Un tribunal político dominado por el PSOE vuelve a avalar otra ley del PSOE

El TC convierte en principio constitucional su extrema tardanza en resolver un recurso

Hoy un Tribunal Constitucional con mayoría de miembros puestos a dedo por el PSOE ha vuelto a avalar otra ley socialista, en este caso la que altera la regulación jurídica de una institución social milenaria como es el matrimonio para aplicársela a otra forma de convivencia que no tiene nada que ver con aquel. Esta nueva sentencia del TC obvia incluso la propia jurisprudencia de ese Tribunal, plasmada en el Auto de la Sala Primera 222/1994.

El TC contradice su propia jurisprudencia en relación al matrimonio

Dicho auto era bastante claro: "la unión entre personas del mismo sexo biológico no es una institución jurídicamente regulada, ni existe un derecho constitucional a su establecimiento; todo lo contrario al matrimonio entre hombre y mujer que es un derecho constitucional". Así mismo, el TC recordaba la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que "ha declarado que no permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo no implica violación del art. 12 del Convenio de Roma, que al garantizar el derecho a casarse, se refiere al concepto tradicional de matrimonio entre dos personas de distinto sexo". Si el propio TC y el TEDH consideraron que no es discriminatorio no regular como matrimonios otras formas de convivencia es porque estamos ante realidades distintas y que, por tanto, merecen tratamientos jurídicos distintos. Dar la misma cobertura legal a cosas muy distintas suele dar lugar a situaciones disparatadas. La peor de ellas también la ha avalado hoy el TC: obviar los derechos y el interés de los niños huérfanos para concederlos en adopción a parejas del mismo sexo. Un nuevo uso de los niños como cobayas en un experimento sociológico procedente de la izquierda: por desgracia, nada nuevo bajo el sol.

¿Cuanto más tarda el TC en resolver, más constitucional es la norma recurrida?

De momento no se conoce el contenido íntegro de la sentencia, pero fuentes del TC ya han adelantado que los miembros que han votado a favor de la Ley Zerolo apelan a la "evolución social" para justificar una nueva lectura de la Constitución distinta a la que hizo el citado Auto 222/1994. El argumento es toda una suerte de autojustificación. Y es que el TC ha tardado nada menos que siete años en emitir una sentencia sobre el recurso presentado por el PP a dicha reforma legal. Más que una evolución social, lo que ha habido es una política de hechos consumados, según la cual basta con que el TC deje pasar el tiempo para que la gente acabe por aceptar leyes contrarias a la Constitución y a la propia jurisprudencia del TC. Como adelanto en el título, lo que esto supone es que el TC convierte en principio de constitucionalidad sus enormes retrasos a la hora de verificar la legalidad de una norma.

El PSOE cumple sus objetivos 28 años después de eliminar el recurso previo

Lejos de cumplir la función para la que fue creado, con esta burla al Derecho el TC se convierte no en guardián de la Constitución, sino en garante de la impunidad de quienes la vulneran. Eso es precisamente lo que buscaba el PSOE cuando en 1984 eliminó el recurso previo de inconstitucionalidad, que suponía un formidable dique contra los abusos de poder. El PP tuvo ocasión de reponer ese recurso previo durante el mandato de Aznar. No lo hizo, y ahora vemos las consecuencias. De hecho, el control ejercido sobre el TC por el PSOE es tan férreo que hace dos años, cuando ese Tribunal invalidó una mínima parte del Estatuto catalán de 2006, desde las filas socialistas se convocó a la gente a manifestarse contra el TC. En estos momentos no cuesta nada ver rasgarse las vestiduras ante cualquier mínima discrepancia frente a esta nueva sentencia a muchos que entonces defendieron desobedecer al TC porque el TC se había atrevido a desobedecer por la mínima al PSOE.

Una reforma sin demanda social y hecha por puro marketing ideológico

Por otra parte, si el PSOE en su momento decidió obviar los principios jurídicos que acabo de señalar no fue por una exigencia social. De hecho, los colectivos gays hablaban en 2005 de 100.000 enlaces del mismo sexo en dos años, pero siete años después se habla sólo de 20.000. Antes bien, lo que movía esta reforma era pura y simple ideología: se trataba de quebrantar una institución social que es la célula básica de la sociedad pero que es tradicionalmente denostada por la izquierda progre. Después de promover numerosas iniciativas legales y fiscales para perjudicar a la familia -entre ellas, las dirigidas a impedir que los padres puedan decidir el tipo de educación que desean para sus hijos-, la conocida como "Ley Zerolo" se convirtió en la guinda de la hoja de ruta ideológica del PSOE en ese terreno. No importaba tanto la demanda social de dicha reforma como el marketing ideológico que proporcionaría al PSOE para dividir a los españoles entre buenos (los que secundan las tesis progres) y malos (los que discrepamos de ellas). En este caso, todo el que se atreviese a contradecir a esa Ley Zerolo sería catalogado y estigmatizado como "homófobo". Y eso fue lo que ocurrió: este nuevo proyecto del PSOE se convirtió en un arma de ingeniería social. Su aparato de propaganda no tuvo reparos en presentar a quienes criticamos un disparate jurídico en personas que sentimos aversión por los homosexuales (algo paradójico, pues incluso algunos homosexuales criticaron esa reforma). Por supuesto, muchas personas que no son de izquierdas cedieron en esto como en otras cosas, otorgando a la progresía, una vez más, la capacidad para establecer lo que es legítimo y lo que no en materia de opinión. El resultado no es una sociedad más libre, sino una sociedad en la que discutir un colosal disparate jurídico con un descarado trasfondo ideológico progre puede conllevar tu muerte civil. Y algunos supuestos antiprogres están aplaudiendo esto. En fin...

Entradas relacionadas:

No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico:

Comentarios:

  1. Sospechoso

    Lo han conseguido, el PP ha quedado como el «malo» de la película, como el partido «homófobo» por oponerse a esto. Han ganado la batalla ideológica de: estás contra el matrimonio gay = «eres homófobo», estás a favor = «no lo eres».

    Dicen que esto es «progreso» porque ya no se discrimina por razón de sexo, y ahora pregunto ¿y qué pasa con la discriminación en el resto de uniones que existen? ¿tendrán también el mismo tratamiento jurídico pese a ser uniones distintas?

    Arabia Saudí debe ser un país superprogre, porque allí no se discrimina en cuanto al número de cónyuges para poder casarse.

    Aquí en España basándonos en los postulados de la progresía se discrimina a todos aquellos que quieran casarse con dos o más mujeres (poligamia) o a todas aquellas que quieran casarse con dos o más hombres (poliandria) o a aquel que quiera casarse con su hermana/o (endogamia).

    ¿Cuál es el límite entonces?

    PD: Dicho esto pienso que el matrimonio no debería ser regulado por el Estado y que debería ser legal que cada uno se uniera con quien quisiera y con cuantos quisiera pero respetando las instituciones sociales.

  2. Sospechoso: «Lo han conseguido, el PP ha quedado como el “malo” de la película, como el partido “homófobo” por oponerse a esto.»

    Más bien ha quedado así por no oponerse como debería, andando -como siempre- con tibiezas y medias tintas en vez de dar la batalla de las ideas.

    En cuanto al matrimonio, siendo como es la célula básica de la sociedad y el ámbito natural en el que vienen las nuevas vidas al mundo, por supuesto que debe ser regulado y amparado por el Estado. Lo que no puede ser es que el Estado desampare jurídicamente a esa célula básica de la sociedad, o se dedique a adulterarla asimilándola legalmente con formas de convivencia que no tienen ninguna relación.

  3. Sospechoso

    Con lo de que el Estado no debería regular, me refiero al hecho de que en mi opinión debería sea legal que cada uno pudiera casarse con quien quisiera, el Estado no debe meterse ahí, pero eso sí, el Estado sí debe respetar jurídicamente las instituciones sociales ya establecidas como es el caso del matrimonio.

    Aunque habría quien diría que no tendría sentido ni sería lógico tener instituciones jurídicas idénticas (con los mismos derechos y obligaciones) en lo que lo único que cambiaría sería el nombre ya sea por razón de sexo, o por el número de los contrayentes.

  4. Sauron

    Realmente, lo de este Tribunal no tiene nombre. No tanto por el propio contenido de esta sentencia, que no lo veo tan grave, sino por algo mucho peor: la previsibilidad de sus fallos. Eso quiere decir que el TC está tan politizado que cualquiera medianamente informado sabe de antemano lo que van a votar sus señorías. Se están cubriendo de gloria, porque ya no respetan ni la ley ni la constitución ni nada.

    Cuando entra un recurso los magistrados ya saben lo que van a votar. Lo que hacen es adaptar, retorcer y forzar la interpretación de la ley para poder adaptarla a su ideología y esto es terrible.

    Ya lo hicieron con artículos tan aparentemente inmanipulables y claro, como el 14 (no se puede discriminar por razón de raza, sexo…) y sin embargo, declararon constitucional la ley de violencia de genero saltándose el artículo y partiendo de premisas falsas para validar una discriminación de libro.

    También lo hicieron con la sentenciade Bildu, saltándose a la torera la imposibilidad del TC para interpretar las pruebas.

    Pero ahora usan la «evolución social» para reirse de nuevo del art. 32, que es textual, y le dan el valor que les sale de los cojones.

    Yo creo que no existe otro país donde el más alto Tribunal sea tan sectario y se encuentre tan, pero tan politizado.

    Mi mas profundo desprecio al Prostitucional.

  5. El TC es una muestra de hasta qué punto España sufre un problema de corrupción política que lo inunda todo. Que los tribunales se salten la legalidad a la torera con tanto de escaro es un motivo de escándalo, de descrédito para nuestra democracia y de una inseguridad jurídica que es fatal para nuestro país. ¿Quién se arriesga a invertir en una España en la que el más alto tribunal actúa al dictado de un partido político, pisoteando los principios jurídicos y constitucionales y la lógica más elemental para complacer a quienes han nombrado a dedo a la mayoría de los miembros del TC? En fin, así nos va…

  6. Yo no sé qué me da más vergüenza ajena, si la sentencia del TC (apelando a la evolución social y tal, vamos, positivismo en estado puro) si la respuesta del Ministro de Justicia (como se ha declarado constitucional no hay que tocarlo (!!)yo creo que en el PP estaban «cagaítos» pensando que el TC pudiera declararlo inconstitucional) o las declaraciones de Rubalcaba (con el típico tópico: «Ha triunfado la igualdad. Ahora todos pueden vivir con quien quieran». Como si vivir y casarse fuera lo mismo y obviando otros muchos impedimentos que deja el matrimonio: imposibilidad de casarse con alguien ya casado, con un pariente cercano, con más de una persona o, simplemente, con alguien que no quiera casarse contigo).
    El concepto de matrimonio se ha estirado tanto que ya está pasando a no tener significado y entonces, a no mucho tardar, se estirará más (poligamia, incesto) hasta que se rompa.
    Yo propongo, desde ya, buscar un nuevo nombre a lo que antes era matrimonio…

  7. Muy de acuerdo con lo expuestos por Sospechoso.
    En general muy de acuerdo también con lo escrito por Elentir aunque creo que el tema de si había demanda social o no es irrelevante. Creo sinceramente que la mayoría de parejas homosexuales lo que buscaban era amparo legal para poder desarrollar un proyecto de vida en común con algunas garantías. Pero es evidente que no tenía porque haberse hecho modificando una institución que es incluso anterior a la aparición de los estados-naciones. Allí ya ha sido una operación de ingeniería social por parte del Psoe que ha tenido, como era de esperarse, éxito.

  8. Se suponía que íbamos a ponernos a nivel europeo y resulta que ni siquiera en Francia tienen todavía matrimonio homosexual. Al final resulta que somos más extremistas que nadie, como de costumbre.

  9. A ver… Si hace siete años el PP planteó un recurso de inconstitucionalidad, hemos de entender que no estaba de acuerdo con esa ley. Es más: votó en contra. Si llevan casi un año en el poder, y no es una ley orgánica, sino ley ordinaria, ¿por qué no la han derogado en estos meses (han subido el IVA al 21%, para eso sí han tenido tiempo)? ¿Han estado de verdad a favor o en contra? ¿Han querido contentar a unos y a otros; o sea, a nadie? ¿Es una tema que les parezca de interés? ¿A qué vino su recurso? Parece que en cuestiones de índole «ideológica» o moral, el PP prefiere no tener opinión y da bandazos cortoplacistas… No va a ningún sitio, no tiene proyecto (al contrario que el PSOE).
    ¿De verdad hay alguna diferencia entre PSOE (el inductor del cambio sociológico) y PP (que no hace nada para evitarlo)?
    Supongo que habrá novedades interesantes estos días. De momento, queda claro que el TC no ha hecho algo que moleste a Rajoy, porque los TC suelen ser «sensibles» a las «voluntades políticas».
    Queda por escuchar a los supuestos «católicos» del Gobierno.

  10. Draco

    bla bla bla… asumanlo ya señores que parece que no tienen vidas propias…

  11. Marcial

    Draco, ¿en qué mundo vives?
    ¿Sabes qué será lo siguiente?

  12. Julio Molet

    El Tribunal Constitucional puede celebrar misa en arameo. Y el día menos pensado abolir la ley de la gravedad. Pero hay un hecho incuestionable: el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer. Dicho lo cual, que cada uno se case con quien crea conveniente. Podrán llamarle matrimonio homosexual. Será homosexual. Pero jamás será matrimonio.

  13. Oscar

    Creo que Elentir ha dado en el clavo. Si se confirma que el TC apela a la «evolución social» para saltarse la letra de la Constitución, no dejará de ser otro escándalo jurídico más protagonizado por quienes se supone que deben defender la Constitución.

    Ya puestos, el PP (o quien sea en el futuro) puede aprobar una Ley reinstituyendo la esclavitud, a ver si al cabo de siete o diez años el TC la confirma apelando a la «evolución social». La esclavitud o cualquier cosa que a uno se le ocurra, como podría ser la cancelación de las deudas a los desahuciados (con retención de la propiedad de la casa, se entiende) con el consiguiente perjuicio de los prestamistas. Total, sería una medida con gran «aceptación social».

    Cabe señalar, no obstante, que espero con impaciencia cómo ha determinado el TC la «evolución social». ¿A partir de su propia experiencia? ¿De la mera aplicación de la Ley recurrida? ¿De una encuesta del CIS?

  14. En esta entrada he escrito una argumentación tomando como base lo que dijo el propio TC en un Auto.

    Respuesta de Draco: «bla bla bla… «

    En fin, cada día es más evidente que más que una ideología, la progresía es simple y llana pereza intelectual.

  15. Berardo

    Estamos ante el final de una civilización. Qizás antes de lo que se teme,vendrán las lágrimas.Otra sociedad viril se impondrá, tal como marcan los ciclos de la historia y todo volverá a partir de cero regenerandose también, por supuesto,el cumplimiento de la ley natural. Lo siento Draco

  16. Sauron

    Muy interesante lo que comenta Oscar. En especial cuando se pregunta cómo demonios ha determinado el TC la «evolución social». Denota que nos encontramos ante un Tribunal de auténtica chufla.

    Sin embargo, en otras cuestiones igualente ideologizadas, los estudios, las encuestas o las investigaciones serias demuestran lo contrario pero el TC se pronuncia a la contra….que cosas mas curiosas.

Opina sobre esta entrada:

Debes iniciar sesión para comentar. Pulsa aquí para iniciar sesión. Si aún no te has registrado, pulsa aquí para registrarte.