El socialismo usando al Estado para acosar a sus rivales: ¿la Stasi vuelve a Alemania?

Alemania está viviendo un terremoto político por un informe elaborado por una de sus agencias de inteligencia sobre un partido político.

Alemania y el sesgo de hablar de 'extrema derecha' pero no de 'extrema izquierda'
El socio alemán del Partido Popular negocia una alianza con la extrema izquierda prorrusa

La BfV clasifica a AfD como 'extrema derecha' con un informe que no ha publicado

Este viernes se supo que la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BfV), agencia de contrainteligencia dependiente del Ministerio del Interior de Alemania (actualmente en manos de la socialista Nancy Faeser, del SPD), ha clasificado oficialmente al partido Alternativa por Alemania (AfD) como "extrema derecha". Este hecho no implica que AfD vaya a ser ilegalizada, pero facilita a la BfV un mayor seguimiento y control sobre las actividades de ese partido político de derecha nacionalista. Curiosamente, la BfV basa esa clasificación en un informe que no ha sido publicado. ¿Acaso hay algo que ocultar?

Críticas contra la BfV de los liberales y de un exdirector de esa oficina

Éstos y otros detalles han sido duramente criticados no sólo desde la clase política (la medida ha sido criticada por los liberales del FDP, que fueron socios de gobierno de Olaf Scholz hasta 2024) y los medios. Además, Hans-Georg Maaßen, director de la BfV entre 2012 y 2018, también ha criticado esa clasificación, afirmando:

La agencia de inteligencia interior alemana, la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BfV), no es una institución independiente, sino una agencia subordinada al gobierno federal. ¡Quien diga lo contrario miente! Como director de la Oficina para la Protección de la Constitución, siempre he defendido que el gobierno no la utilice indebidamente para combatir a la oposición política. Lamentablemente, el actual gobierno federal, bajo el liderazgo del ministro Faeser, de tendencia radical de izquierdas, ha utilizado indebidamente la agencia de inteligencia interior como instrumento para perseguir a la oposición política.

El nerviosismo de algunos políticos alemanes con AfD y sus causas

El nerviosismo de parte de la clase política por ese partido en Alemania tiene tres motivos. El primero y más importante de ellos es su discurso crítico contra la inmigración ilegal y masiva, que está generando problemas de convivencia, de inseguridad y de violencia en ese país al igual que ocurre en otros. Lo más torpe de la reacción de los rivales de la AfD es negar el problema, demonizando a quienes están recogiendo el creciente temor de una parte considerable de la sociedad alemana a los efectos de esa inmigración ilegal y masiva en su vida diaria.

¿Se investiga a la derecha prorrusa pero no a la izquierda prorrusa?

En segundo lugar, muchas críticas a AfD se dirigen a su afinidad hacia Rusia, una afinidad que ya señalé aquí en 2022. Es, de hecho, el aspecto por el que yo nunca le otorgaría mi voto a un partido como ése. El caso es que AfD no es el único partido prorruso de Alemania.

En la pasada legislatura europea, los ultraizquierdistas de Die Linke votaron más veces a favor de Rusia que AfD. Además, hay que señalar que hace algunos años la BfV clasificó como extremistas a algunos grupos que forman parte de Die Linke, como Izquierda Anticapitalista (AKL), Plataforma Comunista (KPF) y Diálogo Socialista (SD), pero la BfV no ha catalogado como "extrema izquierda" al partido en sí. Además, y como señalé el pasado mes de septiembre, hay otro partido prorruso emergente de ultraizquierda, la BSW (Alianza Sahra Wagenknecht), que tampoco ha sido catalogado como "extrema izquierda" por la BfV.

Persiguiendo a un partido que te acaba de ganar las elecciones

Además de por su ideología derechista, seguramente la razón por la que la BfV ha puesto el foco an AfD y no en la extrema izquierda es su éxito electoral. En las elecciones federales de febrero, AfD fue el segundo partido más votado, obteniendo el 20,80% de los votos y superando a los socialistas del SPD (16,41%), el partido de Nancy Faeser, la ministra de la que depende la BfV.

Francamente, desde un punto de vista democrático, no queda nada bien que una ministra en funciones emprenda una persecución contra un partido rival que le acaba de ganar las elecciones. Cabe preguntarse si con esta forma de actuar se pretende proteger la Ley Fundamental alemana o liquidarla, porque esto empieza a recordar a las prácticas de la Stasi, la policía secreta de la dictadura comunista de Alemania Oriental.

Desde 1949 sólo dos partidos han sido declarados ilegales en Alemania

Por lo demás, hay que recordar que la Ley Fundamental alemana (ese país no tiene una Constitución propiamente dicha) señala en su Artículo 21.2:

Los partidos que por sus fines o por el comportamiento de sus adherentes tiendan a desvirtuar o eliminar el régimen fundamental de libertad y democracia, o a poner en peligro la existencia de la República Federal de Alemania, son inconstitucionales.

Este punto de la Ley Fundamental alemana se hizo pensando en los partidos totalitarios, es decir, aquellos partidos que rechazan abiertamente el sistema democrático y que pretenden reemplazarlo por una dictadura, como es el caso de los nazis y los comunistas. De hecho, desde la entrada en vigor de la Ley Fundamental en 1949, el Tribunal Constitucional de Alemania sólo ha ilegalizado dos partidos: el Partido Socialista del Reich, un partido neonazi y antisemita (en 1952), y el Partido Comunista de Alemania (en 1956).

Posteriormente, hubo intentos de ilegalizar al Partido Nacionaldemócrata de Alemania (NPD), un partido neofascista, pero fueron rechazados por el Tribunal Constitucional. Además, en 1968 apareció el Partido Comunista Alemán (DKP), que continúa existiendo hoy pero que nunca ha tenido representación parlamentaria. El DKP viene siendo clasificado como "extrema izquierda" por la BfV desde su fundación, debido a su ideología totalitaria, pero nunca se ha promovido contra él ningún intento de ilegalización.

¿'Extremista' es criticar al Islam, pero no el Islam?

Con independencia de que a uno le guste o no su ideología, AfD no es ni remotamente comparable en términos de extremismo al NPD o al DKP. Es un partido democrático y que nunca ha cuestionado el sistema parlamentario alemán ni su régimen constitucional. Si ese partido tiene vínculos con Rusia, deberán ser investigados, y también los de la extrema izquierda prorrusa. Lo que no es aceptable en una democracia es que se impongan distintos criterios a los partidos en función de su ideología, aplicando un mayor rigor a los que defienden opiniones que son legítimas aunque no sean del agrado del gobierno.

De hecho, podemos ver una paradoja en la nota de prensa difundida por la BfV sobre AfD este viernes, cuando afirma lo siguiente: "Para nuestra evaluación, es crucial la visión étnica que AfD tiene de las personas, que devalúa a grupos enteros de la población alemana y viola su dignidad humana. Esta visión se refleja en la postura general antiinmigrante y antimusulmana del partido".

¿Posicionarse en contra del Islam viola la dignidad humana? Recordemos que hablamos de una religión cuyo libro sagrado anima a pegar a las mujeres. ¿Se investiga por violar la dignidad humana a un partido que critica a esa religión y no a la religión que afirma eso?

La BfV y la promoción del aborto

Por otra parte, en Alemania el aborto es legal y es apoyado por grandes partidos, no sólo los socialistas del SPD, sino también los centristas de la CDU y la CSU. Abortar es una clara violación de la dignidad humana, por cuanto ese acto supone, en términos médicos, acabar con la vida de un ser humano inocente e indefenso en su edad prenatal. ¿La BfV ha abierto, acaso, alguna investigación contra algún partido alemán por promover el aborto?

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Foto: Norbert Braun.