Godzilla 2014

Ayer fui al cine a ver la reaparición de este monstruo clásico del cine japonés que ya protagonizó una película de Roland Emmerich en 1998. Ahora lo devuelve a la pantalla grande el director británico Gareth Edwards.

La gran ventaja con la que cuenta esta nueva película es, obviamente, un espectacular despliegue de efectos especiales y visuales. Se notan, también, influencias del cine posterior al 11-S: antes en las películas de catástrofes no veíamos tantas nubes de polvo en los derrumbamientos de edificios, y también se hace notar una mayor importancia a la vertiente militar, tratada con más seriedad en esta película que en la de Emmerich (aunque con ciertos errores: el portaaviones USS Saratoga, por ejemplo, causó baja en la US Navy en 1994 y estaba previsto que empezasen a desguazarlo este mes). En cuanto a los monstruos, nos encontramos esta vez con un Godzilla que responde mucho a la estética clásica y que, curiosamente, casi hace el papel de bueno. Los monstruos malos tienen un cierto parecido con el enorme bicho de "Cloverfield" (2008), con ciertos detalles del extraterrestre de las películas de la serie "Depredador".

Pasando a los protagonistas humanos, el papel principal lo lleva esta vez el también británico Aaron Taylor-Johnson, el chico de "Kick Ass" (2010), si bien con bastante más musculatura. Si en la de Emmerich el protagonista era un científico algo despistado, en esta nueva película Taylor-Joshson se pone en la pie de un EOD de la US Navy. Aunque me gustó más su papel en "Kick Ass", el joven se las apaña bien en una película en la que, por lo demás, el grueso de la acción no recae en sus espaldas. La chica de la película es la estadounidense Lizzie Olsen -en un papel modesto-, y entre los secundarios hay que destacar al ya veterano Bryan Cranston haciendo de Joe Brody, el padre del teniente.

En fin, se trata de una buena película que resulta muy entretenida y que deja boquiabierto a cualquiera con sus espectaculares escenas. Creo que merece la pena verla.