El asunto de Polonia y Las Ketchup: todo un retrato surrealista del periodismo español

En 1983 el grupo Golpes Bajos se hizo famoso con su tema "Malos tiempos para la lírica". Si viviese Germán Coppini, hoy podría cambiar "lírica" por "periodismo".

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Decenas de medios españoles anunciaron la actuación de Las Ketchup en Polonia

Un ejemplo esperpéntico de los tiempos que corren para el periodismo lo hemos tenido estos últimos días. Desde que el digital Notes from Poland difundió el 3 de diciembre la noticia de que el grupo español Las Ketchup actuaría en un concierto ante los soldados polacos que vigilan la frontera con Bielorrusia, multitud de medios españoles se hicieron eco de esa información. Era una noticia jugosa, de ésas que te generan visitas fáciles (y las visitas son publicidad, y la publicidad es dinero). Una simple búsqueda en Google revela la tremenda cantidad de medios que publicaron la noticia. Y como suele ocurrir cuando muchos medios distintos dan la misma noticia, algunos se columpiaron alegremente a ver si captaban más clicks.

Magnet, Vozpópuli y Público: premios a las mayores columpiadas

El 4 de diciembre, el término "Las Ketchup" se convertía en tendencia en Twitter, así que el sensacionalismo pisó el acelerador. Y ya tenemos a los campeones. Ese día, Magnet.com publicaba este titular: "¿Qué fue de Las Ketchup? Al parecer están dando conciertos en apoyo al gobierno de Polonia". El lumbreras que redactó eso convirtió una actuación en "conciertos" y el apoyo a las tropas en "apoyo al gobierno de Polonia". El tipo que tituló así la noticia se dice "periodista".

Otra columpiada antológica fue la que pudieron leer los lectores de Vozpópuli: "El Ejército polaco recurre a 'Las Ketchup' para proteger su frontera con Bielorrusia". Nadie quiso poner su nombre firmando esto. Lo entiendo. El concierto ni siquiera era en la frontera, pero ¿qué importa ese detalle irrelevante? En el tercer lugar podríamos poner un artículo del panfleto ultraizquierdista Público relacionando a la "ultraderecha" con el "Aserejé". Ya no te cuento lo que publicaría ese panfleto si su redacción se entera de que te gustan Hombres G o Los Nikis.

Sólo este blog informó de que Las Ketchup al final no actuaron

Y por fin llegó el fin de semana, cuando iba a tener lugar el famoso concierto. En vista de la expectación que generó la noticia, era lógico imaginar que algún medio estaría pendiente del primer canal de la Televisión Polaca, por el cual se iba a emitir el espectáculo desde la base aérea de Mińsk Mazowiecki. Era lógico, sí, pero el periodismo español escapa a toda lógica. El domingo por la noche, ya terminado el evento, sólo se pudo leer una crónica en español del concierto en una web: Defensa y Aviación, que es una de las secciones de este blog. Y como publiqué ahí, resulta que al final Las Ketchup ni siquiera actuaron.

Ahora viene lo más divertido. O mejor dicho, lo más surrealista. Después de que decenas de medios españoles diesen la matraca con el concierto de las cordobesas, desde el domingo ni un solo medio -salvo este blog- ha dado noticia de que Las Kecthup ni siquiera actuaron en Polonia. Posiblemente pocos periodistas sabían como seguir en directo el concierto (era tan sencillo como buscar en buscar en la web de la Televisión Polaca; si lo haces con Google Chrome, te traduce automáticamente los contenidos al inglés).

Tal vez la mayoría de los medios estuvieron esperando a que alguna agencia les diese la noticia hecha (muchos medios se dedican hoy, básicamente, a hacer copia y pega, sin más, de lo que les envían las agencias). Y ni Efe ni Europa Press ni ninguna otra siguieron el concierto, por lo que parece. Al menos algún medio podría haber hecho una simple búsqueda en Google a ver cómo había sido el concierto. Se habría encontrado con la entrada de Defensa y Aviación y les bastaba hacerse eco de lo publicado ahí. Pero ni eso.

Un medio ha seguido anunciando la actuación hasta este lunes

Ha habido algún caso directamente desternillante. El domingo por la noche, horas después del concierto, FormulaTV publicaba un tuiteo con este titular: "Las Ketchup viajan a la frontera de Polonia con Bielorrusia para apoyar a las tropas polacas". Lo vi el domingo por la noche y no daba crédito: seguían difundiendo la noticia que publicaron ese mediodía sin preocuparse siquiera de comprobar si hubo actuación. Más divertido aún: este lunes por la mañana, FormulaTV titulaba otro tuiteo así: "Las Ketchup, presentes en Polonia para apoyar a las tropas desplazadas a la frontera con Bielorrusia". La noticia enlazada era la del domingo al mediodía, pero el tuiteo -posiblemente automatizado- ponía un texto que hacía pensar que leerías una crónica.

El lado de la noticia que hace que la cosa pierda su gracia

¿Todo esto te ha parecido gracioso? Pues ahora démosle la vuelta al chiste y veamos su lado trágico: ¿cuántas informaciones que nos llegan a diario por esos y otros medios son tratadas con la misma falta de rigor? ¿Cuántas veces nos tragamos sin más informaciones que se han publicado con la misma ligereza en decenas de medios? Todo esto tiene mucha gracia así, a primera vista, hasta que te das cuenta de que los medios moldean, en gran medida, nuestra visión de la sociedad, ya que a través de ellos nos enteramos de muchas de las cosas que ocurren (o a menudo de lo que ellos quieren que nos entermos). Y es en este punto cuando se te quitan las ganas de reír.

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Foto: Cuenta de Instagram de Las Ketchup.