No es patriotismo ni es constitucional disolver a España en la UE como si fuese un azucarillo

Hoy en día hay dos movimientos que amenazan la existencia de España como Nación: uno es el separatismo que quiere romper España, y otro es el internacionalismo que quiere disolverla.

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Albert Rivera dice que Vox no encaja en su "patriotismo constitucional del siglo XXI"

Ayer el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, estuvo en el programa de Ana Rosa Quintana en Telecinco. Durante la entrevista, y en alusión a Vox, Rivera defendió "un patriotismo constitucional del siglo XXI, liberal, moderno y europeísta, y creo que ahí no coincidimos con algunos partidos". Hace unos meses ya dije aquí que cuando se añaden adjetivos a una virtud como es el patriotismo es para hacérselo perdonar -por aquellos que creen que el patriotismo sin más es cosa de fachas- o incluso para algo peor. En este sentido, me choca la sobredosis de adjetivos que necesita Rivera para matizar su patriotismo: ¿tal malo es amar a España que hay que añadirle adornos?

Lo que algunos olvidan: la Constitución dice que España es "indisoluble"

Por otra parte, hay algo que muchos parecen olvidar, y es que España es anterior a la Constitución de 1978 y también a la de 1812. España no es un régimen político ni un conjunto de leyes: es la base sobre la que se fundamentan nuestras normas de convivencia. Lo dice la propia Constitución en su Artículo 2: "La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles". Hay que repasar bien esta frase, porque algunos olvidan el "indivisible", y otros olvidan también el "indisoluble".

Albert Rivera quiene unos "Estados Unidos de Europa"

Un ejemplo de ese olvido: en octubre de 2015 Albert Rivera propuso un "Pacto por España" cuyo punto 4 afirmaba: "Tenemos el compromiso de que seguiremos trabajando por los estados unidos de Europa". Alguien podría pensar que fue una mera ocurrencia, pero el caso es que en marzo de 2017, Rivera declaró en el Congreso que si no se avanza hacia unos Estados Unidos de Europa la UE "no deja de ser un Frankenstein". En mayo de ese año volvió sobre esa idea:

Y en diciembre también:

En 2015 Ciudadanos propuso ceder el control de nuestras fronteras a la UE

Es más: en noviembre de 2015, Rivera propuso ceder el control de las fronteras españolas a la Unión Europea. Además de eso, Ciudadanos propuso incluir un "procedimiento especial" en la Constitución para ceder distintos aspectos de nuestra soberanía nacional a la UE. "Todo aquello que suponga más Europa será apoyado por nosotros. Sin límite", señaló entonces Cs a El País.

Disolver a España en la UE ni es patriotismo ni es constitucional

Albert Rivera está en lo cierto cuando afirma que los planteamientos de Ciudadanos no encajan con los de Vox. Pero es que además eso ni es patriotismo ni es constitucional: eso es querer disolver España en la UE como si fuese un azucarillo en una taza de café, saltándose el Artículo 2 de la Constitución. Lo que propone Ciudadanos es el mismo internacionalismo que ha propuesto la izquierda desde hace mucho tiempo, un planteamiento que conduzca a la desaparición de los Estados nacionales. En el caso de la UE, España está cediendo cada vez más soberanía a un organismo burocrático sobre el que los españoles ejercemos un control muy escaso. Cada vez son más frecuentes las noticias sobre nuevas directivas europeas sobre las que nadie ha abierto debate alguno en nuestra sociedad, que votan los grupos de la Eurocámara sin tener en cuenta muchas veces los perjuicios que van a provocar a nuestro país y también a nuestros derechos y libertades, llegando en algunos casos a extremos que empiezan a recordar el control que ejercían las autoridades de la desaparecida Unión Soviética sobre sus ciudadanos.

La UE se parece cada vez menos a EEUU y cada vez más a la URSS

Yo, como patriota, lo tengo claro: me niego a votar a quienes quieren romper España, pero también a quienes quieren disolverla, convirtiéndonos en una mera provincia de la élite de Bruselas, que no de Europa. Porque, esto también hay que decirlo, Europa, cuna de la civilización occidental templada por la Cristiandad, se parece cada vez menos al ente burocrático que llamamos UE, un ente de políticos cuyos dictados, precisamente, son hostiles a esas raíces culturales que forjaron Europa. Basta con ver lo que está pasando con Naciones como Polonia y Hungría, que han decidido preservar sus raíces cristianas y están siendo hostigadas por ello por los burócratas apátridas y progresistas de Bruselas. Y es que en el fondo, por mucho que digan otra cosa, lo que están haciendo desde la capital belga se parece poco a los Estados Unidos. A lo que esta UE se parece cada vez más es a la vieja URSS, y eso es precisamente lo que señalan cada vez más muchos europeos que vivieron en países sometidos al dominio soviético.