Lleva su discurso de victimismo y odio a los hombres hasta extremos absurdos

Surrealista: Carmen Calvo vincula el cambio de la hora con la "resistencia al machismo"

Ayer la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, participó en el XIII Congreso Nacional para la Racionalización de los Horarios, en el que hizo unas declaraciones cuanto menos sorprendentes.

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Durante su intervención, Carmen Calvo pronunció las siguientes palabras:

"El tiempo de las mujeres históricamente no ha sido nunca contabilizado en términos económicos, nuestro trabajo ha sido gratis, nuestro trabajo ha sido por el papel que el patriarcado nos otorgaba como madres, esposas, hijas... en función de nuestro sexo y de nuestro género. Nuestro tiempo no existía, y por lo tanto se daba por entregado el 100% a una causa mayor que era la ordenación jerárquica y machista de una sociedad. Por eso alterar el tiempo es también una resistencia al machismo de la sociedad".

Podéis ver en este vídeo a la propia Calvo pronunciando esas palabras:

El esperpento marxista que ha robado el nombre del feminismo

Esa declaración de Carmen Calvo es un claro producto del feminismo de género. El feminismo original defendía la igualdad de derechos y de oportunidades para las mujeres, una igualdad que se ha alcanzado en las sociedades occidentales. Hoy en día, en cualquier país democrático las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres y pueden optar a cualquier trabajo. Sin embargo, una vez conquistada esta igualdad, surgió otro movimiento radicalmente distinto que robó el nombre de ese feminismo original para plantear algo que nada tienen que ver con la igualdad de derechos. El feminismo de género, surgido de la extrema izquierda, aplica la tesis marxista de la lucha de clases a los sexos y afirma que la sociedad se divide entre mujeres oprimidas y hombres opresores. Ya no se busca la igualdad, sino extender un victimismo paranoico, para el que cualquier cosa se interpreta como un intento de oprimir a las mujeres, desde invitar a una chica a un café a rascarse la barba, pasando por cosas como celebrar el día de San Valentín y también el amor romántico, que Carmen Calvo propuso liquidar hace unos meses.

Ahora resulta que también los horarios son machistas, y cambiarlos es una forma de "resistencia al machismo". De risa. ¿Se da cuenta Calvo de que entre los partidarios de dejar los horarios como están hay también muchas mujeres? ¿Es que se cree que ella es la única persona legitimada para hablar en nombre de todas las mujeres, cuando su partido ni siquiera ganó las últimas elecciones?

¿El perfil de Calvo es el de una mujer oprimida?

Lo que ya resulta grotesco es oír hablar a Carmen Calvo como si la que estuviese hablando fuese una mujer de Arabia Saudí. Calvo es una de tantas mujeres españolas que ha estudiado en una universidad pública, que se ha doctorado y que ha ocupado puestos ejecutivos muy bien pagados. Su carrera política empezó en 1994 y no ha cesado desde entonces, según se puede ver en su currículum oficial: consejera del Consejo Económico y Social de Córdoba de 1994 a 1996, consejera de Cultura de Andalucía de 1996 a 2004, parlamentaria autonómica entre 2000 y 2004, diputada entre 2004 y 2011, ministra de Cultura entre 2004 y 2007, vicepresidenta del Congreso de los Diputados entre 2007 y 2008, secretaria de igualdad del PSOE desde 2016 y vicepresidenta del Gobierno desde junio. ¿Y aún tiene la cara de ir de oprimida? Los oprimidos somos los contribuyentes -hombres y mujeres- que estamos costeando su carrera política, oiga.

Calvo también ha debido olvidar que la persona más adinerada de su Gobierno es una mujer, Isabel María Oliver Sagreras, secretaria de Estado de Turismo, con un patrimonio que supera los 2 millones de euros. ¿La señora Oliver también es de esas mujeres cuyo tiempo, según Calvo, "no ha sido nunca contabilizado en términos económicos" y cuyo trabajo "ha sido gratis"? Actualmente Calvo cobra más de 6.000 euros al mes como vicepresidenta, poca cosa si tenemos en cuante que cuando era ministra de Cultura cobraba más de 12.000 euros mensuales. Y eso sin contar el coche oficial y otros lujos. Una vida de rica que pagamos millones de españoles, tanto mujeres como también esos hombres contra los que Calvo vierte su odio un día sí y otro también.

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(Foto: Vicepresidencia del Gobierno)

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Comentarios:

  1. Hristina Asenova

    Esa mujer es tán tonta, tán cutre y tán fanática, que no entiendo, ¿como ha llegado a ministra? Es que no lo veo normal, un ministro sea del partido que sea, debe trabajar para la gente, no crear enfrentamientos y ser moderado en sus discursos – todo lo que esa mujer no es.

  2. Sharovarov

    Pero, ¿con lo de «alterar el tiempo» se refiere exactamente al cambio de la hora que tuvimos por ejemplo en octubre, cuando tuvimos que atrasar los relojes una hora para poner el horario de invierno?

    Hristina, «tan» nunca lleva tilde.

  3. Eduard

    Pero al final ¿qué es lo machista y patriarcal?¿qué haya cambio de hora en función de la época del año o que haya un horario igual todo el año? Es que no me ha quedado nada claro.
    Y esta mujer es la vicepresidenta de España, un país con más de 45 millones de personas… Manda eggs. Esta frase de la señora Calvo ya ha batido el récord mundial de estupidez.

  4. Blanca

    La única limitación que tiene esta señora es la de su propia tontería. No se entendería que fuese ministra si no la hubiese puesto ahí otro descerebrado como ella.
    Per la cuestión ya no es discutir si valen o no valen para gobernar, sino ¿a qué esperamos para echarlos del gobierno? Porque lo considero de máxima urgencia.

  5. Luís Rodríguez-Caso Serna

    Esta señora socialista la noto fuera de lugar, con comentarios impropios de su formación Universitaria, son comentarios propios de una mente gastada por los años, tal ves su elevada edad sea la causante de estos tremendos fallos de redacción ( nada menos que la VICEPRESIDENTA DEL GOBIERNO DE ESPAÑA) ¿ EN QUE MANOS ESTAMOS?…

  6. Sharovarov

    Más discriminación contra los hombres por parte de esta demoniocracia: «El Supremo rechaza que las madres deban indemnizar a los padres que descubran que no son los padres biológicos».

  7. Luis Recinos

    Increíble hasta los extremos a los que pueden llegar este tipo de personajes. Es evidente que para las feministas y los LGTBI, todo lo que hagan o digan lo hacen como una muestra de fervor revolucionario y resistencia a la opresión del heteropatriarcado hegemónico…incluyendo vivir como respetables burgueses decadentes y gozar de todas las prebendas y privilegios que ese mismo sistema ha logrado a través de muchos siglos.

  8. Lorenzo

    Creo, Elentir, que deberías cambiar el titular eliminando los dos puntos.

    Quedaría así: «LA SURREALISTA CARMEN CALVO…» 😉

  9. Si queréis ver más surrealismo, os animo a ver los primeros 6 o 7 minutos de la charla de Carmen Calvo en el vídeo publicado por la Vicepresidencia del Gobierno (es de donde cogí el fragmento que publico aquí):
    http://www.mpr.gob.es/multimedia/videos/Vicepresidenta/Paginas/2018/151118vice_esade.aspx

    Estuve a punto de incluir varios minutos de vídeo, porque no tiene desperdicio. Es un absurdo total.

  10. pacococo

    Creo que si la señora Calvo no existiera habría que inventarla, es un portento de la Naturaleza, no creo que en estepaís existan muchas personas como ella.

    Sin duda hay personas más tontas, pero son conscientes de sus limitaciones y suelen quedarse en sus casas y mucho menso hablan en público.

    Aunque tal vez su jefe, el doctor…

  11. Luna

    Ya hubiera querido ramón Gómez de la Serna un discurso así para proferirlo desde su conocido elefante de las conferencias dadaístas.

    Pero la Calvo es discriminatoria y kronófoba a más no poder. Pues lógicamente cada uno tiene derecho a sentir la hora con que más se identifique, es mentira eso de que se nace en una hora determinada. Como no puede ser de otra manera, uno elige la hora en que lo hace. En fin, el LGTBpatriarcado que nos oprime y nos aliena. Ya ni transhorari@s/os/x/y/z podemos ser.

    Oye, y que han luchado mucho, porque también cambiamos de día cada 24 horas, de semana cada siete… y así hasta llegar al milenio, que también lo cambiaron las mujeres. «menos mal».

    Lo que yo me pregunto es qué rábanos tendremos que hacer los hombres para que también se reconozcan un día nuestros derechos y alcanzar así la «igualdad» esa que cada día existe menos.

  12. Asdlmpd

    Vamos a ver: un presidente de gobierno no suele rodearse de personas más inteligentes que él. Sí acaso, más preparadas en un área concreta pero no más listas en general: se supone que el más espabilado debe ser él, que para eso es el líder. Una vez sentado esto, debemos comprender las evidentes dificultades a las que se enfrenta el «doctor» para cumplir esta norma no escrita. Encontrar a alguien más limitado es poco menos que imposible en su caso. Sin embargo, en esta ocasión lo ha conseguido. La dama boba nunca le hará sombra. La dama boba podría incluso hacerle parecer inteligente… mmm… bah, que tontería… lo retiro.

  13. Una cosa que se me viene a la mente….., no será que una vez conseguida la igualdad de derechos y oportunidades para hombres y mujeres en la sociedad, estas últimas siguen siendo incapaces (por simple naturaleza, digo!) de obtener resultados igualitarios?.
    En este caso, la siguiente batalla sería: Si resulta que, efectivamente, estamos incapacitadas por derecho propio para alcanzar los mismos niveles del hombre en esta sociedad, hagamos que el hombre se rebaje a los nuestros degradandole en todos los aspectos posibles!. Así conseguiremos una igualdad efectiva!.
    Sin ir más lejos, esta señora podría estar dando una buena muestra de esta incapacidad (en lineas generales, vale?, hay mujeres por ahí muy capacitadas, aunque no es eso lo que yo más valoro precisamente), porque digo yo…, con tantos estudios y tantos puestos relevantes como ha ocupado, como es posible que diga tantas tonterías?.
    Pues posíblemente porque sabe que nadie la va a criticar sus insensateces por el pánico escénico a ser automáticamente tachado de machista, aparte del pánico que por sí misma transmite. Bueno, nadie menos alguien como yo que, primero dudo que esta señora me lea, y segundo que a mis 68 años me /%&$·$·&//((/&%$· de lo que esta señora o algunos lectores me puedan tachar.
    Un afectuoso saludo a todos («todos» neutro, como siempre).

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