Algunas canciones que escuchaba yo de pequeño (en recuerdo de Miliki)

Este vídeo es del año pasado. Emilio Aragón, más conocido como Miliki, dio un repaso a algunas de las canciones que más escuché en mis primeros años de vida. Es curioso comprobar como me acuerdo bien de todas.

Los casetes de los payasos de la tele aún los tenemos en casa, más bien gastados de tanto escucharlos. Recuerdo que los poníamos en el coche cuando iba de viaje con mi familia, y también cuando mi abuelo de Vigo nos llevaba de excursión. Miliki y sus hermanos, junto con Parchís, Nins, Enrique y Ana y otros grupos de la época, hicieron la banda sonora de mi infancia (y la de muchos niños españoles de finales de los 70 y comienzos de los 80).

Unos años después de que dejase de emitirse el programa, volví a ver a Emilio Aragón en un vídeo que me impresionó profundamente, titulado "¡Madre, quiero vivir!". Fue publicado por el Colegio de Médicos de Madrid, la asociación Provida y Acción Familiar, para mostrar la realidad del aborto. Miliki era uno de los personajes famosos que aparecía en ese vídeo pronunciándose a favor del derecho a vivir de los niños no nacidos, precisamente en un momento en el que hacer eso, en España, podía suponerte una condena al ostracismo.

En fin, Miliki era una excelente persona, un hombre que dedicó su vida a hacer reír y a hacer felices a los demás. Estoy seguro de que ya se habrá encontrado en el cielo con sus hermanos Gaby y Fofó: ahí arriba se lo van a pasar pipa con ellos. Descansa en paz, Emilio.

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Comentarios:

  1. Sir Ewan de Griff

    Dale Señor, el descanso eterno,
    y brille para él la luz perpetua.
    Amen.

  2. MR (Monárquico y Republicano)

    Estimado Miliki, me hiciste pasar tan buenos ratos como malos me los hace pasar aún el zoqueteprogre tu hijo, el otro Emilio Aragón… En fin, a ver si con el tiempo se le pega algo de tí, maestro. Descansa en paz.

  3. Luna

    Por pura coincidencia, ayer fuí con mi hija a una actuación infantil en que volví a ser un niño con el «auto de papá», «la gallinita» y demás canciones. Os explico ahora cuál es la situación tras Miliki: Estaba en un amplio teatro, con capacidad para trescientas personas. De ellas, quizá exagero si digo que había cien niños, pese a estar en un barrio con más chiquillos de la media. Nos recordaban a los payasos de la «tele» porque los empresarios ya tenían en cuenta que esto pasa en todas las funciones, que ahora acompañan tres o cuatro adultos a cada niño porque -desgraciadamente- ya no hay niños. Pero las fantásticas canciones de nuestros queridos payasos pasan de generación en generación y nuestros hijos las conocen tan bien como nosotros.

    Estando de campamentos juveniles el año en que murió Fofó, tuve el más sentido homenaje a los Caídos de toda mi vida: Nos dirigimos a la zona de respeto cantando en memoria de nuestro querido payaso la de «Susanita tiene un ratón», reconocimiento a un trabajo que también es por España y a una vida que se entregó a todos.

    No, Fofó no era «inasequible» para mí, como otros lo eran (Al desaliento, que no sabía demasiado lo que quería decir). Él era mucho más cercano y le sentía más junto a mí que «sobre los luceros».

    Por Miliki, vuelvo a ponerme en el tocadiscos la de «Susanita». Dios le dé el descanso eterno y brille para él la Luz perpetua. Descansa en paz, Miliki.

  4. No dudo que Miliki fuera una buena persona, pero su hijo Emilio Aragón dirige o dirigía una cadena que ataca continuamente a la Iglesia y todos los valores del cristianismo. Supongo que algo tendría que ver su familia que tanto se enriqueció por cierto en tiempos del franquismo.

  5. María, ¿por qué criticar a Miliki por lo que hace su hijo? Miliki no es su hijo. Tengo entendido que Emilio Aragón era un hombre muy religioso Su hija Rita también es muy religiosa, una magnífica persona. Si su hijo Emilio ha salido anticatólico, échale las culpas al hijo, que ya es mayorcito.

    Y lo de que la familia se enriqueció en tiempos del franquismo, en fin, no sé si será verdad o no -el sitio donde pasó muchos años la familia fue en Cuba, hasta que tuvo que huir a causa del castrismo-, pero ¿qué leches tiene que ver eso con que Miliki fuese una buena persona o no? Ya son ganas de enmarronar, ¿eh? A veces parece que no basta con que un hombre haya sido una excelente persona, que además algunos le pedís un árbol genealógico perfecto, y eso sin tener en cuenta que hasta en las mejores casas salen a veces ovejas negras. Ya está bien…

  6. Pues no quería sacar el otro tema, de que parece ser que no se hablaba con su hermano Fofó y se negó a ayudar a sus sobrinos cuando tenían problemas económicos, aparte de las cuestiones de derechos sobre las canciones…

  7. Bueno, creo que era con Gaby con quien no se hablaba, pero tampoco con los hijos de Fofó.

  8. María M: «parece ser que…»

    María, me parece algo ruín desprestigiar a un muerto apelando a rumores, por mucho que sea una fea costumbre la mar de arraigada en nuestra sociedad.

    P.D.: ¿con qué vendrás en tu próximo comentario? ¿Dirás que Miliki escupía por la calle, o que un vecino se quejó de que una vez no le saludó en la escalera del edificio? ¿A qué viene esto, María?

  9. No son rumores. Lo han contado sus propios parientes. Si ellos mienten ya es otra cuestión. Lo que no entiendo es el afán por idealizar a la gente sólo porque esté muerto y más al padre de un anticristiano.

  10. Dices tú que lo han contado sus parientes, como si eso fuese suficiente para condenar a una persona. E insistes en que tiene un hijo anticristiano, como si eso bastase para condenar a una persona (y obvias una y otra vez que su hija Rita, que fue la que siguió trabajando con él durante más años, es una devota católica). Tú le quieres condenar y no hay más, sea con razones o sin ellas. Te has erigido en jueza de su vida y te basas para condenarle en lo que dices que dicen unos parientes y en que tiene un hijo anticristiano. Con tus curiosos criterios podríamos condenar a muchas buenas personas difamadas por algunos allegados y que también han tenido hijos anticristianos. Eso sí, tú presumirás de cristiana mientras obvias el mandato evangélico de no juzgar y no seréis juzgados. Ser juez (o jueza) de la vida de los demás sin conocerla es una plaga social que ahora, tristemente, adoptan algunos que se dicen cristianos. Ver para creer, en fin…

  11. Luna

    María: Mo hay motivos para condenar a Miliki «porque su hijo es anticristiano». ¿Te has parado a pensar que precisamente, pudo ser su gran dolor, porque no lo quisiera así?.

    MR: Casi lo mismo que a María. ¿Crees que es momento oportuno para el que has hecho y que vas a mejorar el mundo con tu comentario?.

    Gracias por recordarnos que en este mundo hay buenas personas, es tan necesario que las haya como que no lo olvidemos, cuando tenemos a menudo más trato con videoconsolas, cajeros automáticos, expendedores de billetes electrónicos o PC que con humanos. Al saberlo, pudiera ser que volviéramos a interesarnos por ser nosotros mejores personas también.

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