La alianza del gobierno de Pedro Sánchez con la dictadura comunista de China es un asunto turbio sobre el que sabemos muy poco.
Pekín utiliza la economía para extender su poder político por el mundo
A pesar de las críticas que está recibiendo desde dentro y fuera de España por esa alianza con un régimen antidemocrático y de partido único, hoy Sánchez ha vuelto a defender a esa dictadura, afirmando que "China es un socio imprescindible a la hora de hacer frente a los desafíos globales", entre los que ha citado "la lucha por la emergencia climática, la financiación al desarrollo o la lucha contra la desigualdad". De forma significativa no ha citado la democracia y los derechos humanos, pues eso en la China continental, gobernada por el dictador Xi Jinping, no existe.
Tal vez los españoles no se den cuenta de lo que significa esa alianza de Pedro Sánchez con el gigante asiático. España corre el riesgo de convertirse en una colonia china, si no lo es ya, y no solamente en términos económicos. A fin de cuentas, la dictadura comunista de Pekín no sólo utiliza sus prácticas de "dumping" para apoderarse de mercados exteriores con fines meramente económicos, sino que la economía es para Xi Jinping una forma de aumentar su influencia y su poder político en el mundo, mientras China aumenta considerablemente su poder militar en la región de Indo-Pacífico.
Los efectos de la alianza entre Sánchez y Jinping: las comisarías ilegales
Para los residentes del país asiático en España, la alianza entre Sánchez y Jinping hace que España ya no sea un sitio seguro para los disidentes chinos. Hay una noticia de hace tres años que fue muy reveladora sobre esas consecuencias de dicha alianza. En septiembre de 2022, la ONG Safeguard Defenders destapó una red de 54 centros de policía ilegales chinos en 30 países de 5 continentes, señalando que 230.000 ciudadanos chinos han sido "persuadidos" a regresar a su país por esos centros de policía ilegales. Según esa investigación, España es el país con más comisarías ilegales chinas: nueve en total, ubicadas en Madrid, Barcelona, Valencia y Santiago de Compostela.
Curiosamente, esa información tardó en llegar a los medios españoles. Finalmente, un mes después, cuando la noticia empezó a circular, el gobierno de Sánchez dijo que investigaría el asunto. Han pasado casi tres años y de la supuesta investigación no se supo nada. El gobierno no anunció ningún resultado al respecto, ni siquiera de forma extraoficial. El asunto ha sido tapado por el gobierno sin más. Paralelamente, Sánchez seguía visitando China: lo hizo en 2023, 2024 y ahora en 2025, convirtiéndose en uno de los destinos más frecuntados por el dirigente socialista español.
Los cristianos chinos perseguidos y deportados por el gobierno de Sánchez
Además, mientras esperábamos el resultado de esa supuesta investigación del gobierno, en noviembre de 2023 un disidente chino en España destapó que el gobierno de Sánchez estaba deportando a cristianos chinos perseguidos por la dictadura comunista, a pesar de que habían solicitado asilo. Un asilo negado por el gobierno, a pesar del alto nivel de persecución que los cristianos sufren en China y mientras el gobierno reparte inmigrantes ilegales por toda España.
Después de destaparse el asunto, la Fundación Española de Abogados Cristianos logró frenar la deportación de una mujer cristiana china que iba a ser devuelta a su país. Se desconoce el destino que han corrido los que sí fueron deportados. Lo que quedó claro es que el gobierno de Sánchez actuó como cómplice de la dictadura de Pekín en la persecución a cristianos fuera de sus fronteras. Para eso sirve la alianza de Sánchez con esa dictadura: para que la falta de libertad que existe en China se extienda también a España.
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Foto principal: La Moncloa. Reunión entre Xi Jinping y el presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, durante una visita del dictador chino a Madrid en 2018.
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Comentarios:
AlbertoAG
A saber qué les habrá pasado a los cristianos chinos deportados, pero nada bueno puede ser. Es muy probable que, si no los han matado, estén en algún campo de concentración.
Es inmoral mirar hacia otro lado mientras siguen ocurriendo estas cosas en el mundo.
8:19 | 13/04/25
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