Cómo saber si alguien apoya la paz en Ucrania o apoya que la guerra sea rentable para Rusia

Elentir EN Mié 22·2·2023 · 18:07 2

Estos días, a punto de cumplirse un año de la invasión rusa de Ucrania, se están escuchando muchas voces que piden la paz y el fin de la guerra.

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Una infame equidistancia entre la nación agresora y la nación agredida

Obviamente, apelar a la paz siempre suena bien. Nadie que tenga un mínimo de humanidad desea una guerra. La pregunta que debemos hacernos es: ¿son sinceras ciertas voces que dicen estar a favor de la paz? Debemos plantearnos esta pregunta porque detrás de ciertos discursos pacifistas se observa una infame equidistancia entre la nación agresora (Rusia) y la nación agredida (Ucrania), como si ambas naciones deseasen la guerra por igual y la responsabilidad se repartiese a partes iguales entre ambas. A esto hay que añadir que muchos discursos pacifistas ponen el foco en los países que están ayudando a Ucrania a defenderse, acusándoles de no querer la paz y de provoca una "escalada".

Lo que muchos parecen olvidar en este asunto es que si alguien está realmente a favor de la paz, lo primero que tiene que hacer es pedir que cese la invasión que ha provocado esta guerra. Hablamos de una invasión con la que Rusia ha violado el Derecho Internacional, agrediendo a un país independiente, pretendiendo ocupar su territorio y deponer a su gobierno, un gobierno legítimo y designado por los ciudadanos ucranianos en elecciones democráticas.

Lo que debe pedir alguien que apoye realmente la paz

Por supuesto, si alguien realmente apoya la paz no debe conformarse con pedir que se detenga la invasión. El restablecimiento de la paz implica que Rusia retire sus tropas del país al que ha agredido, devolviendo a Ucrania los territorio ilegalmente anexionados; que ponga a los autores de crímenes de guerra a disposición del Tribunal Penal Internacional y que colabore en la investigación de esos crímenes; que pague las indemnizaciones correspondientes a Ucrania por los daños terribles que ha causado a ese país; y que devuelva a Ucrania a las personas que han sido deportadas ilegalmente a Rusia, entre ellas muchos niños, una deportación que está calificada como un crimen contra la humanidad por el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.

Si de verdad amamos la paz, no debemos consentir que agredir a otro país sea una actividad rentable para el agresor. Al contrario: debemos exigir que el agresor haga todo lo necesario para restituir la paz que él ha violado.

Los falsos 'pacifistas' que no piden a Rusia que se retire de Ucrania

Por el contrario, lo que algunos "pacifistas" sugieren es que Ucrania deje de recibir ayuda para defenderse, lo que conllevaría ofrecer una ventaja al agresor mientras continúa con sus ataques al país invadido. Para comprobar la falsedad de esos discursos, basta con observar si ponen más el acento en quienes apoyan al agredido que en el agresor, presentando como los culpables de esta guerra a Estados Unidos, a la OTAN, a los anglosajones e incluso al propio país invadido, es decir, culpando a todo el mundo menos al país invasor.

Algunos ya han dejado en evidencia que mientras hablan de paz, lo que apoyan es un planteamiento que implicaría que la invasión de Ucrania fuese rentable para el agresor, en mayor o menor medida, permitiéndole conservar unos territorios que son parte del suelo soberano de otro país y que Rusia ha ocupado de forma violenta, torturando y asesinando a civiles, destruyendo ciudades enteras y cometiendo crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. Cuando algunos claman a favor de una "negociación" pero no piden que Rusia detenga su invasión y retire sus tropas de Ucrania, lo que implica su planteamiento es que la guerra sea rentable para el que la inicia y perjudicial para el invadido, debiendo renunciar a sus legítimos derechos sobre su propio territorio soberano y, de esta forma, convirtiendo el recurso a la violencia en algo que prevalece sobre el Derecho Internacional.

Pretenden que Rusia obtenga beneficio con la guerra que inició

Por supuesto, quienes opinan que Rusia debe sacar tajada de la guerra que ella misma inició no aman realmente la paz: lo que proponen es que la guerra sea rentable. Disfrazar este aberrante planteamiento bajo ropajes pacifistas no es un acto de cinismo nada original: es el mismo falso pacifismo que los comunistas utilizaron para justificar la invasión germanosoviética de Polonia en 1939.

Igual que ocurrió en la Segunda Guerra Mundial, los que aman realmente la paz son quienes están dispuestos a ayudar a defenderse al país agredido, con el fin de que el agresor no obtenga su objetivo y la guerra no se convierta en un negocio provechoso para el que la inicia. Si las falsas apelaciones a la paz que algunos hacen ahora hubiesen triunfado en la Segunda Guerra Mundial, Hitler no habría sido derrotado y la Alemania nazi seguiría siendo hoy un peligro para la paz en Europa. Así pues, los verdaderos enemigos de la paz son quienes apoyan que el agresor obtenga algún beneficio con la guerra que provocó. Si algunos que se dicen "pacifistas" no piden al agresor que detenga su invasión y retire sus tropas, entonces no son pacifistas: son los tontos útiles del invasor y, además, pretenden que los demás también lo seamos.

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Foto: Allison Bailey/NurPhoto. Una manifestación contra la OTAN en Washington DC, EEUU.