La invasión rusa de Ucrania ha demostrado lo necesaria que es esta organización

75 años de la OTAN, una Alianza que es el eficaz escudo que protege a Occidente

Esta semana, la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cumplió 75 años. Pocos llegan a esta edad con tan buena salud.

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En los últimos tiempos, quienes amamos la Libertad estamos teniendo grandes motivos para sentirnos decepcionados con algunas grandes organizaciones internacionales. Por ejemplo, la ONU está perdiendo cada vez más credibilidad por el creciente peso de la China comunista en la organización, por su saña contra Israel y su tibieza contra dictaduras comunistas e islamistas, y por su manga ancha con países que violan los derechos humanos mientras sus funcionarios parecen más preocupados por imponernos las agendas ideológicas de la izquierda.

Algo parecido ocurre con la Unión Europea, que bajo el mandato de Ursula von der Leyen se está convirtiendo en un megaestado intervencionista que cada vez tiene menos relación con sus principios fundacionales y que parece empeñada en socavar la soberanía nacional de sus miembros y en perseguir a los gobiernos conservadores, mientras exhibe una insana pasividad ante los abusos de un aprendiz de déspota como el socialista Pedro Sánchez.

La OTAN es la gran excepción. Surgió para defender a los países occidentales frente a la amenaza de la Unión Soviética y de sus regímenes satélites. Cuando parecía que esta organización ya había perdido su razón de ser, la invasión rusa de Ucrania ha demostrado lo necesaria que es la Alianza Atlántica como escudo protector, algo que se demuestra con las adhesiones de Finlandia y Suecia, tras las amenazas lanzadas por Putin el 25 de febrero de 2022 contra esos países.

De hecho, entre los países que más valoran a la OTAN están precisamente quienes más han sufrido la tiranía comunista, como Lituania, Estonia, Letonia y Polonia, unos países que comparten la desgracia de tener a Rusia como vecina. Ese escudo protector es especialmente eficaz, si tenemos en cuenta que quienes forman parte de él no han sufrido invasiones militares desde que son miembros, mientras que otros (Georgia, Moldavia y Ucrania) todavía padecen la presencia de tropas rusas en su territorio.

En España y otros países de Europa occidental -con grandes excepciones como el Reino Unido y Países Bajos- suele haber más críticas hacia la Alianza, porque a fin de cuentas no hemos visto seriamente amenazada nuestra seguridad nacional desde hace décadas. Pero esa sensación de seguridad está desapareciendo a medida que aumentan las amenazas rusas contra la paz en Europa.

Obviamente, quienes más detestan a la OTAN son los enemigos de la Libertad. No es casual que despierte una especial animadversión entre la extrema izquierda, que ha heredado el servilismo de los viejos partidos hacia los dictados de Moscú, y también entre gran parte de la extrema derecha, que se ha dejado envenenar por las patrañas del Kremlin y cree ver en Putin a un referente moral, una visión miope que suele pasar por algo que Rusia está sometida a una dictadura mafiosa y criminal que es aliada de otros enemigos de la Libertad como Irán, Corea del Norte, la China comunista, Cuba, Venezuela o Nicaragua. Cabe preguntarse si todos ésos son también referentes para esa extrema derecha.

Personalmente, celebro este 75º aniversario de la OTAN porque es el escudo protector del mundo libre, aunque esta parte del mundo parezca, a veces, empeñada en suicidarse moralmente. Hay que decir que no todo es motivo de celebración: los países de la OTAN que menos invierten en defensa, entre ellos España, tienen el deber moral de aumentar esa contribución, para protegerse a sí mismos y a sus aliados, hacia quienes tenemos unas obligaciones como país miembro.

No podemos depender eternamente de los contribuyentes de EEUU, creyendo que ellos tienen que asumir los retos en materia de defensa que nosotros no queremos asumir. La defensa de Europa y de Occidente nos implica a todos, porque todos estamos bajo el objetivo del imperialismo ruso, aunque algunos, por su ceguera ideológica, se nieguen a verlo.

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Foto: OTAN.

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Comentarios:

  1. Berto

    Si no fuera por la OTAN, Vladimiro ya habría invadido territorios de Lituania, Letonia y Estonia, por no decir esos países enteros.

    Lo único que frena al pequeño dictador es que la OTAN esté al otro lado, con una potencia de fuego mayor que Rusia, que en guerra convencional caería sí o sí. Lo que les mantiene en posición de fuerza son las armas nucleares.

    Aquí, en Ferrol, hace décadas se puso encima de la mesa crear una base permanente de reparaciones de la OTAN, que hubiera dado bastante empleo a una comarca muy castigada por la reconversión naval. Pues bien, los que pusieron el grito en el cielo fueron los de siempre, con el «OTAN non, bases fora».

    De un tiempo a esta parte, a la extrema izquierda se le ha unido parte de la derecha, que demoniza a la OTAN, cuando es el único escudo que tenemos ante el sátrapa del Kremlin. Esos nuevos detractores de la OTAN son, desde escritores como Pío Moa, hasta militares populistas que se dedican ahora a buscar ‘likes», o sea, validación en las redes sociales…

  2. wladimir

    estoy de acuerdo…

    si no fuera por la OTAN Europa ya se hubier derrumbado gracias a Dios contamos con este poderoso escudo…sin el el sujeto Putin y sus secuaces ya hubieran acabado con la Democracia Europea hace mucho tiempo…

  3. ¿Wladimiro o Vladimiro? 🙂
    La extrema derecha es anglófoba por definición, como la extrema izquierda.
    Pero en el fondo la extrema derecha parte de los mismos principios que la extrema izquierda, por eso no es de extrañar.
    Como «Wladimiro» se hace pasar por amigo de la extrema derecha, por eso ésta siente tanta simpatía por el dictadorzuelo neosoviético.
    Y en fin, la censura de Facebook es por todos conocida. Yo ya me salí de Facebook cuando censuraban mi apoyo a Trump.
    Son tiempos difíciles para libertad y la democracia que nunca han estado más amenazados , ni en la Guerra Fría, pues el enemigo está entre nosotros, no detrás de un muro, y está entre nosotros en forma de pensamiento y doctrina (la Doctrina DEI o Woke) , pretendiendo sembrar una GUERRA CIVIL, que es lo que siempre argumentan los voceros de Putin , para dentro de los países aliados.
    En realidad la guerra civil la debe sufrir Rusia por culpa de Putin y su guerra.
    El pueblo ruso tiene que quitarse de encima a ese dictadorzuelo neosoviético.

  4. maytehuete

    Pues yo seré como Pío Moa mientras siga EEUU siendo el pais que más aporta a la OTAN. Aunque por ahora tenemos suficiente con el SOCIÓPATA para vendernos a Marruecos, si nos atacará este país ¿qué haría la OTAN? No pongo la mano en el fuego, EEUU sigue manejándola y los europeos cada vez son mas pusilánimes…

  5. Berto

    Trump quiere, con toda la razón, que Europa aporte más, porque encima que tenemos ese escudo protector, hay países que ponen un porcentaje muy pequeño de su PIB.

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