Público, Jerusalén, TVE y la censura

Lo que veis sobre estas líneas es el vídeo del programa "Españoles en el Mundo" dedicado a Jerusalén. Fue emitido en TVE el pasado 7 de diciembre y colgado en la web de la cadena pública como las demás emisiones del programa. El pasado miércoles TVE retiró este vídeo de su web, cediendo, entre otros, a las protestas de un blog en el que se podía leer un comentario plagado de insultos antisemitas. El 28 de diciembre Público se incorporó a las protestas tachando al programa de "sionista" y de "casi insultante". El diario ultraizquierdista, que en 2009 acogió en su web una viñeta antisemita denunciada por el Observatorio del Antisemitismo en España, cargaba contra el programa de TVE por no fijarse en cuestiones políticas: "'el conflicto' es la esencia de Jerusalén e ignorarlo es, para muchos, tomar partido".

Público tacha al programa de "publirreportaje sionista" y "fraude" por no politizarse

Que el programa, respetando su línea habitual, no se convirtiese en un espacio político y se centrase, como siempre, en las vivencias personales de españoles que residen en otros países, llevó a Público a tacharlo de "publirreportaje sionista" y "fraude". El diario de Mediapubli, además, se valía de las declaraciones de un español al que presentaba como "periodista free lance", que acusaba al programa de TVE de seguir "el peligroso juego de despolitizar" Jerusalén. Una simple búsqueda en Google lleva a encontrar que el tal "periodista free lance" escribe en una web en la que se presenta a sí mismo de esta forma: "Actualmente trabajo para el Comité Nacional Palestino de la Campaña Boicot, Desinversiones y Sanciones al Estado de Israel." La web ultraizquierdista Relebion.org contiene docenas de artículos de este periodista desde 2004, entre ellos uno de septiembre de 2009 titulado "La necesidad del Boicot al Estado de Israel" en el que afirmaba: "Es hora de traer la guerra a casa."

Seis invitados, tres de ellos no judíos: "básicamente" judíos y sionistas, según Público

Público también mencionaba la valoración sobre el programa de TVE de su corresponsal en la zona: "Básicamente dan su opinión españoles judíos que han emigrado a Israel y que sintonizan con el pensamiento sionista más tradicional." Un simple vistazo al vídeo que os traigo descubre una realidad muy distinta: de los seis entrevistados, la mitad no son judíos. En el minuto 16:30 se ve a un cocinero madrileño diciendo: "no soy judío". En el minuto 19:25 empieza la entrevista a un fraile franciscano. Más adelante, interviene un periodista barcelonés que hablando de las religiones que se dan cita en Jerusalén, confiesa: "yo creo en el Barça". ¿Éstos son los peligrosos sionistas que señala Público?

Público ya consiguió en 2010 que Apple retirase un contenido de su web

Ésta no es la primera protesta de Público que lleva a la retirada de contenidos de una web. Como bien recordaréis, el pasado 25 de noviembre Público acusaba a Apple de aprobar una aplicación que "incita a la homofobia", en referencia a la Declaración de Manhattan, un texto contrario a los matrimonios entre personas del mismo sexo. En el texto de su noticia, Público acusaba a la App Store de Apple de "volverse fascista en Italia y en España" por sendas aplicaciones que contenían discursos de Mussolini y Franco. El 1 de diciembre Público titulaba que "Apple recula" y que había retirado la aplicación de la Declaración de Manhattan frente a las presiones de ese periódico y de otros medios.

Por hacer una protesta como ésta, un columnista de Público nos acusó de "censura"

Como ya apunté aquí al día siguiente, estos boicots de Público a otras empresas tienen su ironía. Y es que por criticar la publicidad en la web de Apple de un medio que ofende a mucha gente -el argumento usado por Público para cargar contra Apple y contra TVE-, un medio que incluso ha distribuido libros de un genocida como Lenin, y por conseguir que Apple retirase ese contenido, en mayo del año pasado un columnista de Público nos acusó a varios blogueros liberales de insultar y de ejercer la “censura”, e incluso nos atribuyó -sin aportar ni una prueba- supuestas amenazas a Apple, presentándola como una empresa extorsionada.

Por lo visto, pedir a una empresa que retire contenidos que alguien considera ofensivos no es "censura" si lo hace un periódico de ultraizquierda.

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