mítines del PP donde todo consistía en atacar al PSOE. Ni una idea, ni una propuesta en ninguno de los mítines. Todo se basaba en enardecer a la gente contra el rival. En ese mitin estuve haciendo fotos, algunas personas me permitieron asomarme al sitio que ocupaban, con bastante educación. Me pregunté entonces si habrían sido tan educados si supieran que soy de derechas, pero… ¿eso cambia algo? ¿Son menos personas ellos por votar al PSOE o soy menos persona yo por ser de derechas?

    Marcial, te contesto: sí. Conozco a buenas personas que votan al PSOE. No estoy de acuerdo con lo que votan, ni coincido con muchas de sus opiniones, pero eso no quita que sean buenas personas.

  7. Luis

    Muy buen post, si señor.
    Suena idealista, pero hay que luchar por ello.

  8. Marcial

    Si te dijera quién de mi familia vota PSOE…

  9. Jandro

    El problema de la política está en que creen que su cometido es ese: alimentar el circo para seguir manteniendo su modus vivendi. Si les quitas a casi todos los partidos meterse con y alimentar el rechazo hacia el de signo diferente, les dejas con casi nada. Si, por ejemplo, le pides a Mariano que haga oposición y actúe defendiendo principios, le metes en un marrón que ya sabemos que le supera. Su objetivo es ganar las elecciones sea como sea, porque así tendrá una mejor posición para llevar pan a su familia. Son empresas con ánimo de lucro y es teatro lo que hacen, que a nadie se le olvide.

    Por eso está bien negarse a que estos políticos, en su irresponsable proceder, nos enfrenten y nos hagan perder de vista lo mucho que debemos trabajar juntos entre todos para arreglar la crisis moral y económica.

    A las personas hay que respetarlas. Pero, eso sí, hay que luchar por hacerles ver la realidad cuando determinadas medidas son objetivamente perniciosas para la sociedad. Se debe tener respeto por la persona, por el ser humano que vota, aunque lo haga a todas luces de una manera perjudicial para la sociedad; respeto incluso a la persona que vota a un partido terrorista, como se tiene también a quien vota a un partido que defiende el asesinato de seres humanos inocentes. Pero no se les puede conceder un espacio de razón. Pueden ser amigos tuyos, pero eso es razón de más para no dejar de intentar activamente que replanteen sus ideas. Y hay que conseguirlo cuanto antes para que podamos estar todos en el mismo marco, uno que defienda los derechos fundamentales de cualquier ser humano.

    Después ya discutiremos si liberalismo, si keynesianismo, si privatización o no, si Seguridad Social de tal o cual manera… posturas que tienen sus pros y sus contras y que nos ayudarán a progresar debatiendo.

  10. IgnasiV

    Pues a mi no me parece idealista lo que dice Elentir, sino más bien realista…

  11. justamenteyo

    ¡Bueno, bueno!. En el País Vasco hay muchos simpatizantes de ETA (Bildu, Jarrai, Herri Batasuna, LAB, etc.) de los que si no supieras ese dato, te parecerían excelentes personas: buenos padres, buenos hijos, trabajadores y tal.

  12. Nunca he considerado ni tengo la intención de considerar una buena persona a quien cree legítimo herir, mutilar y asesinar al prójimo para conseguir sus fines políticos. Entre ETA y sus secuaces espero encontrar tantas personas buenas como las que esperaría encontrar en 1940 entre los afiliados del Partido Nazi o en 1960 entre los miembros del Ku Klux Klan. Ya lo puse en el primer párrafo de esta entrada:

    «Tengo amigos en casi todas las coordenadas del mapa político, salvo en aquellas que consideran justificable la violencia para conseguir sus fines políticos

  13. justamenteyo

    He entendido lo que quieres decir y estoy completamente deacuerdo contigo. Sólo quería resaltar que hay personas que parecen completamente normales e incluso buena gente, y las puedes haber conocido durante años, pero si el «tema» en cuestión no ha salido (y en el País Vasco muchas veces no sale por motivos obvios), puedes desconocer que debajo hay un monstruo. Es algo escalofriante.

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