La lección que Feijóo no quiso aprender en la ciudad en la que vivió antes de irse a Madrid
ENLa vida nos da muchas oportunidades de aprender buenas lecciones en nuestro entorno más inmediado, y algunos las desperdician.
Los años en los que el PP ganaba las elecciones locales en Vigo
Hoy en día, Vigo es conocida por las mayorías abrumadoras de su gobierno local. Desde 2015, el socialista Abel Caballero ha venido encadenando mayorías absolutas, como resultado de una forma de hacer política que es una mezcla de circo, populismo y caciquismo. Pero no siempre fue así: desde 1991 hasta 2015, el Partido Popular ganó todas las elecciones locales en esta ciudad. En 1995 el PP incluso ganó con una rotunda mayoría absoluta, obteniendo 15 de los 27 concejales.
El problema que el PP tiene en Galicia es que, a falta de un partido como Vox que movilice a aquellos votantes que somos reacios a votar al PP, necesita él solo movilizar mayorías absolutas para poder gobernar, algo que no es nada fácil. Cuando no consigue eso, lo que ha venido ocurriendo desde hace años es que el PSOE se apoya en los separatistas del BNG para gobernar allí donde no gana. Esta fórmula fue la que permitió al PSOE gobernar en Galicia, junto al BNG, entre 2005 y 2009.
El pacto que el PP ofreció al socialista Abel Caballero en 2014
Por supuesto, ha habido dirigentes en el PSOE que no tragan al BNG, un partido de extrema izquierda que empezó su andadura siendo el socio de Herri Batasuna en Galicia y que hoy es el socio de Bildu. El más famoso de esos dirigentes socialistas era Francisco Vázquez, exalcalde de La Coruña, cuyas mayorías absolutas en esa ciudad le permitieron evitar tener que buscar el apoyo de los separatistas. Abel Caballero tuvo que convivir con el BNG durante unos años, desde que llegó a la alcaldía con su apoyo en 2007 hasta que su pacto se rompió en febrero de 2014.
Para entonces, a pesar de haber perdido las elecciones locales de 2007 y de 2011, Abel Caballero ya llevaba casi dos legislaturas en el poder, lo que le otorga a cualquier alcalde una considerable incercia política de cara a unas nuevas elecciones. Como Caballero se había quedado en minoría, el Partido Popular tuvo la "feliz" idea de firmar un pacto de gobierno con el alcalde socialista en mayo de 2014. El PP alegó que lo hacía por "responsabilidad", pero lo que consiguió fue dar oxígeno a Abel Caballero en su momento de mayor debilidad. Unos meses después, en las elecciones locales de 2015, el PSOE logró la mayoría absoluta en Vigo (17 concejales) y el PP se quedó con sólo 7 concejales.
Feijóo repite el error ofreciendo un nuevo pacto al PSOE
Muchos desconocen este dato, pero Alberto Núñez Feijóo era vecino de Vigo en aquella época (y lo siguió siendo hasta que en 2022, tras asumir la presidencia nacional del PP, se mudó a Madrid). Por entonces combinaba esa vecindad con su trabajo en Santiago de Compostela como presidente del gobierno gallego. Feijóo debió tomar nota entonces de los riesgos de pactar con el PSOE y de querer ser tan progre como ese partido, pero no lo hizo.
Este miércoles, Feijóo ha ofrecido un pacto a Pedro Sánchez, después de que el presidente del PP acudiese a las últimas elecciones generales con el lema de "derogar el sanchismo". Seguramente Feijóo quería aparentar ser un hombre de Estado, como el PP de Vigo en 2014 cuando le ofreció un pacto a Abel Caballero, pero lo que ha conseguido es que el PSOE se burle de él. Con esa propuesta de pacto, Feijóo no sólo transmite una imagen de debilidad (e incluso de falta de dignidad, por suplicar el apoyo de un gobernante sin escrúpulos), sino que además le da un balón de oxígeno a Sánchez, al presentarlo como un socio fiable, en contra de lo que el Partido Popular ha venido advirtiendo en sus mensajes.
Lo que esto puede significar -ojalá me equivoque- es que asistamos a una repetición de lo ocurrido en Vigo, con un Sánchez crecido por la oferta de pacto del PP, que le sirve para presentarse como el político con el que todos quieren pactar: desde los separatistas y la ultraizquierda al PP. Todos menos Vox. Recordemos, por cierto, que en enero el PP acusó falsamente a Vox de acudir al "rescate" de Sánchez, a pesar de que el partido que preside Santiago Abascal siempre ha rechazado todo pacto con los socialistas. ¿Cómo deberíamos calificar ahora el pacto que Feijóo ha ofrecido Sánchez?
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Foto: Efe.
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Comentarios:
Begoña
¿Qué me he perdido?.¿ No era este señor y su partido los que en campaña electoral decían ser los únicos que podían acabar con el sanchismo? Vox malo, nosotros los redentores. Y ahora….. Mi socio fiable el sanchismo. De verdad, el PP traidor , pero ahora antes de coger el poder. Mal vamos.
¿Y qué opinas de la oferta de cambiar el nombramiento de senadores? ¿No es un sueño sanchista?
20:11 | 30/08/23
Pau
Contesto con una sensata opinión del President Tarradellas: «en política lo que no se puede hacer es el ridículo».
22:21 | 30/08/23
Maria
Ya nos es familiar la afinidad de Feijóo por los socialistas (creo recordar que él fue votante del PSOE). Aunque no he podido enterarme si el PP entró en ese gobierno del PSOE o solo lo apoyó sin más,
Creo que quien tiene quien llevarse mucho ojo con los pactos es Vox. Vemos que mucha gente desprotica del PP, pero luego los vuelve a votar.
Sin embargo, creo que a Vox le está costando cara su falta de ambición o perspicacia (no lo sé) a la hora de pactar. El ofrecimiento de Abascal a Feojóo parece que le está pasando factura y el regalazo de Vox a López Miras en Murcia de hace cuatro años creo que es lo que ahora hace que el PP vuelva a quererlo gratis y pasa lo que está pasando.
22:36 | 30/08/23
FranciscoJavier
Como dijo Borges de los peronistas: los del PP no son ni buenos ni malos, son incorregibles
22:36 | 30/08/23
escoces
Lo de Vigo y su alcalde Abel Caballero es un tema que llamaría ‘incrédulo’. Este personaje es el mejor alcalde del mundo. ¿Porque? Porque sabe mentir mejor que cualquier otro político del planeta. Es una combinación del Mago de Oz y el Flautista del Hamelín.
Dejara un legado de inversiones inútiles e insostenibles (coste de mantenimiento) para los próximos 50 años que tendrán que pagar los nietos de los nietos de los actuales ciudadanos.
El último que cierre la puerta a esta gran ciudad que has sido literalmente ‘violada’ por un alcalde narcisista y malvado.
10:04 | 31/08/23
escoces
Y lo digo públicamente porque lo conozco muy bien y el a mi (por mis criticas hasta que introdujo la ley mordaza hará unos 5 años) en los medios de comunicación de la ciudad.
10:05 | 31/08/23
wladimir
al parecer
Feijoo y sus secuaces estan acostumbrados a hacer pactos con otros partidos en Galicia…con razon ya el PP tenia a Galicia como si feudo…
por lo visto haciendo pactos a veces con quien no le conviene…y por eso se quemo algunas veces..y ahora el PP despues de hablar mal del Regimen pretende pactar con ellos?….y encima les da garantias?…en verdad Feijoo y el PP no han aprendido absolutamente nada de sus pasados errores…
13:11 | 31/08/23
Armentarius
Supongo que la justificación de Núñez será decir que “por él no ha quedado”; es decir, que ha propuesto al otro gran partido una alianza “para evitar extremismos”. Es lo que suele llamarse “sentido de Estado” (esta es una de las opciones en la encuesta que nos plantea Elentir).
El error, a estas alturas de la película, es creer que el PSOE y sus franquicias no actúan como la “ultraizquierda”. Las almas cándidas insisten en ver diferencias entre Sánchez y sus socios comunistas o separatistas, pero el hecho es que gobiernan con ellos o apoyándose en ellos. Y cuesta mucho distinguirlos. Lo sabemos muy bien en Navarra, igual que en Cataluña desde los tiempos del siniestro Montilla. Que en otras regiones el comportamiento de los cargos socialistas sea algo más templado contribuye, por desgracia, a mantener la engañosa imagen de moderación que, me temo, tanto les beneficia (véase el resultado de los últimos comicios en Cataluña y en otros lugares).
Y no pensemos que esos votos, en parte procedentes de la inercia del felipismo, se dan solo entre quienes tienen escasa formación y son fácilmente manipulables. También altos cargos de partidos que deberían ser de derecha compran la versión edulcorada del socialismo, aun habiendo sufrido su reiterado desprecio. No hace falta dar nombres. En Navarra hay uno bien prominente que no escarmienta. Y en el ámbito nacional… ¡qué les voy a decir que ustedes no sepan!
Ánimo, mucho ánimo. Y mi agradecimiento a quien nos brinda este lugar para comunicarnos.
14:07 | 31/08/23
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