15-M, con M de matones

La RAE define "matón" como "hombre jactancioso y pendenciero, que procura intimidar a los demás". En vista de los planes de los ultraizquierdistas del "15-M" para reventar la visita del Papa, empiezo a pensar que la letra "M", una vez pasado el mes de mayo, aún se mantiene porque es la inicial de la palabra "matón". Anteayer, la Confederación Española de Policía (CEP) alertaba sobre los antecedentes penales de ciertos cabecillas del 15-M, que incluyen robo con violencia, lesiones y otros delitos, y advertía que "esta gente tiene como modo de vida el enfrentamiento y estar permanentemente enfrentados con la policía".

El 15-M es un movimiento cada vez más marginal, reducido, radicalizado y violento. No le ha bastado con ocupar durante dos meses y medio docenas de plazas públicas en España, pasándose por la entrepierna el derecho de los demás ciudadanos a circular y disfrutar de esas plazas. Tampoco le ha bastado con incordiar a los comerciantes, perjudicando gravemente sus negocios y poniendo en grave riesgo muchos puestos de trabajo que dependen de esos comercios. Sus últimas acciones se han traducido en cortes de tráfico como y cuando les sale de las narices, y finalmente un intento de cercar el Ministerio del Interior con el consiguiente enfrentamiento con la Policía, previa provocación de los ultras con acciones como llamar a gritos "asesinos" a los agentes. Y algunos medios aún les victimizan.

Se autoproclaman 'poder constituyente' sin pasar por las urnas

Pero con ser eso grave, no lo es tanto como otro hecho que ha pasado más desapercibido en la mayoría de los medios. El pasado viernes los ultras de Sol afirmaban en un comunicado: "Somos el poder constituyente". ¿Y quién les ha votado a éstos para que se autoproclamen tal cosa? En un cambio político democrático, el poder constituyente surge de las urnas. En el 15-M, y como emulando a Napoleón cuando se puso él mismo la corona, los ultras se erigen en poder sin consultar a los ciudadanos. ¿Ésa es su "democracia real"?

No sé a cuento de qué los españoles tenemos que andar pagando peaje político a unos tipos que no nos representan como pueblo, que ya han dejado clara su afinidad a tesis tan radicales que apenas consiguen un respaldo marginal cuando concurren a las urnas, que se saltan todas las normas de convivencia y que no han tenido reparos en recurrir a la violencia desde el principio. Ya va siendo hora de dejar las cosas claras: el 15-M ya no pretende ni defender las libertades, ni protestar contra los efectos de la crisis ni las demás excusas con las que está disfrazando sus acciones. El 15-M ha demostrado ser el enésimo intento de la extrema izquierda de ocupar un espacio que no consigue por vías democráticas (eso sí, contando con el apoyo de personas de buena fe que a estas alturas ya deberían haberse caído del guindo). No es raro que ahora pretendan también impedir la Jornada Mundial de la Juventud. A fin de cuentas, una de las características de los matones es que no toleran que podamos expresarnos libremente quien no opinamos como ellos.

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(Foto: Efe/Marta Pérez)

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Comentarios:

  1. Completamente de acuerdo. El llamado movimiento 15-M es, en este momento, la avanzadilla de una coalición de partidos de extrema izquierda -Izquierda Unida- que, desde nuestra entrada en democracia, no levanta cabeza. Es la fuerza de choque de una formación política que, al parecer, nada tiene que hacer, hoy por hoy, en un sistema democrático. Es una cuadrilla de matones, vista con buenos ojos también por el Partido Socialista, que, con vistas a las próximas elecciones generales, podría dar lugar a algo de triste memoria. ¿Tal vez a una especie de Frente Popular?

  2. MR (Monárquico y republicano)

    Parece que los 15-Matones han vuelto al redil… El otro día, como se manifestaron frente al ministerio de interior, cobraron. Claro, es que no se enteran: ésto va contra «los políticos» -como no sean los del pepé…-, contra los curas, contra el fascio -ellos sí que son fascistas, que han convertido Lavapiés en un gueto, cómo gozarrrían algunos, heil-, etc., etc. Pero, ¡hombre! Contra el gobierno, a quién se le ocurre, es que algunos tienen unas ideas… Hala, venga, manifestaos contra quien debéis -que viene el Papa, responsable a todas luces de la contumaz crisis en que estamos sumidos-, o volveréis a cobrar. Buenos chicos.

  3. Karenil

    Todavia no he leido en ningún sitio, porqué la policia decidio desalojar la Plaza del Sol cuando zlo hizo o porqué les dejó volver a ocuparla 3 dias despues. Porque parece que fue simplemente un revulsivo para un movimiento agotado…

  4. Stewie Griffin

    http://www.libertaddigital.com/nacional/2011-06-15/cronologia-de-la-violencia-indignada-1276426779/

    Esto comparado con los ataques contra los derechos de propiedad por parte de los agentes del ministerio del interior, día tras día, año tras año es una broma.

  5. No dudo de que, en su origen, el movimiento 15M tuviera buenas intenciones. Pero la calle es un entorno muy complejo (como ya destaqué en varios artículos en mi blog personal, http://jmbigas.blogspot.com/2011/06/la-calle-tambien-es-mia.html) y extremadamente dudoso como fuente de legalidad.

    Cualquier movilización de este tipo que pretenda perdurar en la calle, inevitablemente acaba trufada (y gobernada) por los elementos antisistema de siempre, okupas y demás ralea, que dice estar contra el sistema, pero que vive de él.

    Pero no nos engañemos, que echarles de la calle no resuelve el problema de fondo que genera la indignación: la progresiva desigualdad en la distribución de la renta (http://jmbigas.blogspot.com/2011/08/los-altercados-indicio-de-la-peor.html). Sin ir más lejos, este es el problema mayor que está provocando los impresentables altercados de estos días en las calles del Reino Unido.

    Vivimos en un mundo en el que cada vez más gente siente que no tiene nada que perder. Y esa es una espoleta para la bomba social sobre la que estamos sentados.

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