Feijóo repite un compromiso educativo y lingüístico que ya incumplió en Galicia

Una de las cosas que más degradan la política es ver a los partidos hacer promesas que ya incumplieron claramente allí donde gobiernan.

La gran promesa electoral rota por Feijóo, que ahora dice que «lo que digo, lo hago»
Una campaña contra el español es noticia si se hace en Cataluña pero no si se hace en Galicia

Hace unos días, el diario El Mundo afirmó que el Partido Popular (PP) garantizará "en toda la nación el derecho a aprender en español". Según este medio, el PP pretende matizar una propuesta que figura en la ponencia política de su 21º congreso (ver PDF), que ahora mismo afirma lo siguiente:

"Aseguraremos que en la legislación nacional se garantice el aprendizaje completo del español en todas las etapas del sistema educativo y garantizaremos el derecho a usarlo en todos los ámbitos".

Según El Mundo, el PP habría mejorado la redacción de esta propuesta, garantizando "el derecho constitucional de recibir enseñanza en español en todas las etapas del sistema educativo y en toda la nación, desde el respeto a las lenguas cooficiales de cada una de las comunidades y en cumplimiento de las sentencias judiciales".

Ahora mismo me sentiría muy ilusionado leyendo esto si yo fuese un extraterrestre, si mi nave acabase de aterrizar y si hubiese conocido la existencia de Alberto Núñez Feijóo y del PP hace unos minutos. Pero no es así. Ese compromiso ya fue planteado por Feijóo y por el PP en 2009, cuando el actual presidente nacional de ese partido era candidato a presidir el gobierno autonómico de Galicia. En aquella campaña electoral, Feijóo dijo los gallegos podrían elegir la lengua en la que estudien sus hijos. Feijóo aseguró: "Vamos a intentar seguir promocionando el uso del gallego" pero "en un marco de libertad lingüística".

Fui uno de los gallegos que votaron a Feijóo y al PP en aquellas elecciones. Lo hice fiándome de aquella promesa. El PP ganó esas elecciones gallegas por mayoría absoluta y Feijóo se convirtió en presidente de la Xunta de Galicia. Nueve meses después, Feijóo anunció un modelo de "trilingüismo" en los centros educativos que traicionaba su compromiso electoral. Una vez más, los políticos decidían por las familias. Hoy en día, 16 años después, esa promesa de Feijóo y del PP sigue sin cumplirse en Galicia, donde las asignaturas escolares con más textos se imparten en gallego, sin que las familias puedan elegir el idioma de escolarización. Esto no es libertad, es imposición.

Feijóo no sólo rompió su promesa, sino que tres años después, para justificarse por haberlo hecho, afirmó que la libertad lingüística era como el Apartheid sudafricano, cuando precisamente la caída de ese régimen racista permitió instaurar la libertad lingüística en Sudáfrica. De hecho, el modelo lingüistico de ese régimen racista era un modelo trilingüe muy parecido al establecido por Feijóo en Galicia.

Así pues, lo que parece una esperanzadora promesa del PP no es más que un engaño, otro anzuelo para que los españoles piquen y confíen su voto a un partido y a un político que han estado muchos años traicionando ese compromiso en Galicia. El PP no ha mostrado ninguna voluntad de permitir que en los colegios gallegos se pueda escolarizar a los niños en español, permitiéndoles aprender las distintas asignaturas en su lengua materna, algo que sería perfectamente compatible con que las familias que prefieran escolarizar a sus hijos en gallego puedan también ejercer ese derecho. El PP lleva 16 años disfrutando de una mayoría absoluta en Galicia que le permite instaurar la libertad lingüística pero no ha querido hacerlo, así que esa propuesta anunciada en su ponencia política no tiene ninguna credibilidad.

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Foto: Partido Popular.