"La joven del agua": un maravilloso cuento de hadas de M. Night Shyamalan

Este viernes fui a ver al cine La joven del agua, la última obra de M. Night Shyamalan, el director de buenas películas como "El sexto sentido", "Señales" y "El bosque". Hay que decir que este director tiene un gusto muy peculiar, y le pasa como a Tolkien: o te encanta, o no lo tragas. En mi caso, me encanta. Me entusiasmaron sus tres últimas películas (sobre todo "El sexto sentido" y "El bosque"). Para mi gusto, este director ya se había puesto a sí mismo el listón muy alto. Pues... para mi gusto, ha vuelto a superarse. Esta película es magnífica. Una buena banda sonora, una fotografía excelente, y lo mejor, la historia y la forma de contarla: con giros imprevisibles, combinando momentos de humor y de miedo, pero sin cosas cruentas, sin detalles que puedan perjudicar al espectador. En fin, una película redonda, perfecta.

"La joven del agua" traslada la magia y la fantasía a la vida real, cotidiana y anodina de un vecindario, con personajes que se alejan muchísimo de los típicos cánones de Hollywood. Por momentos me ha hecho reír, y también ha llegado a emocionarme. Lo reconozco: me encantan los cuentos de hadas, y ver este cuento tan bien contado y plasmado a nuestro mundo... en fin, que ha sido genial. No sentía de esta forma una película desde que fui a ver la película francesa "Amelie", de Jeunet.

Sé que habrá gente que no comparta mi valoración. Para gustos hay colores. Que vaya a ver la película quien lo desee, y ojalá los que se decidan salgan de la sala con la misma buena sensación que salí yo. Ha sido una experiencia maravillosa. En cuanto pueda, vuelvo al cine otra vez, que me he quedado con ganas de verla de nuevo.