España no se rinde: algunas razones para mantener viva la esperanza en días oscuros

Elentir EN Vie 17·11·2023 · 7:01 13

Ayer se inició una oscura etapa de la historia de España con la reelección de Pedro Sánchez en pleno golpe socialista contra el Estado de Derecho.

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Unos días oscursos y tristes para España

Millones de españoles vivimos con preocupación este momento. Algunos han derramado lágrimas al ver como un tipo sin escrúpulos, que ha mentido a todo su país, ha logrado aferrarse al poder a base de comprar el apoyo de los enemigos de España mediante la promesa de demoler los pilares de nuestra democracia y poner en grave riesgo nuestra unidad nacional. Ahora mismo, España tiene el gobierno más corrupto de Europa, una corrupción que consiste en otorgar privilegios penales a cambio de algunos votos en el parlamento.

Yo no os voy a decir que no estéis tristes, porque en un momento así sólo pueden ver motivos de alegría quienes desprecian la separación de poderes y la igualdad ante la ley y, sobre todo, quienes desean una España débil y desunida. Sin embargo, que en estos días oscuros no haya motivos para estar alegres no significa que debamos perder la esperanza. Sé que a los más jóvenes les costará mucho entenderlo, que con 15 o 20 años es muy desalentador ver a tu país en este estado, pero no debemos dejarnos vencer por el desánimo y la desesperación.

Los sacrificios de nuestros antepasados en otros tiempos oscuros

Es especialmente en los días oscursos cuando debemos recordar lo que somos: españoles. Nuestro pueblo tiene una larga historia de la que nos gusta recordar los días de gloria, pero en ella hubo también tiempos de desgracia. España fue invadida varias veces y nuestros antepasados lograron liberarla, primero del yugo musulmán y después del yugo francés, a costa de muchos sacrificios.

En el pasado siglo, España fue uno de los pocos países de Europa que logró derrotar al comunismo y evitó convertirse en un satélite de la Unión Soviética. Además de nosotros, sólo los griegos pueden presumir de ambas cosas. En ambos casos, el precio a pagar fueron tres años de sangrienta guerra civil. España no sólo debe su temple a las victorias, sino también a los días difíciles. Son esos momentos duros los que han puesto especialmente a prueba lo que somos, nuestros valores, nuestros principios y nuestra capacidad de resistencia.

Hace muchos años que España no vive una guerra y la amplia mayoría de nosotros tenemos la fortuna de no conocer esa desgracia en primera persona, pero nunca debemos olvidar que somos libres porque otros asumieron muchos sacrificios, porque no se rindieron y tomaron la decisión de luchar cuando todo parecía perdido.

Las luces que tenemos en medio de la oscuridad

Muchos jóvenes que hoy participan en las protestas de estos días contra el golpe socialista en España eran unos niños o incluso no habían nacido cuando tuvo lugar otra rebelión cívica contra el socialismo, cuando gobernaba Zapatero. Antes de eso, España vivió otra rebelión cívica contra los terroristas de ETA tras el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco en 1997. Nuestra historia está llena de ejemplos de sana rebeldía en los que debemos inspirarnos en el momento actual. Un momento que es oscuro pero en el que no carecemos de luces que nos guíen.

Hoy en día, el golpe socialista tiene en su contra a numerosas instituciones, entre las que hay que destacar 171 diputados de la oposición, 11 gobiernos autonómicos y gran parte del Poder Judicial, incluyendo asociaciones de jueces y fiscales hasta ahora afines al PSOE, así como numerosas organizaciones de funcionarios, abogados, notarios, empresarios, etc. A eso debemos añadir que los socialistas y sus aliados sólo controlan una de las dos cámaras del Parlamento español, el Congreso. La oposición tiene mayoría absoluta en el Senado.

Debemos tener en cuenta que el PSOE tiene menos poder regional y municipal que nunca. Esto podrá servir de base para una oposición a sus medidas en múltiples niveles. Es nuestro deber animar y apoyar esa oposición, porque no hablamos de que el gobierno vaya a tomar medidas políticas más o menos discutibles, sino que va a intentar demoler nuestro Estado de Derecho. Fuera de nuestras fronteras tampoco nos faltarán apoyos. Debemos buscarlos y pedir que se pronuncien.

Por otra parte, nunca en la historia de España se vio una movilización cívica contra la izquierda durante dos semanas seguidas como la que estamos protagonizando muchos españoles durante estos días contra el golpe socialista. Estamos haciendo historia. Estas protestas no han acabado. Este fin de semana hay más movilizaciones convocadas en España (puedes verlas aquí) y también en otros países (Francia, EEUU, Luxemburgo, Reino Unido) para denunciar el golpe socialista en nuestra Nación.

Debemos desterrar el derrotismo, la desmotivación y el desaliento

Hay algo que debemos desterrar en estos días y son los discursos derrotistas, las palabras de desaliento, los mensajes desmotivadores y los llamamientos a que nos rindamos. Durante cientos de años, muchos españoles han asumido enormes sacrificios sin tener la certeza de que llegarían a ver sus frutos. Lo hicieron por amor a su Patria, por la generosidad de querer dejar una España mejor a los que estábamos por venir. Nuestro deber es defender España sin desesperarnos por el resultado, incluso teniendo presente que a lo mejor nuestro papel en la historia de nuestra Nación es mantener viva la llama de la resistencia para pasársela a otros y que ellos tengan más cerca la victoria.

La fuerza de los españoles reside en nuestra unidad y también en nuestro espíritu de servicio y de sacrificio. Es precisamente en los días oscuros en los que se pone a prueba lo que somos, así que seca tus lágrimas, deja a un lado el desánimo y empieza a pensar qué puedes hacer, por pequeño que sea, para lograr una España mejor. Puedes lograrlo metiéndote en política, manifestándote, estudiando, trabajando, haciendo activismo en las redes sociales o con un blog. Yo llevo 19 años publicando Contando Estrelas y me niego a rendirme.

¡Viva España!

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Foto: Elentir.