El brete de casi todos los partidos por la pésima gestión de la gota fría

Hay ciertas circunstancias en las que los que más hablan y gritan son los que más deberían estar callados, por la cuenta que les trae.

Una violenta manifestación de la izquierda para proteger a Pedro Sánchez de toda crítica
Para el gobierno era más 'urgente' asaltar RTVE que enviar al Ejército a salvar vidas

La izquierda intenta cargar a Mazón con toda la culpa

En lo relativo a la catástrofe de la gota fría en España, este pasado fin de semana la izquierda y los separatistas de Compromís se lanzaron a intentar sacar tajada política a la tragedia con la violenta manifestación del sábado en Valencia, que centró sus críticas en Carlos Mazón, del Partido Popular y presidente de la Comunidad Valenciana, en un intento de proteger a Pedro Sánchez y a su gobierno.

Además de ello, durante la semana pasada, el PSOE lanzó una campaña en redes sociales contra Mazón, con el propósito de "ganar el relato" sobre la gestión política de este desastre. Así mismo, el Partido Popular ha puesto el foco en el gobierno de Sánchez, afirmando que ha dejado "muy sola y abandonada" a la Generalidad Valenciana.

La pésima gestión del gobierno de Pedro Sánchez

Ciertamente, aquí casi todos los partidos de las Cortes Valencianas están en un brete, por lo que deberían pensárselo muy bien antes de intentar utilizar esta tragedia contra sus rivales.

Empezando por arriba, la negligencia del gobierno de Sánchez (PSOE y Sumar) fue evidente, dando prioridad al asalto a RTVE para hacerse con el control del consejo de la televisión estatal y retrasando hasta 4 días el gran despliegue de las Fuerzas Armadas en la zona afectada, tal vez creyendo que la desesperación de los valencianos se volvería solamente contra Mazón. La ira del pueblo de Paiporta contra Sánchez el 3 de noviembre fue la más clara demostración de que los socialistas calcularon mal su estrategia.

La penosa gestión del gobierno de Carlos Mazón

Además de ello, el gobierno valenciano ha actuado de una forma penosa, con una sucesión de incompetencias que agravaron los efectos del desastre de la gota fría y que, además, echa por tierra la propia estrategia política del Partido Popular, consistente en huir de la batalla de las ideas y centrar todo su discurso en ofrecer una buena gestión. Además de ello, el PP difícilmente puede criticar al PSOE, pues el 31 de octubre Mazón agradeció a Sánchez su "cercanía" y "coordinación", un agradecimiento completamente absurdo y que además contradecía las críticas de la dirección de su partido al gobierno.

Si el gobierno vio incapaz a Mazón, ¿por qué no asumió el mando?

El PSOE tiene difícil criticar a Mazón sin pegarse un tiro en el pie. Si el gobierno valenciano era incompetente, ¿por qué el gobierno central no asumió el mando? Tenía mecanismos legales para hacerlo (por ejemplo, declarando una emergencia nacional, algo lógico siendo varias las regiones afectadas), pero no lo hizo porque dio prioridad a su estrategia política sobre las vidas de los afectados por la gota fría.

Si Mazón cree que el gobierno le dejó solo, ¿por qué no le cedió el mando?

Del mismo modo, si el gobierno valenciano se vio solo, pudo haber renunciado al mando de la gestión para dejarla en manos del gobierno central, pero no quiso hacerlo. Tal vez esa decisión fue debida a que si cedía el mando, el PP habría perdido su baza de presentarse como un buen gestor, una baza que ha acabado perdiendo de todas formas por la incompetencia del gobierno valenciano.

Compromís es aliado del gobierno de Sánchez: por eso le protege

Por otra parte, los separatistas de Compromís y sus socios de Sumar no pueden fingir que nada de esto va con ellos, como si fuesen un verso libre en la política regional valenciana y en la política nacional española. Sumar es socio de gobierno de Sánchez. El partido de extrema izquierda tiene cinco ministerios, además de la vicepresidencia segunda del gobierno. Además, Compromís está en el grupo parlamentario de Sumar y es aliado de Sánchez: sin su apoyo no seguiría en el gobierno. No les queda más remedio que proteger a Sánchez, como ya vimos el sábado en la citada manifestación, porque es su aliado.

El acierto estratégico de Vox al abandonar los gobiernos con el PP

He dicho antes que casi todos los partidos están en un brete, y no he hablado de Vox. Ese "casi" hace alusión precisamente al partido que lidera Santiago Abascal. Aunque muchos medios afines al PP criticaron aquello, la decisión de Vox de abandonar los gobiernos de coalición regionales con el PP el pasado mes de julio no fue sólo un acto de coherencia con los compromisos adquiridos con sus votantes en materia de inmigración ilegal, sino que además ha acabado siendo un acierto estratégico, que ahora permite a Vox criticar al PSOE y al PP con total libertad.

Vox ve refrendadas dos de sus líneas ideológicas

A ese acierto hay que añadir el hecho de que Vox es el único partido parlamentario que critica el Estado de las Autonomías, que ha demostrado sus peores consecuencias en este desastre, con un gobierno central que habla de la Comunidad Valenciana como si hablase de un país extranjero al que le tiene que pedir permiso para entrar en su territorio, y con un gobierno autonómico que se niega a ceder el mando a pesar de reconocerse abandonado por el gobierno central.

Añadamos a eso que Vox también es el único partido que critica disparates ecologistas que han influido en este desastre, como el rechazo a construir presas, el empeño de no limpiar cauces y el derribo de infraestructuras hídricas. Los promotores del pensamiento único progre pueden poner todo su afán en que su propaganda oculte los hechos, pero cuando ocurre algo así, los hechos son imposibles de ocultar y al final, como vemos ahora, los dogmas ideológicos de la izquierda, asumidos también por el PP, han acabado totalmente embarrados.

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Foto: Europa Press. El presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en una rueda de prensa conjunta el 31 de octubre de 2024.