Pone su interés personal y los caprichos de sus aliados por encima de la salud

Sánchez quiere despilfarrar en lenguas tres veces lo que rechazó dar a enfermos de ELA

Siempre que socialistas y comunistas intentan justificar su saqueo fiscal a los contribuyentes españoles, apelan a la educación y la sanidad.

Sánchez rechaza dar 38 millones a enfermos de ELA mientras despilfarra 92 en publicidad
La izquierda pretende degradar el español como lengua común y El País lo confirma

La idea viene a ser que necesitan quitarnos cada vez más dinero a todos los españoles haciéndonos creer que es por nuestro bien, para dedicarlo a educación (a pesar de que cada vez hay menos niños) y para cuidar de nuestra salud. Lo que nunca dicen es que al final se dedican a malgastar nuestro dinero en estupideces, muchas de las cuales sólo tienen alguna justificación desde el punto de vista ideológico o desde el mero interés particular de Sánchez y de sus aliados.

Hace unas semanas, el gobierno de Sánchez rechazó una propuesta de Vox que reclamaba atención y ayuda para los enfermos de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), una enfermedad degenerativa que actualmente no tiene cura y que supone un gran coste económico para los pacientes y para sus familias. El gobierno alegó que esa propuesta costaría 38 millones de euros como razón para rechazarla, mientras despilfarra cantidades mucho mayores en cuestiones perfectamente prescindibles. Este viernes hemos tenido un nuevo ejemplo de ello.

Según dio a conocer un medio afín al PSOE, la Unión Europea ha calculado que introducir el catalán, el vasco y el gallego en el Parlamento Europeo costaría 132 millones de euros al año, con un coste de 44 millones de euros por cada lengua regional. Recordemos que Letonia y Lituania han rechazado esa idea, a pesar de que Sánchez ofreció a la UE cargar a los españoles con todos los gastos.

En el Parlamento Europeo no se utiliza ninguna lengua regional. La idea de Sánchez obedece a su afán por complacer a sus aliados separatistas para no perder su apoyo y así poder mantenerse en el poder a costa del interés general. La noticia conocida ayer permite concluir que el coste de esa cesión a los separatistas multiplicaría por 3,4 el importe de la ayuda a enfermos de ELA denegada por el gobierno, una ayuda que esos pacientes necesitan para poder llevar una vida digna. En vez de eso, lo único que les ofrece el gobierno es la eutanasia, es decir, el suicidio, librándose de ellos como si sus vidas no valiesen nada.

Es terrible pensar que tenemos un gobierno que pone su interés particular y los caprichos de sus aliados por encima de la vida y la salud de ciudadanos españoles. Una razón más que suficiente para sentar a los responsables ante un tribunal.

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Foto: Europa Press.

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