Desvelan el amplísimo concepto de 'bulo' que utiliza el Gobierno en su campaña de censura
La polémica por las declaraciones del General Santiago, lejos de estinguirse, volvió a avivarse ayer con una información publicada por un medio afín al Gobierno.
La Guardia Civil recibió órdenes de vigilar "bulos" que generen "desafección" al Gobierno
La Cadena SER, propiedad del Grupo PRISA y a la que el Gobierno filtra frecuentemente todo tipo de informaciones, publicó anoche una información en la que se refiere a unas órdenes remitidas a las comandancias de la Guardia Civil el 15 de abril, es decir, cuatro días antes de que el General José Manuel Santiago afirmase que la Benemérita trabaja para "minimizar ese clima contrario a la gestión de crisis por parte del Gobierno". El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, dijo que esa afirmación fue un "lapsus", pero en el vídeo se ve al General leyendo la contestación.
En la citada información de la SER, muy mal redactada, la emisora afirma que el correo remitido a la Guardia Civil tenía como fin "identificar noticias falsas y fake news" (el entrecomillado es de la SER, que por lo visto desconoce que fake news significa "noticias falsas") que -y esto ya forma parte del email en cuestión- fuesen "susceptibles de provocar estrés social y desafección a instituciones del Gobierno". Según la SER, el correo "lo envió el Estado Mayor a todas las zonas y comandancias" y en él se hace referencia a la "desafección a las instituciones del Gobierno". Anoche El Mundo y Vozpópuli, que también han tenido acceso al escrito, confirmaron esto.
Un concepto de "bulo" en el que cabe cualquier noticia incómoda para el Gobierno
Tanto el Gobierno como sus medios afines han intentado zanjar esta polémica afirmando que el único propósito de la Guardia Civil era combatir los bulos, pero la propia Cadena SER deja claro en su noticia de anoche que el objetivo en cuestión es más amplio. De hecho, ese documento mete en el saco de "bulos" el concepto "desinformación", mucho más amplio y ambiguo y que permitiría criminalizar casi cualquier información en base a lo que decida el Gobierno a su conveniencia.
De hecho, la SER se refiere a informes previos de la Unidad de Coordinación de Ciberseguridad, creada el 24 de junio de 2019 (cuando Marlaska ya llevaba un año al frente del Ministerio del Interior) en los que se describe el concepto "desinformación" de la siguiente forma: "conjunto de publicaciones en Internet, principalmente en redes sociales, de noticias falsas, medias verdades o información altamente subjetiva presentada como objetiva, con una finalidad desestabilizadora, de polarización de la opinión pública en asuntos de interés general, o de estrés social, quebrando la confianza en los poderes y representantes públicos". Como podemos ver, ya no se trata de combatir mentiras ni noticias falsas, sino también "medias verdades" o incluso "información altamente subjetiva", unos conceptos difusos en los que el Gobierno puede meter todo aquello que le incomode.
Dicen vigilar los bulos mientras se dedican a lanzarlos
De hecho, el diputado de Podemos Pablo Echenique tachó de "bulo" la propia polémica por las palabras del General Santiago, en un comentario en su cuenta de Twitter que recibió una avalancha de críticas, sobre todo teniendo en cuenta que dos días antes la CNMC había desmentido un bulo lanzado por el propio Echenique en el que afirmó que Jesús Encinar, uno de los cofundadores de Idealista.com, estaba siendo investigado por ese organismo "por posibles prácticas delictivas". Hay que señalar que al referirse a supuestos delitos, las palabras de Echenique rebasan la condición de bulo para adentrarse en el ámbito de la difamación.
Recordemos, además, que el propio Sánchez difundió un bulo sobre un estudio de la Universidad de Oxford, que según él "otorga a España la puntuación más alta de los países occidentales". Lo grave es que esa mentira la pronunció en sede parlamentaria, en un intento de engañar a los representantes de los españoles. Así pues, lo que tenemos es que quienes lanzan bulos desde el Gobierno y sus aledaños se dedican a tachar de "bulo" cualquier noticia crítica con la gestión del ejecutivo.
La mayor amenaza de un Gobierno a la libertad de expresión en nuestra democracia
Estamos ante una descarada campaña de censura, orientada y diseñada para amedrentar a los que acusan al Gobierno de haber actuado tarde y mal. Y lo peor es que en medio de esa campaña, la Fiscalía General, en manos de la socialista Dolores Delgado, dejaba caer una amenaza de 5 años de prisión para los que difundan bulos. Si nos atenemos al amplio concepto que maneja el Gobierno, que abarca casi cualquier cosa, nos encontramos ante la mayor amenaza contra la libertad de expresión lanzada desde un Gobierno en todos los años que llevamos de democracia; una amenaza lanzada, para colmo, mientras el Gobierno disfruta de unos poderes extraordinarios de los que está abusando para lesionar también otros derechos fundamentales. Una actuación que sí merece ser castigada con la cárcel.
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Comentarios:
Luis Carlos
El gobierno más embustero vigilando los bulos es como si a Harley Quinn, la novia del Joker, le nombraran directora de un pabellón psiquíatrico.
Yo he sido sancionado en Facebook por publicar un meme en la que los nazis admitían ser socialistas, es decir, que no estaba haciendo apología del nazismo, sino denunciar las raíces socialistas de este. Y después de más un año y medio me tachan de «mostrar imágenes de desnudos» a un enlace a un artículo de actuall sobre víctimas de regímenes comunistas, con fotos históricas de cadáveres. ¿pero cómo se atreven a acusarme de «mostrar desnudos» en una cuenta en la que tenía agregados a familiares y gente que me conocía cara a cara? ¿y no es sospechoso que me denuncien por algo publicado más de un año antes, cuando compartía una docena de enlaces cada día? Me temo que he sido víctima de una purga virtual. Cuando Vox llegue al poder debe mandar a los jueces anular esas sanciones injustas bajo falsas acusaciones de violar sus normas. Lo que han hecho conmigo ha sido censura, mientras que permiten a otros una grosería que en la calle es para denunciarlos a los juzgados por injurias, como por ejemplo un fotomontaje con la cabeza de Rajoy sobre un retrete completamente sucio a más no poder, por decirlo delicadamente.
Se están comportando como una dictadura bananera, y encima cada vez más desesperados. Serán capaces de chantajearnos con permitirles irse de rositas o volamos todos por los aíres. Temo que van a amañar las elecciones, como si no fuera la primera vez, y a los socialistas le van a regalar más escaños de los que realmente se merecen y un pacto de silencio por algunos chanchullos, a cambio de que colaboren en el derrocamiento de Pedro Sánchez. Lo que pasa es que ni Trump ni Venezuela se van a callar que la izquierda española ha sido subvencionada con dinero extranjero de forma ilegal.
8:17 | 21/04/20
Luna
Hay una parte de la declaración del capitán Santiago a la que creo que no se ha dado la necesaria importancia, la frase que viene justo antes de la que se ha comentado más:
«Evitar el estrés (o stress) social que produce esta clase de bulos.»
Naturalmente, lo primero que sucede es que en esta orden se presupone que dichos bulos existen y en una u otra forma, se «tipifican», porque esta oración no tendría sentido de ningún tipo sin este presupuesto. Es de suponer además que «El Gobierno no miente», por lo que al menos dos partidos políticos que se supone componentes del mismo (Podem@s y PSOE) quedan exonerados en esta criba. [Gobierno es también el resto de partidos del arco parlamentario, no sólo su presidencia, pero bueno, «aceptamos barco como animal acuático»]…
ORDENAN LA CENSURA
Y MANIPULAN
Se da la orden consigna o precepto de «evitar el estrés social». Y esto quiere decir el alcance o consecuencia de aquellas noticias u opiniones que se han de suponer o calificar (por la orden recibida) como bulos. Atención: Aquí hay dos partes: «Estrés» es una y «social» es otra.
En la palabra «estres» (qué fea es) encontramos la tensión emocional, el nivel de nerviosismo y/o ansiedad elevados ante una situación, estado anímico que espera una respuesta rápida y contundente, cuando no se dispara y prefiere iniciar muchas a la vez, todo un proceso que consiga alterar aquello que lo provoca. ¡Qué coincidencia!, justo la respuesta que nos da el cuerpo cuando sabemos que hay más de 20.000 muertos y siguen de fiesta, la misma reacción que nos agita por dentro cuando se filtra alguna noticia real entre las muchas horas de relleno que nos ofrecen los «informativos» oficiales.
Por tanto, la orden es de ANESTESIAR ante los hechos, lo mismo que hacen esos soporíferos que ignoran que su atril ya se aguanta con una sola pata, que no necesita a un pesado que lo agarre durante toda la tarde. ¡Oigan, que la siesta ya se duerme sola!
Y luego está lo de «social», porque al parecer se trata de un «estrés social». Esto ya queda muy claro: La orden es la de que unos Cuerpos de Seguridad y Defensa nacionales tienen que influir sobre el resto de la sociedad para conseguir la susodicha anestesia, o sea que la reacción se ha de controlar en todos, filtrando opiniones y contenidos y consiguiendo que todos reaccionemos como el ordenante quiere. Y el ordenante es aquél que decide que no habrá más declaraciones por parte de militares a raíz de que el Capitán de la Guardia Civil haga uso de su libertad de expresión para comunicarnos este hecho, que nada tiene de bulo.
Orwell se quedaba corto. ¿1948? ¡Qué va, 2020!
No es de extrañar que la secuela sea «minimizar este clima contrario a la gestión de crisis por parte del Gobierno», consecuencia pura y lógica de la oración anterior en la alocución mencionada. Queda todo muy claro, tanto en lo político como en lo social.
Lo de la definición de bulo que nos ofrecen es ya algo de antología porque el mejor ejemplo para que la podamos comprender no es otro que los contenidos de estos «informativos» monopolizados por el Gobierno y sus pesados. «noticias falsas, medias verdades o información altamente subjetiva presentada como objetiva».
No sé si se han dado cuenta de que lo que causa merecida desafección es precisamente su constante besar a los micrófonos y mirar a la cámaras, la generación de tantas incógnitas como ellos mismos causan con los silencios sobre lo que ellos mismos anuncian a medias y luego cae en el mayor de los secretos. No encontramos ninguna noticia completa, siempre hay lagunas y partes borradas sobre sus errores cometidos, sus decisiones a corto o largo plazo y sus mentiras flagrantes.
Y luego, se nos está informando entre líneas. Dicen ahora que los niños podrán salir a la calle a partir del día 27 de Abril y que «se está estudiando una nueva prórroga»… Eso es mentir con la ingenuidad de un niño. Dado que el decreto actual del estado de alarma alcanza hasta el fin día 26, si no hubiera prórroga no sería necesaria esta decisión; ergo YA han decidido unilateralmente que van a prorrogarlo, excusatio non petita accusatio manifesta. Y esto me estresifica de mala manera, porque se han pensado que todos somos burros y por eso votamos al socialismo, que se fijen una vez más en el recuento de los votos y recuerden que no es así.
Tienen un problema muy grande, ya no nos cabe mayor estupidez a los españoles, hemos llegado al límite de papar moscas, tenemos ya el vientre macizo de ellas y no cabe ni una más. Por eso reaccionan así, porque necesitan aún más estupidez pero se ha acabado (igual que el dinero). Las cosas ya se nos opinan solas y esto no hay forma de pararlo, ni sus lavados de cerebro ni sus patéticos guiones sobre intrigas de palacio, sacados de mohosos pliegos de cordel de gacetilla romántica.
Si en toda una semana no comento por aquí va a ser que me han deportado al Goulag por este bulo ultraderechistas (u otros). Allí nos vemos.
11:48 | 21/04/20
Luna
Luis Carlos:
¿Te refieres al mismo Facebook que ha detectado miles de cuentas nuevas abiertas a la vez que sólo contienen mensajes de alabanza al Gobierno, todas ellas abiertas en el extranjero y a nombre de mujeres que no existen, sin otra actividad que la de enviar masivamente esos apoyos tan sospechosos?.
11:51 | 21/04/20
Martín Doncel
Tanto desde el gobierno, como desde la oposición, la izquierda en general, y el PSOE en particular, han empleado siempre con auténtica maestría las herramientas de agitación y propaganda, de las que la difusión de bulos, es una de las más antigüas y frecuentemente utilizadas.
Junto con sus organizaciones satélites (Sindicato de Estudiantes, Juventudes Socialistas, UGT, CC.OO y otras miles de entidades semipúblicas que en forma de asociaciones, fundaciones, observatorios, plataformas, etc. en sus diferentes ámbitos materiales y territoriales, han venido fabricando y difundiendo toda clase de mentiras, sabiendo que lo eran, con el fin de crear un clima social favorable a sus postulados o desfavorable a colectivos a los que se pretende perseguir o eliminar.
Sólo por poner un ejemplo, y así a bote pronto, podría citar unos cuantos, para justificar la persecución de la Iglesia Católica que, no olvidemos, se tradujo en la destrucción de más de 20.000 iglesias y en el asesinato de más de 6.000 religiosos y miles de fieles católicos inocentes, la izquierda, y el PSOE no fue ajeno a ello, difundió durante la Segunda República, entre otros, el bulo de que las monjas y los frailes daban caramelos envenenados a los hijos de los obreros.
Sin ir tan atrás. Con el fin de poner en marcha una vuelta de tuerca más en la ansiada venganza del PSOE contra los combatientes del bando nacional y en particular contra el General Franco y crear un clima favorable a la profanación de su tumba, el gobierno de Pedro Sánchez fabricó varios bulos respecto al Valle de los Caídos, que fueron ampliamente difundidos por la casi totalidad de los medios de comunicación nacionales e internacionales, con gran exito.
El primero de ellos el que señalaba al Valle de los Caídos, no como una Basílica católica, que es lo que es, sino como el mausoleo de Franco. Algo que, además de falso, es una barbaridad tan soberbia como decir que la Catedral de Burgos es el mausoleo de El Cid, o que la Catedral de Granada es el mausoleo de los Reyes Católicos.
Se difundió igualmente, que el Valle de los Caídos es obra del trabajo forzoso de presos políticos, cuando lo cierto es que fué construido por los empleados de las empresas adjudicatarias en el concurso público. Según el director de las obras,el arquitecto Diego Méndez González, diariamente trabajaban en su construcción unos 2000 hombres, de los cuales sólo unos 45 eran presos, que además habían solicitado expresamente ese destino, siendo seleccionados de entre las miles solicitudes que se habían recibido y que cobraban el mismo salario que los trabajadores libres y vivían junto con sus familias en las instalaciones habilitadas al efecto.
Igualmente, desde la izquierda se difundió el bulo de que miles de trabajadores murieron a lo largo de los veinte años que duró su construcción. Pero según el propio Dr. Ángel Lausín que trabajó como médico durante 18 años en el Valle, sólo se registraron 14 muertes a lo largo de los veinte años que duró la construcción, sin poder establecer cuántos, de estos 14, eran presos.
13:16 | 21/04/20
JuanM
¿Y la desafección que ha alimentado la Ser, La Sexta, Antena 3, Público, TVE, TV3, el PSOE-PSC, el PNV, ERC, Jordi Pujol etc., etc. de millones de españoles hacia la propia España en Cataluña y Vascongadas principalmente? De esa desafección ¿nada hay que decir y condenar?
Menuda dictadura se está implantando en España, que además se ve claramente que se está dirigiendo desde fuera. Esta es la ocasión que ni bordada para los seculares enemigos de España se les ha presentado. Yo, de Felipe VI, iría preparando las maletas, porque después de los españoles sometidos a él lo largan. Pero vamos, blanco y en botella.
15:27 | 21/04/20
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