Los carros de combate y otros vehículos que la República Checa está enviando a Ucrania

Hasta ahora se había informado del envío de misiles antitanque y antiaéreos a Ucrania, además de armas ligeras. Los checos han hecho un esfuerzo adicional.

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Este martes, The Wall Street Journal y Reuters han informado del envío de "docenas" de carros de combate T-72 y vehículos de combate de infantería BVP-1 del Ejército Checo a Ucrania, una ayuda militar que el Gobierno checo no ha querido confirmar y que se habría hecho con mucha discreción. La Ceska Televize y OSINTdefender han mostrado imágenes de ese envío, por vía férrea.

El Ejército Checo dispone de 86 carros de combate T-72M1, de origen soviético, y 30 T-72M4CZ, una versión de ese mismo modelo modernizada en Chequia. De los 86 T-72M1 checos, sólo 20 estaban activos, permaneciendo los demás almacenados hasta la fecha. El Ejército Ucraniano ya disponía de carros de combate T-72, por lo que no tienen que adiestrar a sus tripulaciones en el manejo de un nuevo modelo al recibir los tanques checos.

A su vez, el Ejército Checo posee 145 vehículos de combate de infantería BVP-1, una versión del famoso modelo soviético BMP-1 fabricada en la antigua Checoslovaquia. Todos los BVP-1 del Ejército Checo estaban almacenados, sirviendo como vehículos de reserva. Al igual que ocurre con el T-72, el Ejército Ucraniano también está muy familiarizado con en BMP-1, ya que disponía de más de un millar de estos vehículos antes de la invasión rusa.

El envío de esos T-72 y BVP-1 a Ucrania es la primera entrega de vehículos acorazados a Ucrania confirmada por un país occidental desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero. Hay otros países de la OTAN que también disponen de vehículos de ese tipo, por haber pertenecido al Pacto de Varsovia en el pasado. Polonia tiene 382 T-72 (una parte de ellos almacenados), además de 232 PT-91 Twardy, una versión modernizada local del T-72, y unos 800 vehículos de combate de infantería BWP-1, la versión polaca del BMP-1.

Bulgaria también tiene una considerable cantidad de T-72, con 160 en activo y 250 almacenados, así como un centenar de BMP-1. Rumanía tiene un parque acorazado más anticuado, con unos 220 T-55 (ya muy obsoletos), de los cuales 108 están en activo (los demás están almacenados). Además, el Ejército Rumano tiene más de 200 TR-85, una versión modernizada del T-55, y 12 TR-580, otra variante del mismo tanque. Rumanía también tiene más de un centenar de MLI-84, la versión local del BMP-1.

Eslovaquia tiene un parque acorazado muy pequeño, con 20 T-72M1 y 69 BVP-1, además de otros 236 BVP-1 almacenados. A su vez, Croacia tiene 72 M-84, la variante yugoslava del T-72, y menos de un centenar de BVP M-80, el equivalente yugoslavo del BMP-1. Finalmente, Eslovenia sólo tiene 14 M-84, 30 M-55 (una variante del ya anticuado T-55) y 52 BVP M-80. Las Fuerzas Acorazadas de Albania y Montenegro son muy pequeñas, mientras que Hungría ya ha anunciado que no quiere enviar armamento a Ucrania.

Es posible que otros países ya hayan hecho envíos de carros de combate a Ucrania, pero que no lo hayan anunciado. Ciertamente, es difícil mantener en secreto algo tan vistoso como un tren cargado de tanques dirigiéndose hacia Ucrania. En todo caso, la discreción de estos envíos permitiría evitar la frustrada entrega de los MiG-29 a Ucrania por una indiscreción del comisario europeo de Exteriores, el socialista español Josep Borrell.