Vigo, Navidad y anarquistas en Wall Street

Ayer me libré de un atasco por casualidad. Volvía al parking cuando vi que un motorista de la Policía Local bajaba por la calle Colón con una verbena de luces azules. Al minuto estaba cortada la única vía directa de subida al centro que nos han dejado los lumbreras que dirigen el tráfico desde el Ayuntamiento.

El follón fue inmediato, claro: una orquesta de bocinas se alzaba desde esa ratonera que es ahora la calle Marqués de Valladares (la vía consular por excelencia en Vigo). En Colón, el conductor de una furgoneta desahogaba su cabreo en un padre de familia, mientras el policía seguía desviando el tráfico con su ejercicio aeróbico: brazos abiertos, brazos cerrados, brazos abiertos, brazos cerrados... Qué cara de cansancio tenía el pobre.

La manifa tardó un buen rato en bajar, se lo tomaban con una calma digna de hobbits. Eran pocos, a fin de cuentas, y si se metían prisa nadie se iba a acordar de aquella marcha. La cosa estaba convocada por la CGT, un sindicato anarquista escindido de la histórica CNT. Más o menos, las diferencias apreciables entre ésta y aquélla es que la CGT muestra más sentidiño. En su favor hay que decir que éstos de la CGT no rompen papeleras ni queman contenedores. Todo un alivio, viendo lo que hacen otros.

Eso sí, sus manifas son de lo más peculiar. Creo que no vi dos pancartas que hablasen sobre el mismo tema. Una proclamaba que este sistema no les sirve, otra bramaba contra la "represión" en una empresa, y otra mezclaba la defensa de los derechos laborales con la del litoral... Será que salen poco de manifestación y quieren aprovechar la oportunidad. Todo eso, por cierto, aderezado con gritos poniendo a parir a la UGT y a CCOO, con bastante retranca, además de alguna expresión violenta (caña, caña, caña).

Lo más pintoresco fue verlos pasar por Wall Street, que es como se conoce en el mundillo vigués de los negocios el cruce de Colón con la calle Policarpo Sanz y la Avenida de García Barbón. El apodo viene a propósito de que en cada esquina hay una entidad financiera: el Pastor, el Santander, el BBVA y Caixanova. Por allí pasaron los sindicalistas antisistema escoltados por la Policía del sistema, que iba cortando las calles con diez minutos de antelación. Me pasmó tanto orden en una manifa. Así da gusto.

Junto a las escaleras de Caixanova (por cierto, que tienen el Belén en el vestíbulo, como todos los años) me pregunta un señor de qué va aquello. "Es una manifestación anarquista", le contesto. "Ah, es que no se les entiende nada", me dice. La chica del megáfono improvisaba consignas que se oían alto pero cuyo contenido se distinguía mal. La gente se paraba a mirar con curiosidad.

Bajo las luces de los bancos y los adornos navideños de las calles, la manifa parecía una Compaña apenas visible por las pancartas y banderas rojas y negras, deslizándose hacia el puerto. Al volver a casa me entero por la web de CGT Galicia de que la protesta era "contra las medidas del Gobierno contra la crisis". Cachis... De haberlo visto en alguna pancarta, me habría sumado.

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Comentarios:

  1. chiribuso

    ¡Ah! estás hablando de «Jual estrí»!!! No había caido…
    Lo del centro en Vigo me recuerda al Sarajevo de la guerra. No queda sitio para más socavones, calles cortadas…
    Y es que aquí somos muy originales, hasta para las manifestaciones. aún recuerdo como, con mirada encendida y voz estropajada nos gritaban unos energúmenos protegidos por la policia: «ETA mataos!», al salir de la Conferencia de Galicia Bilingüe….
    Por cierto: ¿Sabes si va a haber alguna concentración el día 28contra el aborto en Vigo? No tengo constancia…
    Saludos

  2. Federico Blanco

    Para anarquistas los de verdad. Esos que se dedican a quemar economías y no cubos de basura. Para anarquistas, los de Wall Street.

  3. Chiribuso, sé que hay una convocatoria que anima a concentrarse en los abortorios más próximos en toda España, sin más.

    Federico Blanco: «Para anarquistas los de verdad. Esos que se dedican a quemar economías y no cubos de basura. Para anarquistas, los de Wall Street.»

    No te vayas tan lejos, hombre. Para quemar economías aquí tenemos muy cerca a todo un experto. Vive en La Moncloa.

  4. jajaja…

    Por allí pasaron los sindicalistas antisistema escoltados por la Policía del sistema, que iba cortando las calles con diez minutos de antelación.

    Por lo menos no hicieron su protesta como los «anarquistas» griegos… :mrgreen:

  5. Chiribuso, no solo el centro de Vigo está en obras. El barrio del Calvario está saturado de ellas. No hay sitio donde puedas pasar sin tropezarte con ellas. ¿Y quien lo paga?. El contribuyente.

  6. Lo de las obras de Vigo es algo interminable. Esto empieza a parecer una réplica de Madrid…

  7. No, lo de las obras es una réplica de cualquier ciudad española donde los ayuntamientos se han aprovechado de la ingente cantidad de pasta que han ingresado vía burbuja inmobiliaria.

  8. También es cierto, pero el caso de Vigo es de Juzgado de Guardia. Pierdo la cuenta del número de veces que he visto abrir zanjas y asfaltar una calle, para al poco tiempo volver a comenzar otra vez. Primero para el saneamiento, luego para los cables de R, más tarde excavaciones arqueológicas… el cuento de nunca acabar.

  9. ¡Puaj, puro lumpen! Y algunos bien colocaditos en el sistema del que tanto se benefician.

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