El escritor británico J.R.R. Tolkien es conocido por ser el autor de una de las mejores obras épicas del siglo XX, "El Señor de los Anillos".
Las opiniones políticas de este escritor son mucho menos conocidas que su obra, ya que las puso por escrito en cartas privadas que fueron publicadas después de su muerte. Tolkien era católico e ideológicamente se le puede calificar como un conservador cercano al tradicionalismo. Muchas personas han querido ver en su obra una alegoría de conflictos de la época en la que vivió, pero él siempre rechazó las lecturas alegóricas y políticas de su obra.
Calificó como «mentirosos y calumniadores» a los propagandistas comunistas
En una carta a Herbert Schiro escrita el 17 de noviembre de 1957, Tolkien rechazó la lectura que algunos hacían de los orcos como comunistas: "Preguntar si los orcos «son» comunistas es para mí tan sensato como preguntar si los comunistas son orcos".
Con todo, la opinión de Tolkien sobre los comunistas era tan negativa como la imagen que dio de los orcos de su obra. En una carta escrita a su hijo Christopher Tolkien (que servía entonces como piloto de la RAF, la Real Fuerza Aérea británica) el 6 de octubre de 1944, el escritor británico se refirió a "la propaganda roja" presentando a sus autores como "mentirosos y calumniadores", y explicando la motivación última de esa propaganda: "el odio a nuestra iglesia es, después de todo, la única causa real y definitiva". Con ello, Tolkien se refería al caso concreto de España y a la sangrienta persecución anticatólica desatada por la izquierda antes y durante la Guerra Civil Española (1936-1939).
Consideraba a Stalin un «viejo asesino sediento de sangre»
Casi un año antes, el 9 de diciembre de 1943, en otra carta dirigida a Christopher, Tolkien calificó al dictador soviético Stalin como "viejo asesino sediento de sangre". El escritor británico reconoció que sonrió "con una especie de sonrisa enfermiza" cuando escuchó que ese dictador y asesino de masas "invitaba a todas las naciones a unirse a una feliz familia de personas dedicadas a la abolición de la tiranía y la intolerancia". Tolkien añadía: "Me pregunto (si sobrevivimos a esta guerra) si quedará algún nicho, incluso de tolerancia, para los reaccionarios atrasados como yo (y tú)".
El contacto de Tolkien con polacos exiliados en el Reino Unido
Hay un detalle en una de sus cartas que indica que Tolkien tuvo contacto con polacos exiliados en el Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial (recordemos que Polonia fue invadida por Alemania y la URSS en 1939 y muchos polacos lograron llegar hasta Francia y después a las Islas Británicas para seguir combatiendo desde allí).
En otra carta a su hijo Christopher escrita el 18 de enero de 1944, Tolkien comentaba que estaba aprendiendo el idioma polaco y se refería a un tal Poptawski (seguramente Popławski, tal vez un oficial polaco en Inglaterra), afirmando: "se preguntará pronto cómo me va". Tolkien añadía: "Pasará mucho tiempo antes de que pueda ayudarlo a idear un nuevo vocabulario técnico. El vocabulario se irá formando de todos modos (si es que todavía quedan polacos y Polonia)".
La opinión de Tolkien sobre el periódico del Partido Comunista
Hay otro detalle interesante relativo a la opinión del escritor británico sobre el comunismo. Aparece en una carta a su segundo hijo, Michael Tolkien (también aviador de la RAF), escrita el 12 de enero de 1941, es decir, cuando la Alemania nazi y la URSS aún eran aliadas. Tolkien comentaba: "es evidente que nuestros queridos y viejos amigos de la URSS están tramando alguna travesura" (se refiere al Acuerdo Fronterizo y Comercial Alemán-Soviético firmado dos días antes, por el que ambas dictaduras afianzaron su alianza de 1939).
A continuación, Tolkien se quejaba: "Mientras tanto, el "Daily Worker" se pregona en las calles sin ser molestado". El "Daily Worker" era el periódico del Partido Comunista de Gran Bretaña, fiel a Moscú, es decir, a los aliados de los alemanes que estaban bombardeando el Reino Unido.
Tolkien calificó a Hitler como «un pequeño canalla vulgar e ignorante»
Como se observa en sus cartas, la opinión del escritor británico sobre el nacional-socialismo era tan nefasta como su opinión sobre el comunismo. A fin de cuentas, él era un patriota y su país estaba en guerra contra la Alemania nazi. El 9 de junio de 1941, Tolkien escribía a su hijo Michael, en la que se refería a "ese pequeño ignorante colorado de Adolf Hitler", a quien atribuía una "inspiración e ímpetu demoníacos".
En otra carta a Michael escrita entre el 23 y el 25 de septiembre de 1944, Tolkien definió a Hitler como "un pequeño canalla vulgar e ignorante, además de otros defectos", y mostraba su rechazo al acto de los nazis de "declarar a los polacos y a los judíos como gusanos y subhumanos exterminables".
El rechazo de Tolkien al antisemitismo y a las teorías raciales de los nazis
El rechazo de Tolkien al antisemitismo nazi ya había quedado plasmado antes de la guerra. El 25 de julio de 1938, en una carta a su editor Stanley Unwin (que había negociado la publicación de una edición alemana de "El Hobbit" con la editorial Rütten & Loening de Potsdam), respondió a un requerimiento de la editorial alemana para confirmar el origen ario del escrito (ya que Tolkien era un apellido de origen alemán). Esa confirmación ("bestätigung", en alemán), provocó rechazo al escritor británico, que manifestó su rechazo a las teorías racistas de los nazis:
"Personalmente, me sentiría inclinado a negarme a dar cualquier Bestätigung (aunque sucede que puedo), y dejaría que una traducción alemana se quedara en el olvido. En cualquier caso, me opondría firmemente a que apareciera impresa una declaración de ese tipo. No considero que la (probable) ausencia de sangre judía sea necesariamente honorable; Tengo muchos amigos judíos y me arrepentiría de haber dado algún indicio de que suscribí la doctrina racial, totalmente perniciosa y anticientífica".
Ese mismo día, en una carta a la editorial alemana, Tolkien escribió un párrafo admirable rechazando el antisemitismo de los nazis:
"No soy de origen ario, es decir, indoiraní; hasta donde sé, ninguno de mis antepasados hablaba flamenco, persa, gitano ni ningún dialecto relacionado. Pero si he de entender que está preguntando si soy de origen judío, sólo puedo responder que lamento no tener antepasados de ese pueblo tan talentoso. Mi tatarabuelo llegó a Inglaterra en el siglo XVIII procedente de Alemania: la mayor parte de mi ascendencia es, por tanto, puramente inglesa, y yo soy súbdito inglés, lo que debería ser suficiente. No obstante, me he acostumbrado a considerar con orgullo mi nombre alemán, y seguí haciéndolo durante todo el período de la última y lamentable guerra en la que serví en el ejército inglés. Sin embargo, no puedo dejar de comentar que si las preguntas impertinentes e irrelevantes a este hijo se convierten en la regla en materia de literatura, entonces no está muy lejos el día en que un nombre alemán ya no será motivo de orgullo".
Bibliografía:
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Comentarios:
Berto
Tolkien fue un crack absoluto, un creador de mundos. Su opinión siempre es autorizada y pertinente. A mentes de ese calibre siempre hay que prestarles mucha atención, da igual que fallecieran hace mucho, su mensaje, acabando 2024, es muy actual.
Perdonad el cambio de tema, tengo que decir que después de meditarlo con calma, seguiré votando a VOX, es lo único que tenemos decente en el espectro político.
10:36 | 10/10/24
AlbertoAG
Al socialismo se le combate, tal como hizo Tolkien.
10:47 | 10/10/24
wladimir
etoy totalmente de acuerdo…
con la opinion de Tolkien acerca del Comunismo y el nazismo….al final ambos extremos son manifestaciones politicamente malignas que solo traen ruina y destruccion a los paises donde se establecen…
y lo unico que se hace con ellas…es combatirlas,tal y como Tolkien a su manera muy bien expresado….
13:02 | 10/10/24
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