Hace unos días, la Fuerza Aérea Italiana celebró su centenario con un gran espectáculo aéreo en Pratica di Mare, que duró tres días.
Uno de los participantes en este festival aéreo fue un viejo caza Lockheed TF-104G-M Starfighter, la versión biplaza de uno de los aviones más bellos y legendarios de la Guerra Fría: un auténtico cohete con alas que era capaz de alcanzar una velocidad máxima de 2.125 km/h.
El avión que participó en el centenario de la Fuerza Aérea Italiana tiene el apodo de "Black Beauty" y matrícula civil de EEUU, N991SF, y es propiedad de Starfighters Aerospace, una compañía privada que opera desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, en Cabo Cañaveral, Florida (EEUU), y que presume de tener la única flota mundial de F-104 en condiciones de volar. Posee ocho cazas de este tipo.
Para esta ocasión, Starfighters Aerospace decoró la deriva de este TF-104G-M con un motivo alusivo al centenario de la Fuerza Aérea Italiana. Para este avión, este vuelo era algo especial. Y es que el "Black Beauty" sirvió en la Fuerza Aérea Italiana con el numeral MM.54258 . Estaba asignado al 20º Grupo de Adiestramiento Operativo de la 4º Stormo (Ala), con base en Grosseto. Fue retirado del servicio en 2004.
Según apunta The Aviationist, el "Black Beauty" regresó a Italia el 3 de junio desmontado y a bordo de un C-130J Super Hercules de la Fuerza Aérea Italiana. Hay que tener en cuenta que el alcance de un F-104G en ferry (es decir, a tope de combustible y sin armamento) era de 2.623 km, insuficiente para hacer un viaje desde EEUU a Italia.
Podéis ver aquí dos vídeos de la exhibición en la que participó este TF-104G-M, acompañado por un Eurofighter Typhoon, un F-35 Lightning II y un F-86 Sabre. El primero de ellos ha sido publicado por Paddy Patrone y el segundo es de Vintage Aviation News (subid el volumen de los altavoces, el sonido es espectacular):
Una de las cosas que más llaman la atención del vídeo es la intensa estala de humo del TF-104G-M, en comparación con la que desprendían los otros aviones.
Esa estela se hizo aún más intensa al romper la formación e iniciar un ascenso:
Estas estelas de humo son la huella típica de los turborreactores J79, el potente motor que llevaba el F-104 y también el F-4 Phantom II. Si bien tenía la ventaja de proporcionar un gran empuje (algo ideal para las trepadas, en las que el F-104 era algo espectacular) y una gran velocidad, el gran inconveniente de este motor es que esa estela delataba la posición del avión. Hoy en día hay motores más eficientes, de ahí que ya se vean cada vez menos estas cosas.
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Comentarios:
wladimir
interesante…
12:07 | 26/06/23
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