¿Por qué la izquierda no aplica al terrorismo la idea de Irene Montero para evitar asesinatos?

La utilización de ciertos crímenes para justificar el adoctrinamiento ideológico se ha convertido ya en una fea costumbre por parte de la izquierda.

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Montero usa un asesinato para justificar el adoctrinamiento en las escuelas

Hoy mismo, la comunista Irene Montero ha defendido la necesidad de una "educación sexual integral" para evitar hechos como el asesinato de una chica de 18 años que, según la ministra, "se investiga como violencia machista":

Lo que nos viene a decir la ministra es que si hay asesinatos es porque no recibimos una educación adecuada, concretamente una educación sexual basada en las tesis de la izquierda, que considera que a los niños se les debe hablar sobre cosas totalmente inadecuadas a su edad, incluso vulnerando el derecho constitucional de sus padres a decidir la formación religiosa y moral que desean para sus hijos. Un derecho que la izquierda no ha respetado nunca.

Una ministra que ha justificado agresiones contra rivales y contra la Policía

Ya al margen de ese pisoteo de derechos, no parece que Irene Montero sea la más adecuada para ofrecer recetas con las que prevenir hechos violentos, después de que la ministra haya justificado agresiones contra rivales políticos y contra la Policía, recurriendo al argumento de la minifalda, según el cual si te agrede la izquierda es porque ibas provocando. Es difícil de entender que en España aceptemos que una ministra que justifica agresiones con fines políticos nos aleccione contra la violencia intrafamiliar. Por justificar ese tipo de cosas, lo que tendría que hacer Montero es dimitir o ser cesada. Ningún país democrático puede tolerar en su gobierno a una persona que justifica delitos.

¿Por qué la izquierda no aplica la receta de Montero al terrorismo separatista?

Volviendo a la cínica receta de Montero para acabar con los asesinatos de mujeres, cabe preguntarse por qué la izquierda nunca aplicó al terrorismo esa misma solución mágica. Y lo habría hecho con más motivo, dicho sea de paso. En España no hay ningún partido político que defienda el maltrato ni los asesinatos de mujeres. Sin embargo, hemos tenido un terrorismo separatista y de ultraizquierda que ha asesinado a más de 800 españoles, niños incluidos. Se trata de un terrorismo que ha tenido brazos políticos en las instituciones.

Aún hoy, uno de los socios del gobierno, EH Bildu, se sigue negando a condenar esos asesinatos, así como otros crímenes cometidos por ETA, como el secuestro de José Antonio Ortega Lara, que estuvo 532 días metido en un zulo (esta semana se ha celebrado el 25º aniversario de su liberación por parte de la Guardia Civil). Lejos de proponer recetas educativas para impedir que eso se repita, Podemos, el PSOE, EH Bildu y otros partidos de izquierda han pedido legalizar la apología del terrorismo, afirmando que es "libertad de expresión". ¿Se imagina alguien el escándalo que se montaría si cualquier partido político dijese que la apología del maltrato a mujeres es "libertad de expresión"?

En vez de combatir el separatismo, Podemos se alía con él

Si Irene Montero cree que está justificado adoctrinar a los niños en las aberrantes tesis sexuales de la izquierda para impedir asesinatos machistas, entonces tendrá que admitir que se imparta patriotismo en las escuelas y se enseñe a los niños la necesidad de defender la unidad de España frente al separatismo, porque precisamente ETA y otros grupos terroristas separatistas tenían como fin romper la unidad de España y sembrar el odio a nuestra Nación.

Sin embargo, en vez de combatir el separatismo, lo que hace Podemos es aliarse con él. Con lo cual, la ministra comunista y sus colegas están dejando claro que están utilizando esas asesinatos como una mera excusa para imponer su ideología en las escuelas, y lo hace pisoteando la Constitución, como su gobierno ya tiene por costumbre.

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Foto: Efe.