Utilizar un cargo público para beneficio propio es moralmente criticable, pero si defiendes la vida de los niños por nacer estás imponiendo tu moral. Así lo entiende el laicismo, que abomina de la moral o apela a ella según lo dicten sus conveniencias políticas e ideológicas. En esta entrada voy a ofrecer algunos ejemplos concretos de ese doble discurso de quienes invocan el relativismo moral mientras practican un aberrante absolutismo ideológico.
Ante la corrupción, apelan a moral
La corrupción política, como la propia expresión señala, es algo más que políticos que cometen delitos para aprovecharse del poder que se les ha otorgado: es el ambiente moral en el que se propicia esa conducta. Además de la maldad del hecho en sí, la corrupción provoca un grave daño moral a la democracia, pues genera el descrédito de las instituciones y siembra la desconfianza entre los ciudadanos. Esto parecen tenerlo claro los partidos laicistas, aunque casi siempre cuando los casos de corrupción afectan a sus rivales:
Cuando la moral no se ajusta a sus dogmas ideológicos, abominan de ella
Durante muchos años la izquierda laicista ha promovido un discurso relativista que ha servido para minar los diques éticos y morales de nuestra sociedad frente a los abusos de poder. Las consecuencias no sólo se reflejan en lo que comúnmente entendemos por corrupción política. Antes bien, la peor forma de corrupción política es que un político o un partido se aprovechen de su poder para imponer su voluntad incluso a costa de violar derechos humanos. Ese relativismo moral degenera en un discurso positivista que mina el fundamento ético y moral sobre el que se asientan las leyes, para sustituirlo por la opinión -acertada o no- de la mayoría, incluso a costa de lesionar derechos fundamentales como el derecho a vivir:
Incluso llegan a tachar de inmoral lo que es una obligación moral
Como ya ha ocurrido en otros momentos de la historia, la pendiente resbaladiza a la que nos empuja el positivismo acaba convirtiendo la ley, incluso una ley injusta e inmoral, en un principio moral. Así, si algo es contrario a la naturaleza humana -y lesiona los derechos humanos que se derivan de ella- pero la mayoría decide que debe imponerse por ley, entonces el capricho de la mayoría se convierte en ley y también en dictado moral, algo que casi siempre tiene consecuencias muy graves y puramente orwellianas, al convertir en mal en un bien que se debe imponer a toda la ciudadanía. Una vez más vuelvo al ejemplo del aborto, que el caso más claro y de consecuencias más terribles (118.359 víctimas según los últimos datos oficiales de 2011): frente a la obligación moral de respetar el derecho a vivir, el laicismo acaba tachando de "inmoral" que se defienda a los miembros más débiles e indefensos de nuestra sociedad:
Ciertamente, resulta significativo que la derecha parlamentaria, que ha renunciado a dar la batalla cultural frente al relativismo, ahora se vea sumida en un serio escándalo de posible financiación irregular del PP, que recuerda mucho al escándalo FILESA de financiación irregular del PSOE. Es lo que tiene asumir poco a poco los presupuestos ideológicos relativistas: acabas pareciéndote peligrosamente a ellos, en todos los sentidos.
---
(Imagen: M.C. Escher, 'Relatividad', fragmento)
No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico: |
Oct 7 | Murcia 🇪🇸 19:00h: Concentración en memoria de las víctimas de la masacre del 7 de octubre de 2023 |
Oct 10 | Madrid 🇪🇸 12:00h: Izado solemne de la Bandera de España en la Plaza de Colón a cargo de la UME |
Oct 12 | Sevilla 🇪🇸 18:00h: II Desfile de la Hispanidad, organizado por la Asociación Tercio de Olivares |
Comentarios:
Aguador
Puede ser que esto, aunque lo escribiera César Vidal, tenga visos de realidad. Y si fuera así explicaría buena parte del programa ideológico de ZP…
http://es.scribd.com/doc/46520232/La-Espana-de-ZP-experimento-masonico
8:45 | 21/07/13
aln
Es que para la izquierda el único crimen abominable, execrable y merecedor de la condenación eterna es el de no pagar impuestos. Claro, así tienen menos tela que repartirse cuando están en el poder.
Ya se pueden trocear 300 niños cada día, que eso es un derecho. Pero ¡ay de aqueln a quien se le pase por la cabeza hacer un trabajillo sin IVA! Aunque últimamente el PP no se diferencia mucho en este aspecto (ni en otros). Pero al menos visten mejor.
11:26 | 21/07/13
Alfonso
De todas las falacias políticas, ninguna me parece tan peligrosa como la del mito de la neutralidad política del estado. Y me levanto con Infocatólica dándome noticias alarmantes sobre la candidata de la derecha chilena, por lo visto sigue el mismo camino que el PP.
12:06 | 21/07/13
ioannes
Quizás no reparamos lo suficiente en que no poca gente de derechas no puede presentar batalla alguna al relativismo sencillamente porque ella misma ¡es relativista, a menudo hasta las cachas! Han optado por la arbitrariedad, por no atenerse a lo natural ni en general a la realidad, sino remitirse continuamente o casi a meras palabras, a tópicos, a eslóganes, a lo confuso, a «teorías» varias demostradamente falsas… En mi opinión, esto es lo que hay, sin pesimismo alguno porque aún queda mucho realismo potencial y activo en la sociedad… Las causas, ¿los culpables?, otro día: habría que hablar de asuntos harto delicados… Las soluciones, difíciles, duras, un abanico, aunque las haya más urgentes o fundamentales. Incluso -cosas rara- puede que exista algún «atajo».
14:04 | 21/07/13
Alfonso
Fe de erratas: quise decir el mito de la neutralidad «moral» del estado.
8:36 | 22/07/13
Dale Reed
Algunas de estas empresas, no todas, forman parte del sumario Gürtel. Si estos documentos contables no están falsificados, estaríamos ante la prueba de la financiación irregular del PP. Y estaríamos ante otras evidencias. Primera: que las presiones políticas (¡y judiciales!) contra Garzón, el primer instructor de Gürtel, escondían una estrategia defensiva que pretendía no disimular la broma de los anecdóticos trajes de Camps, sino ocultar la contabilidad oscura del PP. Segunda: que estas presiones políticas y judiciales querían reproducir una estrategia defensiva que ya había triunfado anteriormente (en efecto, en época del tesorero Naseiro, aparecieron pruebas de la financiación irregular del PP, aunque el Supremo las invalidó por defecto de forma). Tercera: que el partido que más se había ensañado con la corrupción de los demás acaba de recibir un golpe de bumerán de enormes proporciones.
13:54 | 25/07/13
Ángel
Hemos visto y conocido todo lo que la izquierda ha querido durante los últimos 35 años, nos los ham metido con baqueta, aun siendo todo falso y manipulado, como siempre. Ya es hora de que salga la verdad a prevalecer. Nadie se atreve a contar la verdadera Historia de España, tal y como fué en realidad, porque hay en cada esquina de cada colegio un espia de Rubalcaba que hace la mentira tenga mucha más fuerza que la verdad.
Los curas, sacerdotes y obispos deberían ser más contundentes contra las mentiras de la izquierda, sin el más mínimo temblor, ya que los malos son ellos, y ellos son los que tienen que temblar, porque alguien que no cree en Dios, no cree en sí mismo, por lo que vida se reduce en valores morales y en fracaso, que que carece de sentido común y de todo tipo de responsabilidades.
Hay que hacer películas más reales de la Guerra Civil Española, y contar cómo los comunistas fomentaron el Holocausto Católico, bien oculto por las izquierdas. Es momento de decir las verdades que son políticamente incorrectas. Hay que convertir el miedo en lucha por los derechos de las libertades si el más mínimo temor.
0:33 | 16/12/13
Opina sobre esta entrada: