Feijóo tiene una forma fácil de probar que su promesa de derogar leyes del PSOE es sincera

El aguante de Vox en las encuestas (algunas incluso otorgan a este partido más escaños de los que ya tiene) ha llevado a Feijóo a hacer un curioso anuncio.

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En una entrevista publicada ayer por Europa Press, Alberto Núñez Feijóo anunció que derogará leyes del PSOE, entre ellas la llamada "ley de memoria democrática" pactada recientemente por el gobierno con los proetarras. El presidente del PP también cita la Ley Trans, afirmando que con ella "no están de acuerdo ni las feministas ni los colectivos a los que van destinados".

Tengo por costumbre no creerme ninguna promesa de Feijóo desde que en 2009 traicionó en Galicia su promesa electoral de libertad lingüística, dándonos gato por liebre a quienes le votamos para implantar, en su lugar, un sistema de "trilingüismo" que no tiene nada que ver con lo prometido. A un político que ya engañó a sus votantes no cabe darle ninguna credibilidad, a menos que ofrezca pruebas irrefutables de que está dispuesto a hacer lo que promete.

En el caso de Feijóo, tiene una forma muy fácil de demostrar que las promesas de derogación que hizo ayer -más bien vagas, por cierto- son sinceras. Al presidente del PP le basta con ordenar a su partido que derogue aquellas leyes autonómicas que están vigentes allí donde gobierna. Le pondré algunos ejemplos:

• Las leyes LGTB de Madrid y de de Murcia comparten la base ideológica de la Ley Trans, la llamada "autodeterminación de género", que es lo que rechazan muchos colectivos feministas. Ambas leyes fueron aprobadas con el apoyo del PP, que estaba en el gobierno de esas comunidades en el momento de su aprobación. Además, el PP también apoyó leyes similares en Extremadura, Balares, Aragón, Cantabria y Canarias (esta última en mayo del año pasado).
• La ley de memoria histórica de Andalucía: se trata de una ley aprobada por la izquierda para imponer su visión de la historia reciente de España. Vox pidió derogarla en 2019, y se quedó solo. La escena se repitió en 2021, con el PP absteniéndose para que no se pudiese derogar esa ley.

Si Feijóo tiene la sincera intención de derogar la ley de memoria y la ley trans de Sánchez, puede demostrarlo derogando esas leyes autonómicas. Si no lo hace es porque su anuncio de ayer es tan poco sincero como la promesa de libertad lingüística que hizo a los gallegos en 2009.