Exposición en el Palacio de Fonseca, abierta hasta el 25 de noviembre

La lucha de Polonia por su libertad llega a la Universidad de Santiago de Compostela

El pasado sábado estuve en la capital de Galicia para asistir a la inauguración de la exposición "Polonia, la lucha por la libertad", organizada por la Asociación Histórico-Cultural Poland First to Fight, la Asociación Polonia en Galicia y la Biblioteca CampUSCulturae, y que permanecerá abierta hasta el 25 de noviembre en la Biblioteca General de la Universidad de Santiago de Compostela, en la planta baja del Palacio de Fonseca (ver mapa).

Polonia en la 2ª Guerra Mundial: historia, uniformes y canciones
Cuando nazis y soviéticos lucharon y desfilaron juntos en Polonia

La inauguración de esta muestra vino acompañada de una conferencia del presidente de esta asociación, Alberto Gómez Trujillo, sobre "La mujer en la lucha por la libertad". En su charla recorrió la actividad política y militar de las mujeres polacas desde la pérdida de la independencia del país, a finales del siglo XVIII, hasta la recuperación de su independencia en 1918 -cuando se estableció la Segunda República Polaca-, pasando por la invasión nazi-soviética del país en 1939, la Segunda Guerra Mundial y los primeros años de la ocupación soviética.

Me llamó la atención, especialmente, la implicación de las mujeres polacas en cuestiones militares, especialmente con formaciones como la Ochotnicza Legia Kobiet (OLK, Legión de Mujeres Voluntarias), que tuvo un papel muy activo durante la Guerra Polaco-Soviética (1919-1921), y su sucesora, ya en 1928, la Przysposobienie Wojskowe Kobiet (PWK, Preparación Militar Femenina), a modo de servicio militar auxiliar destinado a mujeres. Ya durante la Segunda Guerra Mundial, las mujeres siguieron teniendo un peso considerable en la resistencia frente a la ocupación, principalmente en las filas del Armia Krajowa (AK, Ejército Nacional), la principal organización de resistencia polaca en la contienda. Varias recreadoras asistieron a la conferencia luciendo uniformes usados por la PWK, el Armia Krajowa, el Pomocnicza Lotnicza Służba Kobiet (Servicio Aéreo Auxiliar Femenino), el Air Transport Auxiliary (ATA, Transporte Aéreo Auxiliar) y los Żołnierze Wyklęci (Soldados Malditos).

Esta última formación, los Żołnierze Wyklęci (la resistencia polaca a la ocupación soviética tras la Segunda Guerra Mundial), es la que más llamó mi atención. He leído poco sobre ella pero sabía de su existencia, aunque desconocía que sus integrantes seguían vistiendo uniformes como los usados por el Ejército polaco en 1939. Estuvieron combatiendo hasta 1953. Es decir, que tras combatir seis años a los nazis, dedicaron otros ocho años a resistir a los comunistas. La principal organización de esta nueva etapa de la resistencia polaca fue la Wolność i Niezawisłość (WIN, Libertad e Independencia), sucesora del Armia Krawjowa. Podéis ver aquí un fragmento de la conferencia en el que alberto muestra uniformes del Armia Krajowa y de la Wolność i Niezawisłość:

Otra cuestión interesante que trató Alberto fue la asistencia prestada por la resistencia polaca a los judíos. Hay que recordar que Polonia tenía un 10% de población judía antes de la Segunda Guerra Mundial, y la persecución antijudía desatada por los nazis fue especialmente atroz, siendo Polonia el único país ocupado en el que dar refugio a un judío era castigado, de forma inmediata, con la ejecución de todos los habitantes de la casa. A pesar de ello, muchas familias católicas polacas acogieron a niños judíos entre sus propios hijos, incluso sabiendo que de ser descubiertos, eso le costaría la vida a toda la familia. Alberto también apuntó que en 300 pueblos polacos los paisanos consiguieron salvar a todos sus vecinos judíos. Así mismo, el Armia Krajowa fue el único movimiento de resistencia a los nazis en la Segunda Guerra Mundial que creó una sección especial, el Żegota, dedicado a ayudar a los judíos perseguidos por los nazis. Estuvo activo entre 1942 y 1945. En torno a la mitad de los 50.000 judíos polacos que sobrevivieron a la contienda lo lograron gracias a la ayuda prestada por esa sección del AK. Una de las cofundadoras del Żegota fue la escritora católica Zofia Kossak-Szczucka. A pesar de haber sostenido opiniones antisemitas antes de la guerra, en agosto de 1942 publicó un valiente manifiesto, titulado "Protest", del que se lanzan 5.000 copias en Varsovia (una cifra enorme, teniendo en cuenta que se trataba de una ciudad ocupada) convocando a sus compatriotas a ayudar a los judíos perseguidos por los nazis.

Podéis ver aquí una selección de las fotos que hice tanto de la conferencia como de la exposición. Os animo a visitarla si podéis pasar por Santiago durante este mes, hasta el día 25. La exposición se puede visitar en el horario de la apertura de la Biblioteca, de lunes a viernes, en horario de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00 horas.

No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico:

Comentarios:

  1. Interesantísimo.

Opina sobre esta entrada:

Debes iniciar sesión para comentar. Pulsa aquí para iniciar sesión. Si aún no te has registrado, pulsa aquí para registrarte.