En 1941 tuvieron lugar dos masacres que, como otras muchas cometidas por el comunismo, son poco conocidas en casi todo el mundo.
El reparto de países pactado por la Alemania nazi y la URSS en 1939
En agosto de 1939, la Alemania nazi y la URSS firmaron el Pacto Molotov-Ribbentrop, que incluía un protocolo secreto por el que esas dos dictaduras se repartían varios países (Polonia, Lituania, Letonia, Estonia y Finlandia) y dos territorios que formaban parte de Rumanía: Besarabia, que en su mayor parte se corresponde con el actual territorio de la República de Moldavia, y el norte de Bucovina.
En aplicación de ese pacto, Alemania y la URSS invadieron Polonia en septiembre de 1939 y se repartieron ese país. La URSS invadió Finlandia el 30 de noviembre de 1939, una operación que resultó fallida por la tenaz resistencia finlandesa. A mediados de junio de 1940, la URSS invadió Lituania, Letonia y Estonia. A finales de junio de 1940 le llegó el turno a Rumanía. Tras la invasión de las citadas regiones rumanas, la URSS creó la República Soviética de Moldavia con el territorio de Besarabia, y la zona norte de Bucovina fue anexionada a la República Soviética de Ucrania.
La persecución religiosa contra los cristianos rumanos de Bucovina
Como ya habían hecho en 1917, los comunistas soviéticos desataron en el norte de Bucovina una persecución religiosa contra los cristianos ortodoxos de esa región, deteniendo y asesinando a decenas de sacerdotes. Esta región era de mayoría étnica ucraniana (un 47,5% de la población), con un 28,3% de rumanos y otras etnias que incluían a judíos, alemanes, polacos, rusos y húngaros. Más de 13.000 rumanos del norte de Bucovina fueron deportaros a Siberia por los soviéticos. Debido a la situación que sufrían bajo el dominio soviético, muchos rumanos de esa región intentaron huir al Reino de Rumanía.
La Masacre de Lunca del 7 de febrero de 1941
Los soviéticos cometieron crueles atrocidades contra quienes intentaron esa huida. El 7 de febrero de 1941, la URSS perpetró la Masacre de Lunca, en la que 600 civiles desarmados fueron asesinados cuando intentaban huir hacia Rumanía. Entre las víctimas había hombres, mujeres y niños. Las tropas soviéticas utilizaron ametralladoras para matar indiscriminadamente a estos civiles, enterrando sus cuerpos posteriormente en fosas comunes. Posteriormente, los familiares de los supervivientes fueron detenidos y enviados a Siberia, una práctica habitual en la URSS con aquellos que eran calificados como "traidores".
La Masacre de Fântâna Albă del 1 de abril de 1941
El 1 de abril de 1941 tuvo lugar una masacre aún peor. El NKVD soviético -el temible predecesor del KGB y autor, entre otros crímenes, de la masacre de Katyn contra 22.000 prisioneros de guerra polacos- hizo circular el rumor de que iban a permitir a los rumanos del norte de Bucovina pasar a Rumanía, en un intento de librarse de ellos. Creyendo que esos rumores eran ciertos, varios miles de aldeanos se reunieron cerca de la frontera. Llevaban banderas blancas y símbolos religiosos y fueron detenidos por el NKVD a 3 kilómetros de la frontera rumana.
Algunos supervivientes fueron enterrados vivos
Lo que vino después fue un crimen a sangre fría. Después de que los aldeanos ignorasen las órdenes del NKVD, los agentes soviéticos dispararon sus ametralladoras contra la multitud, a pesar de que los aldeanos iban desarmados y no protagonizaron ningún acto de violencia. Fueron asesinadas unas 2.000 personas, incluyendo hombres, mujeres, niños y bebés. Por si disparar de forma indiscriminada contra civiles desarmados no hubiese sido suficiente, los agentes del NKVD sepultaron en cinco fosas comunes a los asesinados y también a algunos heridos, enterrándolos vivos.
El horror de Fântâna Albă no se acabó ahí. Algunos supervivientes fueron torturados por el NKVD y arrojados a una fosa común, siendo también enterrados vivos. Tanto en la URSS como en la dictadura comunista rumana, toda referencia a las masacres de Lunca y Fântâna Albă estuvo prohibida. Tras la llegada de la democracia, en 2011 el Parlamento de Rumanía estableció el 1 de abril como día en recuerdo de los rumanos asesinados por los soviéticos en esas masacres y también de las víctimas de las deportaciones a Siberia.
Hoy en día, aquellas brutales masacres siguen siendo desconocidas en la mayor parte del mundo. Espero que estas líneas contribuyan a difundir su recuerdo y la memoria de sus víctimas.
---
Foto: Institutul Cultural Român.
No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico: |
Comentarios:
wladimir
esta es una clara y palpable…
muestra de lo que el Comunismo Sovietico (y el Putinismo actual) aliado con los comunistas locales le pueden hacer a una region o un pais entero una vez se toman el poder…..
19:31 | 1/04/24
Berto
Que no olviden los prorusos, que parece que hay bastantes, que eso es el comunismo puro y duro.
22:49 | 1/04/24
Opina sobre esta entrada: