Se usaron 550 tanques y la represión se saldó con 45 muertos y 1.165 heridos

Polonia 1970: cuando una dictadura comunista envió tanques a masacrar una protesta obrera

En los países libres, la izquierda afirma que es absurdo que los obreros voten a la derecha. ¿Y no será que esos obreros conocen lo ocurrido bajo el comunismo?

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El propio Lenin instó a ejecutar a «un gran número de huelguistas»

En todas las dictaduras comunistas las huelgas han sido ilegales. Lo siguen siendo en las que todavía perduran. Las protestas obreras han sido brutalmente reprimidas en algunas de esas dictaduras. Ya expliqué aquí que en 1920 Lenin instó a ejecutar a "un gran número de huelguistas por el delito de sabotaje" en los Urales. Un año antes, con motivo de una huelga en la factoría de Putilov, la dictadura bolchevique arrestó a 900 trabajadores y ejecutó a 200 de ellos sin juicio alguno. Se estima que miles de obreros fueron ejecutados por participar en huelgas en la URSS ya sólo durante la dictadura de Lenin.

Las protestas obreras de diciembre de 1970 en Polonia

Hoy precisamente se cumplen 50 años del inicio de una ola de protestas obreras conocidas en Polonia como el Grudzień 1970 (Diciembre de 1970), a causa de la subida de los precios de los alimentos justo antes del inicio de las compras para las fiestas de la Navidad. Los precios eran fijados por el Estado, y "el público fue informado oficialmente sobre el aumento solo la noche anterior a su introducción, cuando las tiendas de todo el país ya estaban cerradas, para que nadie pudiera comprar existencias de bienes a los precios anteriores más bajos", señala el Instituto Nacional de la Memoria (IPN). "Por supuesto, la masa de la sociedad era consciente de que, como se llamaba oficialmente, la "operación de fijación de precios" afectaba principalmente a las familias de menores ingresos".

Las protestas de diciembre de 1970 en Polonia comenzaron en el Astillero Lenin de Gdańsk el 14 de diciembre. En la imagen, los trabajadores ante el edificio de administración del astillero, poco antes de comenzar la primera manifestación de estas protestas (Foto: Instytut Pamięci Narodowej).

La primera protesta el 14 de diciembre de 1970 en Gdańsk

Antes de que se anunciase esa "fijación de precios", según señala el IPN, "en muchos hogares ya era difícil llegar a fin de mes". La primera de las protestas se produjo el 14 de diciembre de 1970 en el Astillero Lenin en Gdańsk, donde diez años más tarde aparecería el sindicato católico Solidarność. Allí se inició una marcha de trabajadores con dirección al Comité Provincial del Partido Obrero Unificado Polaco, el partido único de la dictadura comunista.

Durante el camino se unieron muchos jóvenes a la marcha. La manifestación duró cinco horas y discurrió de forma pacífica. A pesar de ello, un poco antes de las cuatro de la tarde, cerca del puente Błędnik, los manifestantes fueron atacados con granadas lacrimógenas lanzadas por la Milicia Ciudadana (MO), la Policía militar del régimen comunista. Empezó así una ola de disturbios que duró hasta la noche y que se saldó con decenas de heridos.

Un tanque y un vehículo blindado del Ejército Polaco bloqueando la intersección de las calles Czerwonych Kosynierów (hoy Morska), Podjazd y Śląska, en Gdynia. La dictadura comunista utilizó medios acorazados para reprimir las protestas (Foto: Instytut Pamięci Narodowej).

La dictadura comunista envió al Ejército con armamento pesado

Después de lo ocurrido en Gdańsk el 14 de diciembre, las protestas aumentaron en intensidad en esa ciudad. La MO volvió a usar la fuerza para reprimir a los manifestantes. A pesar de ello, la manifestación llegó a congregar a 20.000 personas. En vista del éxito de la protesta y de que la dictadura comunista no lograba amedrentar a los trabajadores, ese mismo día el régimen envió a Gdańsk a fuerzas del Ejército equipadas con ametralladoras y armamento pesado. La violenta represión de la protesta en esa ciudad costera se saldó ese día con siete muertos, varios cientos de heridos y unos 500 manifestantes detenidos.

Al día siguiente, cuando los trabajadores del Astillero Lenin de Gdańsk se disponían a iniciar una nueva marcha de protesta, milicianos de la MO y soldados tirotearon los manifestantes, provocando dos muertos y once heridos. Después de esta brutal represión, la dictadura no sólo no logró desactivar las protestas, sino que éstas se extendieron a Elbląg, Gdynia, Słupsk y Szczecin.

Una columna de blindados del Ejército Polaco y milicianos de la MO bloqueando la intersección de las calles Hucisko y 3 Maja, en Gdańsk, el 15 de diciembre de 1970, en el segundo día de las protestas. (Foto: Instytut Pamięci Narodowej).

Un militar se negó a disparar contra mujeres y niños

En Szczecin, trabajadores del Astillero Adolf Warski fueron violentamente atacados por milicianos de la MO. Ese día, en esa ciudad una multitud de 20.000 personas se congregó, furiosa, ante la sede del partido único. Sus ocupantes, con miedo a un asalto, decidieron evacuarla. El coronel Henryk Ziemiański, que estaba en el interior del edificio, recibió la orden de disparar contra la masa. Se negó a obedecer, contestando: "¿A quién diablos voy a disparar? Hay mujeres y niños".

La marcha fúnebre con el cadáver de Zbigniew Godlewski en Gdynia

En Gdynia, donde las protestas habían discurrido pacíficamente, el 17 de diciembre la MO y el Ejército abrieron fuego contra personas indefensas que se dirigían a sus puestos de trabajo, asesinando a 18 de ellas. Tras la masacre, hubo una marcha fúnebre de manifestantes portando el cuerpo de un joven asesinado, Zbigniew Godlewski, de sólo 18 años, junto a dos banderas polacas con manchas de sangre. La imagen se convirtió en un símbolo de estas protestas.

Una marcha de ciudadanos en la calle Czerwonych Kosynierów de Gdynia el 17 de diciembre de 1970, portando el cadáver del joven Zbigniew Godlewski, de 18 años, asesinado por los comunistas durante la brutal represión de las protestas en esa ciudad. Los manifestantes portaban dos banderas polacas con manchas de sangre. Esta procesión fúnebre se convirtió en una de las imágenes más famosas de estas protestas (Foto: Instytut Pamięci Narodowej).

Los medios usados por la dictadura comunista para reprimir las protestas

Además de las citadas ciudades costeras, las protestas acabaron extendiéndose también a ciudades del interior, como Cracovia, Wałbrzych y Białystok. Decenas de miles de polacos participaron en esas manifestaciones. En varias ciudades fueron atacadas las sedes del partido único. Las cifras más llamativas son las de los medios utilizados por la dictadura comunista para reprimir la protesta, según el IPN:

  • 27.000 soldados.
  • 9.000 milicianos de la MO.
  • 550 tanques.
  • 750 vehículos blindados de transporte de personal.
  • 2.100 vehículos de otros tipos.
  • 108 aviones y helicópteros.
  • 40 buques de guerra.
  • 150.000 botes de humo y otros productos químicos lanzados contra los manifestantes.
  • 46.000 balas de diverso calibre disparadas ya sólo en las ciudades costeras.

Aparte de la ley marcial en 1981, "nunca en tiempos de paz se ha puesto al Ejército Polaco en una preparación para el combate a tal escala y no se ha utilizado hasta tal punto para garantizar el orden público", señala el IPN. En total, este Instituto cifra las víctimas de la brutal represión comunista en 45 muertos y 1.165 heridos. A la vista de estos hechos, y volviendo a lo que señalé al principio de la entrada, lo raro no es que haya obreros que votan a la derecha. Lo absurdo es que aún haya obreros que siguen votando a partidos comunistas.

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Comentarios:

  1. wladimir

    algo tan tipico y corriente…

    de las diversas dictaduras Socialistas…y no solo del antiguo «Pacto de varsovia»…al puro estilo de la represion en Hungria o en Checoslovaquia o mas recientemente en Tiannammen (China Comunista) o el caso de los «Paraisos Socialistas» en Cuba,Nicaragua o Venezuela…

    para ellos esta es la manera de responder los gobiernos «democraticos» al pueblo…cuando este hace uso del derecho a manifestarse en las calles con justa razon….

  2. Aguador

    En mi opinión (que los hechos parecen confirmar) sólo los «niños bien» (bien adoctrinados por funcionarios del Ministerio de Hedukazion) y otros tontos útiles pueden votar a partidos «de izquierda». Los «obreros y campesinos de verdad» votan a partidos que les prometan llegar a un nivel de bienestar; y a estas alturas ya saben que eso no se va a producir con ningún partido «de izquierda», ya sea con pasta («socialista») o sin ella («revolucionaria»)…

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