Esto lo que dicen sobre la cristianofobia los partidos que claman contra la 'LGTBIfobia'

Hoy diversas instituciones y partidos políticos están celebrando el llamado Día Internacional contra la LGTBIfobia, en el que claman contra la discriminación de homosexuales, bisexuales y transexuales.

La diferencia entre asesinar a 148 cristianos en Garissa y a 50 homosexuales en Orlando
Cristianofobia: un tabú que ya causa el 77% de las agresiones a la libertad religiosa en España

PP, PSOE, Cs, Podemos e IU publican hoy mensajes contra la LGTBIfobia

Hoy todos los grandes partidos han publicado mensajes en sus cuentas de Twitter pronunciándose contra la citada LGTBIfobia. Puedes leer en estos enlaces el mensaje del PP, el de Ciudadanos, el del PSOE, el de Podemos (publicada por la cuenta Feminismos Podemos y retuiteado por la cuenta oficial del partido) y el de Izquierda Unida. La unanimidad es sorprendente, sobre todo teniendo en cuenta que ese concepto de LGTBIfobia no se aplica sólo a las agresiones por motivos de orientación sexual, sino a toda discrepancia respecto de los grupos de presión LGTB, lo que está conduciendo en los últimos años a que cualquiera sea acusado de "homofobia" o "transfobia" por los motivos más nimios, incluso por decir que los niños tienen pene y las niñas tienen vulva.

Lo que pasa cuando hablamos de discriminación o persecución a creyentes

La cosa cambia si hablamos no ya de discrepar de una religión, algo del todo legítimo, sino de discriminar o agredir a alguien por su religión. Ni siquiera existe un día internacional de la libertad religiosa, a pesar de que la Declaración Universal de los Derechos Humanos ampara ese derecho en su Artículo 18. Ni las instituciones ni los grandes partidos suelen publicar mensajes al respecto, a excepción de algunos partidos que señalan como "islamofobia" cualquier crítica al Islam. Sin embargo, estamos hablando de un problema real y que afecta principalmente a los cristianos. Este lunes comenté aquí un estudio recién publicado que señala que en España el 77% de los ataques contra la libertad religiosa se dirigen contra los cristianos, y además esos ataques han ido en aumento ante el silencio casi absoluto de las instituciones y de los grandes partidos.

Recordemos, además, que según un estudio publicado por Ayuda a la Iglesia Necesitada el año pasado, en el mundo 3 de cada 4 perseguidos por su fe son cristianos. En total, 60 millones de cristianos viven en países en los que son discriminados por su fe. Además, 334 millones de cristianos viven en países donde sufren persecución. Esto demuestra las enormes dimensiones de esa forma de odio que es la cristianofobia, una palabra que rara vez aparece en los medios y que casi nunca usan nuestros dirigentes políticos.

PP, PSOE, Cs, Podemos e IU no han publicado ni un tuiteo contra la cristianofobia

De hecho, se me ha ocurrido hacer una prueba en las cuentas de Twitter de los mismos grandes partidos que hoy han publicado mensajes contra la LGTBIfobia:

• Partido Popular: ni una mención a la cristianofobia en su Twitter.
• PSOE: ni una mención a la cristianofobia en su Twitter.
• Podemos: ni una mención a la cristianofobia en su Twitter.
• Ciudadanos: ni una mención a la cristianofobia en su Twitter.
• Izquierda Unida: ni una mención a la cristianofobia en su Twitter.

La falta de reconocimiento de los políticos españoles hacia el problema de la cristianofobia llega a tales extremos que hace tres años, en el Parlamento Europeo, varios partidos españoles (AGE, ICV, BNV, UPyD, PNV, CDC, Cs y PSOE) quisieron borrar toda mención a los cristianos en una moción de condena del ataque terrorista contra la Universidad de Garissa, en Kenia, en el que terroristas islamistas fueron preguntando a los estudiantes su religión para asesinar concretamente a los que se declaraban cristianos. La ausencia de una condena de esos partidos contra la cristianofobia deja en evidencia que su clamor contra los llamados delitos de odio es parcial y sectario, y se limita a los colectivos representados por ciertos grupos de presión, ignorando a capas tan amplias de la población como las que representan los cristianos en España. Es habitual, por cierto, que los partidos relacionen el rechazo a las tesis de los grupos de presión LGTB con el apoyo a la violencia contra ese colectivo, algo totalmente falaz. Pero siguiendo el mismo argumento, ¿debemos deducir que a los grandes partidos españoles no les importa que un niño sea marginado, discriminado, señalado, vejado e incluso agredido por ser cristiano?