Iván Espinosa, la elegante despedida de un gran político, una buena persona y un amigo

Elentir EN Mar 8·8·2023 · 18:36 6

El 8 de julio de 2020, Vox organizó un acto público en la Plaza de la Estrella de Vigo, con Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros.

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Al acabar el mitin, que se hizo justo detrás de la Comandancia Naval, Abascal se marchó rodeado de un montón de gente que quería hacerse fotos con él. No tuve ocasión de hablar con él (viendo la cantidad de gente que le rodeaba, ni siquiera lo intenté). Iván se quedó más tiempo, formándose una cola de personas para hacerse selfis con él. Pacientemente se hizo fotos con todos, con esa educación y esa amabilidad que le caracterizan.

Mi madre y yo esperamos a que se terminase la cola. Yo conocía personalmente a Iván y a Rocío, su mujer, desde años atrás, siempre me han tratado con una gran cordialidad, y cuando por fin pudimos saludarnos aquel día, le pedí un selfi para mi madre (yo no soy aficionado a los selfis), y tuvimos un rato de agradable charla con él. Iván tuvo esa cercanía de siempre y consiguió que mi madre y yo nos volviésemos a casa con una sonrisa, a pesar del grupo de matones de extrema izquierda que nos esperaba allí cerca, acordonado por la Policía.

Es la última vez que tuve la ocasión de ver a Iván en persona. Nos hemos seguido leyendo por la red, y digo esto porque tengo el honor de saber que de vez en cuando lee lo que escribo aquí, como me ha demostrado compartiéndolo de vez en cuando en Twitter. Por eso, escuchar esta rueda de prensa en la que ha anunciado que abandona la política me ha dejado (¿para qué negarlo?) más bien triste:

Iván ha tenido una elegante despedida en la que ha alegado motivos personales y familiares para renunciar a su acta de diputado y volver al mundo de la iniciativa privada, en la que le deseo lo mejor. Vox pierde a uno de sus mejores diputados, a un hombre que sabe conjugar la seriedad y la ironía con gran maestría, y que sabe hablar en inglés y francés con tanta fluidez como habla en español.

Iván ha sido un gran político, que ha asumido muchos sacrificios por unos ideales nobles, defendiéndolos con honor y gallardía. Iván es, además y sobre todo, una buena persona, de ésas que hacen mucha falta en el ámbito de la política y que dejan un inmenso hueco cuando se van. Y para mí, además, Iván es un amigo, alguien con el que he tenido el honor de coincidir y que sabe que siempre que venga a Vigo, aquí habrá alguien esperando poder darle un abrazo.

Por respeto a la elegancia y el honor con los que Iván se ha despedido hoy, me limitaré a decir que su marcha de la política es una muy mala noticia en muchos aspectos, para España y para Vox. Me gusta escribir aferrándome a la lógica y ahora mismo, emocionalmente, no estoy en condiciones de hacerlo. De todas formas, me considero una persona previsible y los lectores habituales de Contando Estrelas podrán adivinar mi opinión sin muchos esfuerzos. En fin: gracias por todo, Iván, y un fuerte abrazo para ti y para tu familia.

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Foto: Vox Congreso.