'El Síndrome': un excelente programa de Iker Jiménez que arroja una sombra sobre España

En Contando Estrelas soléis leer con frecuencia críticas a pésimos ejemplos de periodismo que se dan en España, pero hoy toca hacer una gran excepción.

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Un documental que tiene tras de sí tres años de investigación

Anoche en el canal Cuatro, el programa "Cuarto Milenio" de Iker Jiménez empezó su 17ª temporada con un solo documental, titulado "El Síndrome". Es el resultado de "tres años de investigación, ochocientas horas de metraje y decenas de entrevistas", según señaló ayer Diego Marañón. Si te perdiste el programa, puedes verlo completo aquí. Lo recomiendo encarecidamente, porque habló sobre el Síndrome Tóxico, una intoxicación masiva que se produjo en España en 1981 y que dejó 5.000 fallecidos y 25.000 enfermos crónicos, según las cifras indicadas al final del programa. El caso dio lugar, además, a uno de los mayores procesos judiciales de la historia de España, por el gran número de afectados.

El programa hizo un excelente repaso a los hechos tal como se fueron conociendo en aquella época, y a las distintas hipótesis que se presentaron sobre la intoxicación, desde la que atribuyó lo ocurrido a una partida de aceite de colza desnaturalizado (que fue la causa oficial establecida por el Tribunal Supremo en 1992) hasta la hipótesis del posible origen en plaguicidas, una explicación que cubría ciertas lagunas de la teoría de la colza, pues en todos los laboratorios a los que se enviaron multitud de muestras de ese aceite de colza, ninguno logró reproducir la sintomatología que mostraron los afectados, y además, una parte de los afectados no consumió ese aceite de colza.

40 años después aún no se conoce el agente causante de la enfermedad

No es mi intención abordar aquí lo que el programa trató con mucha mayor profundidad, conocimiento y documentación. En todo caso, el programa expuso claramente las dudas más que razonables que provoca la versión oficial, y también una serie de hechos que estamos viviendo nuevamente cuarenta años después de la aparición del Síndrome Tóxico: la disparidad de opiniones entre científicos, las interferencias políticas en la investigación y la censura de explicaciones distintas de la versión oficial, hasta tal punto que hoy en día se desconoce cuál fue la causa de la intoxicación.

Esto último se dijo anoche en el programa, y se puede leer también en un documento oficial del Centro de Referencia Estatal de Enfermedades Raras (ver PDF) afirma en su página 219: "la causa está aceptada en la comunidad científica independientemente de que no se haya logrado en estos 30 años conocer el agente exacto que causó el envenenamiento". Una afirmación cuanto menos contradictoria, que resulta aún más inexplicable al leer esto en la página siguiente: "no ha llegado a determinarse el agente causante exacto de la enfermedad, a pesar de los muchos estudios realizados en este sentido".

Un caso que nos anima a tener una idea más realista de la ciencia

No pretendo que lo anterior sirva de base para que la gente pierda la confianza en la Medicina y en las instituciones, pero creo que sí deberíamos tomar nota de esa experiencia para darnos cuenta de que la ciencia no siempre es exacta e infalible, pues en casos como el de la Medicina se basa en la experimentación por parte de seres humanos, y no siempre se pueden tener certezas absolutas. Es por eso que entre los propios científicos hay debates que no se deben obviar sin más, y menos aún recurriendo a algo tan impropio del método científico como es la censura. Una censura que, tristemente, estamos viendo con demasiada frecuencia en cuestiones en las que a menudo interfieren intereses políticos y económicos, como las relativas a la sanidad y al medio ambiente.

La sombra que arroja ese documental sobre la España de hoy

Ciertamente, lo más triste del programa de anoche de "Cuarto Milenio" no es ya el hecho terrible de que una intoxicación masiva y que provocó tantos muertos aún no tenga una clara explicación científica 40 años después, a pesar de que se dictó una sentencia judicial sobre el caso que sirvió para indemnizar, menos de lo debido, a muchos de los afectados, pero también para darle carpetazo a las dudas y lagunas sobre el caso. Antes bien, lo más triste es comprobar que seguimos cayendo en los mismos errores, en las mismas interferencias ajenas al ámbito científico, en los mismos debates viciados y en los mismos intentos de poner el interés del Estado o de tal o cual partido por encima de la salud y de la verdad, y todo eso con una pandemia que ya ha provocado muchas más muertes que el Síndrome Tóxico.

En este sentido, el documental presentado por Iker Jiménez es digno de elogio por arrojar luz sobre ese caso y sobre nuestra historia reciente, ésa que algunos parecen empeñados en olvidar porque sus secuelas siguen muy vivas entre nosotros. Pero al mismo tiempo deja un sabor amargo por la sombra que arroja sobre España, porque nuestra sociedad parece empeñada en repetir los errores cometidos en el pasado, tal vez porque han decidido olvidar nuestra historia. Como siempre, no es culpa del mensajero traer una mala noticia, y menos aún cuando nos invita a una útil reflexión. En este sentido, agradezco a Iker Jiménez y a su equipo el excelente programa que se emitió anoche. De nosotros depende, ahora, que esa enseñanza no caiga en el olvido.

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Foto: Diego Marañón.