"Donde no llega la sanidad, llegan estas personas desinteresadas", escribe

Lo que piensa una trabajadora de la sanidad sobre la donación hecha por Amancio Ortega

A finales de marzo Amancio Ortega, dueño de Inditex, donó 320 millones de euros a la sanidad pública para combatir el cáncer. Un gesto de generosidad que le honra y que nos beneficia a todos.

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A algunos necios también les parecen mal la generosidad ajena

No obstante, incluso gestos tan nobles como ése reciben críticas de los necios. Anteayer Podemos criticaba la donación tachándola de "limosna de millonario". Recordemos que en 2014, y sin el más mínimo ápice de pudor, Pablo Iglesias presumió de donar parte de su sueldo. Los beneficiarios de ese donativo no eran los enfermos de cáncer, ni los pobres, ni ninguna ONG que se dedique a ayudar a los que más lo necesitan. El donativo lo hacía a su programa de televisión "La Tuerka", una de sus herramientas de propaganda al servicio de su ideología.

A la lista de necios hay que sumar a la llamada "Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Aragón", que anteayer rechazó 10 millones donados por Ortega a la sanidad aragonesa. Según estos tipos, no es necesario "recurrir, aceptar, ni agradecer la generosidad, altruismo o caridad de ninguna persona o entidad". Hace falta ser muy mala persona para responder así a un donativo destinado a los enfermos de cáncer. No sé qué defienden estos tipos -sus prejuicios ideológicos, sus envidias personales...-, pero la sanidad pública está claro que no.

Lo que ha escrito una trabajadora de la sanidad sobre ese donativo

Ante tanta necedad, que por supuesto sé que no representa el sentir mayoritario ni de los españoles en general ni de los profesionales de la sanidad en concreto, me ha parecido buena idea traer a este blog las palabras escritas por una amiga mía que trabaja en la sanidad. Unas palabras que suscribo y que sé que muchos otros firmarían encantados. Afortunadamente, en España hay mucha gente mil veces mejor que ciertos políticos y profesionales de la pancarta que son incapaces de dedicar siquiera una palabra amable a todo aquello que se salga de sus estrechas miras ideológicas. Os dejo con las palabras de mi amiga (me ha dado permiso para publicarlas en Contando Estrelas):

"No soy escritora (vaya por delante) pero espero que con estas palabras pueda explicar lo que siento.

Soy trabajadora en sanidad, algo que día a día doy gracias a Dios por ello.

Respecto a la donación de D. Amancio Ortega, solo puedo decir gracias.

gracias con mayúsculas, cualquier donante sea anónimo o no me parece ejemplar en todos los sentidos, donde no llega la sanidad, llegan estas personas desinteresadas, sin duda.

Cada día veo el sufrimiento y la muerte, si los que formamos parte de esto perdemos la humanidad, ¿qué sería de nuestros enfermos?

Solo soy una más que agradezco todo lo que llega a la sanidad, para mejorar la calidad humana de nuestros pacientes.

Y en mi nombre le doy las gracias a D. Amancio Ortega.

Me niego a que la política y los ideales de cada uno forme parte de los que sufren.

Gracias a todos los que lean este escrito."

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Comentarios:

  1. Blanca

    Es la prueba de lo miserable que puede llegar a ser la ultraizquierda de este país. Aceptan el dinero de Irán y Venezuela, pero no el de un español decente. ¿Eso que es? ¿Envidia y malevolenciaa hacia quien está cien codos por encima de ellos? Qué tropa.

  2. Luna

    Hace unos años tuve un cáncer de pulmón que habría sido mortal de sucederme en los años 60. Me lo extirparon y dieron quimioterapia, dejándome en muy buen estado de salud, gracias a los avances que ha traído la investigación científica. Y esto es tanto como decir «gracias, no sé a quien dárselas.» Muchos Amancios Ortegas, cuyo nombre desconozco. Y muchos investigadores abnegados que hubieron de sufrir las grandes incomodidades del I+D, del que todo el mundo espera resultados y nadie recuerda lo mal pagado que está.

    Recordemos a Madamme Curie y sus investigaciones sobre el radio. Estuvo abandonada en un invernadero, trabajando por amor a la ciencia y con la única esperanza de que en el futuro se pudiera curar el cáncer. Ella lo sufrió y trabajó por mí, entre otros que también parecían podemitas y decidieron no financiar su investigación. Quisiera recordar a otros tantos, cuyo trabajo desconozco por completo pero el fruto de su esfuerzo es mi curación.

    ¿Gracias a los podemitas? Ni siquiera existían en aquellos momentos. Ahora les ha dado por existir, pero eso no quiere decir que sean quiénes para decidir que este hombre no puede hacer una donación para mirar por mi salud. Nunca se puede decir «de esta gemcitabina no beberé», puede que dentro de poco esté de nuevo con la quimio y que don Amancio me salve la vida, así de claro.

    Muchas gracias, señor Ortega. Dios se lo premie. Muchos «de nadas» señores de Podemos, no tengo nada que agradecerles. Dios quiera que nunca tengan cáncer, no hay que desear mal a nadie, pero… Deseen mi bien, por favor.

  3. pacococo

    Envidia cochina.

    En España nos movemos por la envidia. Es nuestro pecado. Los otros seis se reparten por Europa equitativamente, no creamos que los otros son mejores.

    Por ejemplo, la gula, en el pecado va la satisfacción. Pero en la envidia, va el sufrimiento, pues el envidioso sufre lo indecible al ver a los demás mejores que él.

    ¿Y cómo trata de disimular el sufrimiento? Pues con el desprecio. Pero eso es de cara a la galería, porque el sufrimiento no se lo quita.

    ¿Podéis imaginaros el sufrimiento de estos mastuerzos al ver a D. Amancio rico y feliz?

    Sólo merecen compasión, porque ¿hay mayor desgracia que ser tan tontos?

  4. atraval

    ¿Por qué tendrán una mente tan sucia estos individuos de Podemos? Tanto odio y tanta envidia en chavales de esa edad es inconcebible.

  5. Sharovarov

    ¿Inconcebible, Atraval? ¡Ni muchísimo menos! Es lo que se lleva sembrando desde hace décadas.

  6. Miguel

    Quién es nadie, para rechazar algo que puede beneficiar a muchos. Cómo se puede ser de esa manera.

  7. Patricio

    Si tuviera la desgracia de ser paciente… demandaría al estado!!!

  8. Irene

    Recuerdan el dicho de «dar margaritas a los cerdos»?Lo malo es que las margaritas de D.Amancio también serán para dichos «cerdos»…

  9. Espectador

    Que las donaciones a Comunidades que no las aceptan se envíen a las que si. Y que los pacientes que no reciben los tratamientos que hubieran sido posibles por culpa de esos fanáticos, se lo agradezcan adecuadamente.

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