El crimen que provocó la disolución de los Riazor Blues en 2003 y su siniestra secuela

La identificación de uno de los presuntos autores del asesinato del joven Samuel como un ultraizquierdista merece un repaso a las hemerotecas.

Detenido un ultraizquierdista afín a los Riazor Blues por el asesinato de Samuel en La Coruña
Extrañas omisiones y contradicciones sobre el cobarde asesinato de Samuel en La Coruña

El asesinato de Manuel Ríos cuando intentaba parar una paliza de los Riazor Blues

En octubre de 2003, un seguidor del Deportivo de La Coruña, Manuel Ríos Suárez, de 31 años, murió tras sufrir una brutal agresión cuando intentaba frenar a miembros de los Riazor Blues que golpeaban a un joven de un equipo rival, el Compostela. El agresor le dio una patada en el abdomen que le reventó el bazo, provocándole la muerte en unos minutos. El crimen provocó una conmoción en Galicia. A raíz de lo ocurrido, los Riazor Blues anunciaron su disolución: "No sabemos quien fue el que manchó de sangre nuestras ilusiones, pero no podemos negar que fuimos la catapulta y, nada más lejos de nuestras intenciones. Para esto, mejor apartarse". Dijeron entonces. Integrantes de esa peña ultra reconocieron que "el juguete" se les había ido de las manos.

Su novia fue asesinada a los pocos meses tras recibir amenazas

El asesinato de Ríos siguió coleando en los medios y en los tribunales. La novia del asesinado, Clara Castro, reconoció al agresor pero no coincidía con el único detenido por este caso, que fue absuelto a falta de pruebas. En el funeral de Ríos, un hombre "alto, delgado y rubio" se acercó a Clara y le dijo: "la próxima eres tú". La amenaza no tardó en cumplirse: en febrero de 2004, pocos meses después de la muerte de su novio, Clara fue asesinada en su propio piso en el municipio coruñés de Cambre. Dos años después, el único detenido por el asesinato de Ríos quedó absuelto por falta de pruebas. A día de hoy, este crimen sigue sin autor reconocido por la Justicia.

La pelea multitudinaria en la que murió Javier Romero

La supuesta disolución de la peña ultra del Deportivo duró muy poco. Al cabo de unos meses, los Riazor Blues volvían a ocupar su grada en el estadio de Riazor. El crimen ocurrido en Santiago no sirvió para enderezar el rumbo de ese grupo: siguió siendo una de las peñas más violentas del fútbol español, viéndose implicada en diversas reyertas con otras peñas ultras. El 30 de noviembre de 2014 un miembro de Riazor Blues, Francisco Javier Romero Taboada "Jimmy", murió durante una multitudinaria pelea entre esa hinchada coruñesa y el Frente Atlético en Madrid. El fallecido tenía nueve antecedentes policiales, incluyendo robos, malos tratos y tráfico de drogas. Entre los implicados en la pelea llegó a haber 101 detenidos de ambas peñas.

La brutal paliza de tres miembros de Riazor Blues a un joven en La Coruña

Otro incidente violento en el que se vio implicada la peña coruñesa ocurrió en la noche del 23 al 24 de julio de 2016. La Voz de Galicia tituló así la noticia: "En prisión varios líderes de Riazor Blues por una brutal agresión". Los hechos fueron muy parecidos a los que rodearon el asesinato de Samuel: un joven caminaba por la calle con su pareja cuando dos individuo le dieron un golpe. El joven les llamó la atención pero la cosa quedó ahí, hasta que los individuos volvieron al lugar con más acompañantes, tiraron al joven al suelo y empezaron a darle golpes y patadas. El agredido sufrió varias fracturas en la mandíbula y el pómulo, además de la pérdida de "prácticamente todas las piezas dentales".

La paliza se produjo en la misma zona donde fue asesinado Samuel

Durante la paliza, a uno de los agresores se le cayó el móvil, en cuya funda estaba metido su DNI. La novia del agredido se lo dio a la Policía. El dueño del móvil fue detenido cuando fue a denunciar su robo a la Policía esa misma mañana. El agresor todavía tenía restos de sangre en su ropa y marcas en sus manos y en sus nudillos, producidos por la brutal paliza que acababa de cometer. En los días siguientes fueron detenidos otros dos de los autores de la agresión. La brutal agresión tuvo lugar en la zona de marcha del Orzán, el mismo sitio de la paliza mortal a Samuel, que ha sido el colofón de años de agresiones y tumultos en ese lugar, denunciados constantemente por los vecinos. Los tres miembros de Riazor Blues fueron condenados a sólo dos años de prisión cada uno, y ni siquiera llegaron a pisar la cárcel, pues el tribunal suspendió su ingreso con la promesa de que no volviesen a cometer delito alguno en el plazo de dos años.

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Foto: @RB1987Oficial.