Hay algunos que se preguntan si el Kremlin paga a sus propagandistas en todo el mundo. Yo estoy convencido de que no es así.
No descarto que Rusia pague a los propagandistas más influyentes, pero es imposible que sus tentáculos financieros lleguen a toda la legión de tontos útiles que tiene Putin en Occidente, gente que se ha dejado engañar por la propaganda rusa y que, además, contribuye a propagar sus patrañas. Hoy tenemos un ejemplo titulado "Avellana", de la misma autora que hace poco nos catalogaba como "gremlins" a quienes rechazamos que Occidente ceda ante Rusia.
Esta vez la autora dedica 641 palabras a escribir un artículo sobre la invasión rusa de Ucrania, sin citar la palabra "invasión" y sin escribir nada que pueda indicar que esta guerra fue empezada por Rusia. De hecho, la autora afirma: "nada garantiza un final rápido a la unprovoked war en Ucrania; o a que ésta no sea continuada de alguna forma por la UE". Confieso que me tengo que reír ante ese grado de manipulación que consiste en pasar por alto hechos evidentes para reescribir de forma desvergonzada lo que está pasando: la autora omite que esto es una invasión y que la invasora es Rusia, pero acusa a la UE de continuar la guerra.
La autora también habla sobre el permiso de Biden a Ucrania para utilizar misiles de largo alcance en territorio ruso, afirmando que es "saltarse otra línea roja impuesta por Moscú", pero no indica todas las líneas rojas que Moscú se ha saltado antes, unas líneas establecidas por el Derecho Internacional: la propia invasión, las masacres de civiles maniatados (Bucha, Izyum), los asesinatos de prisioneros de guerra ucranianos, el secuestro de miles de niños ucranianos, los ataques sistemáticos contra la población civil de Ucrania... De hecho, ese permiso de Biden viene motivado por los recientes ataques rusos con misiles contra zonas residenciales de Ucrania, ataques de los que la autora no habla, porque se trata de que Occidente parezca el malo de la película, aunque para ello haya que ocultar ciertos hechos a sus lectores.
Por supuesto, la autora no dice ni una palabra del apoyo de dictaduras como Corea del Norte, Irán y la China comunista a Rusia, dictaduras que vienen enviando material militar a los invasores (y en el caso de Kim Jong-un incluso miles de soldados) para seguir matando a civiles ucranianos. Para los putinistas, lo indignante es que Occidente apoye a los invadidos, pero no que los invasores reciban apoyo de regímenes terroristas para seguir alimentando una agresión criminal contra un país independiente. Sobre esto los propagandistas de Rusia no dicen nunca ni una sola palabra, como si no hablar de eso significase que no existe.
La autora termina quejándose de que ese permiso de Biden "representa un corte de mangas a la voluntad, expresada en las urnas, de casi ochenta millones de ciudadanos estadounidenses deseosos de pasar página en Ucrania". Nuevo eufemismo para ocultar la realidad: "pasar página". Porque decir "ceder ante Rusia" queda más feo. Por supuesto, la voluntad de millones de ucranianos de seguir existiendo como país parece importarle poco a la autora, que habla de Ucrania como si EEUU y Rusia tuviesen derecho a decidir el destino de un país soberano e independiente. ¿Cómo encajamos eso en la dicotomía patriotismo vs globalismo?
El artículo remata con lo siguiente: "parece que el orden del mundo surgido en 1945 no es más que un generador de caos". Así pues, la autora es incapaz de decir que Rusia comete una invasión contra un país vecino, pero descalifica el orden internacional basado en reglas surgido tras la Segunda Guerra Mundial. ¿Esa opinión se debe al hecho, tal vez, de que Rusia se está pasando ese orden por la entrepierna? Cabe preguntarse si la autora prefiere el desorden previo, en el que grandes potencias como Alemania, la URSS y Japón invadían países enteros (Austria, Checoslovaquia, Polonia, Lituania, Letonia, Estonia) o partes de ellos (China, Finlandia, Tailandia), masacrando a su población.
En fin, es penoso ver como las mentiras de Rusia están calando en una parte de la derecha, haciendo que asuma la defensa de un tirano como Vladimir Putin, que está cometiendo toda clase de atrocidades contra el pueblo ucraniano, simplemente porque hay que encajar eso a martillazos en el discurso de cierto "antiglobalismo", según el cual o estás con Putin (pretendido referente para los patriotas del mundo) o estás con un Occidente malvado y perverso, caricaturizado como si fuese el origen de todos los males. Es la misma basura argumental que los comunistas ya utilizaron para justificar la invasión germanosoviética de Polonia en 1939, presentando a británicos y franceses como culpables del estallido de la Segunda Guerra Mundial, simplemente porque Hitler era entonces aliado de su admirado Stalin. Es una vergüenza que haya gente de derechas comprando esa basura de discurso.
No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico: Pulsa aquí para suscribirte |
Comentarios:
AlbertoAG
Lo peor es que este no será el último disgusto que uno se llevará al leer La Gaceta de la Iberosfera. Por suerte, este sector que provoca a veces disgustos a los lectores no es mayoritario todavía.
Aún así, todavía quedan muchos columnistas que se niegan a comprar el relato prorruso.
8:09 | 29/11/24
Opina sobre esta entrada: