La Segunda Guerra Mundial supuso un gran salto cualitativo en los tanques, convirtiéndolos en un arma impresincible.
El Ejército Alemán se destacó al comienzo de la guerra por el uso de tanques, usándolos con gran eficacia en su famosa estrategia de la Blitzkrieg (guerra relámpago). En 1943, Alemania lanzó uno de los mayores y más pesados tanques de la guerra, el Panzerkampfwagen Tiger Ausf. B, también conocido como Königstiger o King Tiger. La versión inicial de este gran carro de combate pesaba 68,5 toneladas (más que el moderno tanque americano M1A2C SEP v3 Abrams), mientras que que la versión definitiva pesaba 69,8 toneladas. Esto suponía un serio inconveniente a la hora de buscar puentes capaz de soportar su peso.
El Königstiger entró en combate por primera vez el 18 de julio de 1944 en la Batalla de Normandía, demostrando que era un tanque muy difícil de batir por parte de sus rivales occidentales debido a su gruesa coraza y a su potente cañón de 88 mm. Entre 1944 y 1945 Alemania produjo 492 unidades del Königstiger, una cantidad muy inferior a los 6.000 Panzer V Panther y a los 1.347 Panzer VI Tiger que llegó a recibir el Ejército Alemán.
Uno de los inconvenientes del Königstiger es que era muy caro y complejo de producir, lo cual suponía ya en sí mismo una desventaja. Tengamos en cuenta, por ejemplo, que EEUU llegó a fabricar más de 49.000 tanques Sherman y durante la guerra la URSS fabricó 57.000 T-34. Ambos tanques eran cualitativamente inferiores al Königstiger, pero al final la cantidad pudo más que la calidad.
Por otra parte, el Königstiger tenía problemas en la transmisión, que provocaron el abandono de muchos tanques en el frente. Además de ello, la huella logística de este tanque era enorme en comparación con la de sus rivales, con un consumo de gasolina considerable y unas labores de mantenimiento complejas. Entre sus ventajas, además de las citadas, hay que señalar que el Königstiger era un tanque muy avanzado para su época, y de haber sido fabricado en mayor número, habría sido un grave problema para las fuerzas aliadas.
Si queréis saber más sobre las ventajas e inconvenientes de este tanque, hoy Blue Paw Print ha publicado un excelente vídeo analizando el Königstiger, mostrando cómo era este vehículo acorazado, su funcionamiento, su armamento y el modo en el que operaba en el campo de batalla, así como las causas que lo llevaron a ser un fracaso (el vídeo está en inglés pero dispone de subtítulos y de pista de audio en español, puedes activarlos en la barra inferior del reproductor):
Podéis ver aquí algunas capturas de este formidable vídeo, a modo de adelanto. El vídeo analiza el Königstiger con la torreta Krupp de producción, erróneamente conocida como torreta Henschel. Fue el modelo más pesado del Königstiger.
Una comparación de tamaños entre el Königstiger y su homólogo americano el tanque pesado M-26 Pershing, que entró en combate en 1945. El M-26 pesaba 41,7 toneladas, 28 toneladas menos que su rival alemán.
El interior de la torreta del Königstiger. El vídeo analiza el funcionamiento del cañón con todo detalle.
El compartimento de munición de la torreta, con capacidad para 22 proyectiles. En el chasis del tanque había compartimentos para 66 proyectiles más.
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Comentarios:
FaramirGL
Espectacular, el vídeo.
12:53 | 28/04/25
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