El nacionalismo gallego lleva unos días descompuesto ante una encuesta que le ha enfrentado a la realidad social de Galicia.
Por primera vez el español es la lengua más hablada en Galicia
El 11 de octubre, el Instituto Gallego de Estadística (IGE) publicó una encuesta que señala que el español es el idioma más hablado de forma habitual en Galicia. En concreto, hay un 29,2% de gallegos que hablan siempre en español y un 23,74% que hablan más en español que en gallego, frente a un 23,99% que hablan siempre en gallego y un 21,52% que hablan más en gallego que en español. Es la primera vez que se da esta situación desde que se vienen haciendo estas encuestas.
Según los datos por edades publicados por el IGE para esta encuesta, el gallego sólo se mantiene como la lengua más hablada entre los mayores de 50 años, con una especial incidencia entre los mayores de 65. Hay un dato especialmente relevante: entre los niños de 5 a 14 años un 53,67% habla en español siempre, un porcentaje que es del 43,01% entre los jóvenes de 15 a 29 años.
La RAG se lamenta por la «decadencia del gallego»
Ante estos datos, la Real Academia Gallega (RAG) se ha lamentado señalando que "en un par de décadas probablemente dejaría de haber gallegohablantes menores de 15 años, y la decadencia del gallego se volvería irreversible". Como de costumbre, la RAG echa la culpa a la política lingüística, a pesar de que esa política se viene orientando, desde hace muchos años, a privilegiar el uso del gallego, impartiendo en esta lengua las asignaturas de más texto en las escuelas, excluyendo el español de la toponimia oficial y poniendo la mayor parte de la rotulación de instituciones públicas sólo en gallego.
Una derrota de la ingeniería social
Yo soy gallego hispanohablante y entiendo perfectamente el gallego, que es mi segunda lengua. No me alegro de esta pérdida de hablantes del gallego, porque es una lengua a la que le tengo un gran cariño. De hecho, el nombre de este blog está en gallego y he escrito muchos artículos en esa lengua, además de poseer una colección de música en gallego que no creo que tengan muchos que se declaran nacionalistas.
De lo que sí me alegro es del fracaso de la ingeniería social de algunos políticos, instituciones y organizaciones, que han venido promoviendo políticas para marginar el español en Galicia y, lo que es peor, lesionar los derechos lingüísticos de sus hablantes. Entre esas organizaciones incluyo a los tres partidos del Parlamento gallego: el PP, el BNG y el PSOE, que tienen al nacionalismo lingüístico como doctrina oficial con ciertas diferencias de matiz. Llevan años tratándonos a los gallegos hispanohablantes como forasteros en nuestra propia tierra y ahora resulta que somos la mayoría de la población de esta región.
La responsabilidad de la RAG en el declive del gallego
Entre las causas de ese declive del gallego no sólo está el rechazo que ha generado esa ingeniería social. La ingeniería lingüística que ha hecho la RAG también tiene mucha culpa en esa pérdida de hablantes, como vengo denunciando desde hace años. En 2014 ya señalé aquí que la RAG ha borrado palabras de uso habitual en gallego, como "pulpo", simplemente porque coincidían con la forma castellana.
A eso hay que unirle un absurdo afán de la RAG por tender puentes con el lusismo, cambiando palabras de uso tan habitual como "gracias" por "grazas". A la Real Academia Española nunca se le ocurriría hacer algo tan absurdo, pero la RAG ha primado el nacionalismo lingüístico y un absurdo diferencialismo frente a los usos habituales del gallego, y eso ha acabado teniendo un efecto lamentable a nivel social. Por ejemplo, los que estudiamos en gallego en la década de 1980 aprendimos una forma del idioma anterior a esos cambios absurdos. Hoy en día, los más jóvenes aprenden un gallego de laboratorio que se parece poco al que hablan sus abuelos. Y todo porque algunos lumbreras querían hacer un gallego más lusitanizado por motivos puramente políticos.
Algunos 'defensores del gallego' han contribuido a herirlo de muerte
Paradójicamente, durante el franquismo, cuando el gallego no se impartía en las escuelas -una situación discriminatoria similar a la que se da hoy en Cataluña con el español, con la diferencia de que ahora estamos en una democracia-, la lengua gallega era la más hablada en Galicia con mucha diferencia. La producción de libros en gallego entonces era considerable pero no porque los comprase la Xunta para meterlos en un almacén, sino porque había mucha gente que deseaba leer libros en gallego. El nacionalismo lingüístico de la RAG, del PP, del BNG y del PSOE ha acabado hiriendo de muerte a la lengua a la que dice defender, convirtiendo algo que para muchos gallegos era entrañable en algo que muchos jóvenes identifican como una odiosa imposición. Con "defensores" como ésos, el gallego no necesita enemigos.
Somos las personas las que tenemos derechos, no las lenguas
Obviamente, en un mundo globalizado, el español tiene un potencial enorme, pues nos sirve para comunicarnos con casi 600 millones de personas. Sería un buen argumento para priorizar el estudio del español, pero desde hace muchos años vengo defendiendo la libre elección de idioma. No importa que haya políticos que crean tener buenos argumentos para priorizar una lengua u otra en las escuelas: las que deben decidir la lengua de escolarización de sus hijos son las familias, en el marco del derecho a la libertad de educación propio de una democracia. En otros países con dos o más idiomas oficiales existe esa libre elección. No importa cuál sea el resultado en número de hablantes, sino que éstos vean respetadas sus libertades. Somos las personas las que tenemos derechos, no las lenguas.
En Galicia y en otras regiones de España, muchos políticos se han empeñado en pisotear esa libertad. Pues ahí tienen el resultado de intentar poner puertas al campo: la Libertad ha acabado derrotando a su ingeniería social. Una derrota que aplaudo, con la pena de que el perjudicado sea un idioma por el que siento un gran cariño y que no tiene la culpa de tener unos "defensores" tan necios.
No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico: Pulsa aquí para suscribirte |
Comentarios:
Otromas
A veces, el sentido común se impone…
19:22 | 17/10/24
Elentir
Muy bueno este comentario que ha hecho F.J. Fernández Tarrío sobre este artículo en Twitter:
«Y los mismos fanáticos que han logrado que muchos gallegos vean con hastío una hermosa lengua regional, (por la tozudez de esa tropa sectaria en imponerla “contra” el español, que es una lengua tan gallega como el gallego), se dan golpes de pecho y suplican MÁS PASTA para perseverar en el error. Porque tiene uno la sensación de que lo único que buscan es eso: la pasta y los chiringuitos (subvenciones, puestos, chiringuitos, editoriales…) A ver si es por eso, vaya usted a saber, que los nazios son los primeros en “victimizarse” por las consecuencias de sus propias leyes lingüísticas totalitarias. A ver si va a ser por el negocio y tal…»
20:08 | 17/10/24
Berto
Cuando los de siempre quieren imponer algo, les suele salir el tiro por la culata. Lo que no quieren ver los nazionalistas, e izquierda en general, es el español es igual de gallego que el gallego.
En Ferrol se ha hablado siempre más español que gallego, por la Armada y los astilleros, que han traído gentes de muchos lugares. Por mi parte, apenas estudié gallego, porque en la EGB de hace muchos años tenía la opción de no elegirlo, aunque lo entiendo perfectamente y creo que lo hablo tan bien como algunos que vsn de nacionalistas. No lo empleo casi nunca y tampoco le impongo a nadie que me hable español, me pueden hablar en gallego y yo responder en gallego si me apetece, pero de imponerme algo, nada de nada.
1:31 | 18/10/24
Alberto77
La Galicia gallego parlante, la de los pueblos se muere, mientras las ciudades gallegas sobreviven gracias a la inmigración mayoritariamente de hispanoamérica y en muchos casos de hijos o nietos de gallegos retornados.
Basta echar un vistazo a Youtube y te encuentras con un montón de cubanos o argentinos que han emigrado a Galicia.
La Junta de Galicia está dando ayudas a gallegos retornados y muchos nietos o bisnietos de gente emigrada de Galicia, sobretodo a Argentina está llegando a Galicia por las ayudas.
En Cataluña cada vez se habla menos el catalán y más el árabe o el español y es frecuente que en pueblos de Barcelona o Gerona los chavales se mofen de los profesores lazis cuando van de excursión, poniéndoles el himno de España, el himno de la Falange o cantando «Ay que votar a VOX» como consecuencia ya ha habido profesores lazis que han llegado a solicitar la baja psicológica por que sus alumnos hablan español por los pasillos y en el recreo. Ahora el PSC en Cataluña va a endurecer la normativa para multar más aún a quién rotule sus carteles en español o si tienen de dependiente en su negocio a alguien que no sepa catalán. Mientras muchos jóvenes catalanes pirándose huyendo de los altos precios de la vivienda, la inseguridad o la imposición Lazi. Ayer por ejemplo un chaval le decía en un vídeo a un diputado de VOX que había solicitado su traslado a Toledo por que en Cataluña el precio de la vivienda estaba imposible.
7:25 | 18/10/24
escoces
Es una pena porque el gallego es un idioma poético y precioso. Por otro lado hay que reconocer que una gran cantidad de ciudadanos que viven, trabajan y pagan impuestos no son gallego. Muchos han aprendido el idioma. Mi mujer es gallega y parlante. Al igual que yo soy anglo-argentino y ‘falo’ el castellano igual que el ingles. Hice el bachillerato tanto en Buenos Aires como el británico en un colegio bilingue (igual que en Gales). Volviendo al galego. Yo lo puedo leer y interpretarlo (TVG y la Ponton), pero no se hablarlo.
Volviendo a Buenos Aires. Soy de origen porteño y conozco el ‘lunfardo’, o se la jerga del idioma.
El típico ‘che vos’.
10:39 | 18/10/24
wladimir
es verdad….
el sentido comun y la propia comunidad es la que decide como se expresan y comunican…no lo va hacer un grupo de intelectuales con ideas fuera de orden para imponer por la fuerza un modo de ver las cosas….
12:16 | 18/10/24
AlbertoAG
Muchos que dicen defender una determinada lengua al final acaban destrozándola por completo. Personalmente, creo que en España, las lenguas regionales que se librarán de ser destrozadas son aquellas que no se utilicen para los proyectos de ingeniería social de los políticos.
Lo más seguro que que haya lenguas minoritarias en el mundo que sean imposibles de extender a ámbitos como el médico, el jurídico y el científico, pues habría que tomar demasiados extranjerismos que al final se acaban cargando la lengua al ser imposibles de adaptarlos y/o traducirlos.
Alberto77, ya solo faltaba que los chavales pusieran la Marcha de Oriamendi.
10:24 | 19/10/24
Opina sobre esta entrada: