Puntualizando a Mayor Oreja

Jaime Mayor Oreja ha tenido una viva discusión con Alfonso Osorio García en el Congreso "Católicos y Vida Pública" que se celebra estos días en Madrid. El debate tuvo su eje central en la actuación del gobierno de Aznar en relación al derecho a vivir y, más en concreto, sobre su negativa a derogar la vigente Ley del Aborto.

Dice Mayor que "es injusto condenar a Aznar en el plano de los valores sólo por no derogar el aborto". El problema, don Jaime, es que no hablamos sólo de derogar el aborto, sino del fraude de ley sistemático que se ha venido produciendo a cuenta de esa norma, un fraude ante el cual el gobierno del PP no hizo absolutamente nada. El propio Mayor Oreja lo reconoce cuando dice que "se miró para otro lado en la aplicación de la ley". Hay que recordar, además, que la píldora abortiva fue autorizada en España en 1999, estando Aznar en el poder. Desde entonces los abortos químicos en España han aumentado de forma considerable, agravando todavía más la escalada abortista que vive España desde la aprobación de esa ley injusta, cruel e inhumana.

Mayor Oreja apunta, además, que la responsabilidad de Aznar al respecto debe ser compartida por toda la sociedad que no se manifestó ni se movilizó cuando ocurrían esas cosas. Esto es cierto en parte. Entonces éramos menos que ahora quienes nos movilizábamos contra el aborto en España y nos pronunciábamos sin rodeos en defensa de la vida. Pero movilizaciones había, y desde luego ningún político se puede escudar en una falta de respuesta social para permanecer impasible ante la violación sistemática del primero de los derechos humanos. La misión del gobierno de Aznar era amparar ese derecho fundamental y fracasó estrepitosamente en ese punto.

Dicho esto, difiero con Osorio cuando afirma que "no se puede gobernar y dejar vigente la ley actual y luego ir a manifestaciones contra el aborto" ya que es una "profunda hipocresía". Juzgar a alguien como hipócrita es considerar que defiende opiniones en las que no cree. Yo creo que José María Aznar tiene derecho a rectificar, como todo el mundo, aunque bien es cierto que se echa de menos un ejercicio de autocrítica por su parte sobre la política de su gobierno respecto del aborto. Pero insisto: si Aznar se ha dado cuenta de lo terrible que es el aborto y se ha decidido a sumar su voz a la causa de la vida, bienvenido sea. Ojalá los actuales gobernantes del PSOE hicieran lo mismo.

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Comentarios:

  1. Como decía en Twitter, te aplaudo con las orejas. De Aznar se echan de menos ejercicios de autocrítica en muchísimas cosas de su etapa de gobierno, aunque hiciera muchas bien (la economía y parte del terrorismo, tampoco son tantas, pero sí importantes). Ahora, si ha visto la luz, su obligación es dejar claro qué ha rectificado y por qué. Si no es así, no deja de ser oportunismo e hipocresía.

  2. Ronald

    Es que Elentir, ¿Aznar desde cuando ha rectificado públicamente?

  3. Alejandro Campoy

    ¡Vaya que sí, Carlos! Autocrítica por mantener los medios de comunicación dependientes de las administraciones públicas y no liberalizarlos, autocrítica por no ser capaz de blindar definitivamente la justicia frente al ejecutivo y el legislativo, autocrítica por no haberse atrevido a tirar de la manta y desmontar totalmente el chiringuito felipista en el ministerio del interior y en los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, autocrítica por no permitir que el PP fuera un partido más abierto y más democrático, en fin, no acabaríamos…

  4. MR (Monárquico y republicano)

    Cuando en 1989 alcanzó el sr. Aznar la presidencia de Alianza Popular, se dice que recibió una llamada de un representante de la iglesia católica para que se comprometiera a condenar el aborto; “si ustedes piden el voto para nosotros, no dudaré en hacerlo”, dijo tranquilamente… No sé si será verdad, pero me cuadra con los valores que tienen nuestros políticos: llegar al poder a toda costa.
    Lo que sí es cierto, y yo lo oí, es que en una entrevista en RTVE en el año 93 -soy cuarentón, pero no tan mayor como para que me falle la memoria-, dijo «nuestro partido es defnsor de la vida», refiriéndose al aborto. Luego… ¡ay! A ese otro cuarentón, que lo era entonces, sí que le falló la memoria, porque en el 96 ya se le olvidó lo que dijo. Se ve que con parar la aprobación en el Congreso del cuarto supuesto de la actual ley, se debió decir: «yo, ya he cumplido».
    Y otra vez a la oposición, gracias a las ilustrativas razones que d. Alejandro Campoy expuso: por ser bueno con el aparato felipista, el muerto viviente se lo zampó. Y otra vez, repito, en la oposición, vuelve a ser el gran defensor de la vida que fue…
    Lo del primer párrafo que escribí, ya dije que no sé si será cierto, pero permítaseme dudar no de que el sr. Aznar diga ahora, sino que lo que diga sea verdad.

  5. Ahora soy yo el que aplaude con las orejas lo que ha escrito Alejandro. Lo firmo encantado. Sí que añadiría a la lista el incumplimiento de la sentencia del «Antenicidio», cosa que le debemos a Rodrigo Rato, por cierto. Me acuerdo de ese detallito cada vez que alguien apela a él como si fuese la repanocha del liberalismo…

  6. vanlop

    El Sr Aznar es una figura que envejece mal, conforme pasa el tiempo se van sacando a la luz las graves acciones y omisiones que tuvo.

    Iba a ñadir a la lista el antenicidio pero Elentir se me ha adelantado y me ha recodado que el Sr Rato no es el espejejo en que nos miraríamos con tranquilidad.

    Pero la memoria de los pueblos es frágil y se nos olvidan las cosas y por tanto estamos obligados a repetirlas, una y otra vez. Espero que los que proponen a alguien como salvador del chiringuito hagan un poco de memoria antes de proclamar el fervorin.

  7. «responsabilidad de Aznar al respecto debe ser compartida por toda la sociedad que no se manifestó ni se movilizó cuando ocurrían esas cosas.» Pues no. No es cierto. Porque no existía internet (adivina por qué los políticos quieren caparlo): no existía esa capacidad que existe hoy en día de expresarse públicamente. ¿Cómo nos podíamos movilizar en su época?¿Es que nos tenemos que movilizar para que los políticos no conculquen nuestra voluntad?¿Es que ellos pueden decidir asuntos de forma ajena a la voluntad mayoritaria de quienes representan? Se me ha caído otro mito. Mayor Oreja, por echar balones fuera y querer compartir la responsabilidad de gobierno con los gobernados.

  8. Por supuesto que cualquiera tiene derecho a rectificar y actuar de otra manera a como lo había hecho antes. Pero cuando, como es el caso de Aznar, se trata de un pecado cometido al ostentar un cargo público, y se aparece públicamente de nuevo en una manifestación contra el aborto, es necesario hacer previamente o al menos «in situ» PÚBLICA muestra de arrepentimiento y propósito de enmienda.

    En cambio, Aznar no hizo eso, porque no lo piensa. Todos escuchamos cómo lo único que llevó a Aznar a la manifestación fue el problema de las niñas de 16 años y el consentimiento paterno. Justamente, entonces, se le trata de hipócrita. Fue allí a algo más: a intentar prostituir el esfuerzo de millones de españoles en provecho de unas siglas que han matado tantos bebés como las del PSOE.

    Y piensan seguir haciéndolo. Mientras se quejan de que la nueva ley considera el aborto como derecho, los gobiernos autónomos del PP lo consideran desde años como derecho al financiarlo con fondos públicos. Y -repito- piensan seguir haciéndolo.

  9. mac over

    Yo lo que creo es que todos, absolutamente todos, deberíamos ser más autocríticos, todos deberíamos entonar el mea culpa y darnos más curas de humildad, porque si bien es cierto que aznar en sus gobiernos no hizo nada para derogar la ley, también es cierto que por aquel entonces las muestras de rechazo a la ley, el grado de indignación ante esta lacra era prácticamente inexistente, no queramos ser ahora más Papista que el Papa, seamos serios.
    El pp, señores, para empezar recordaré que no es un partido teocrático, ni puritano, ni tampoco laico, en el seno del partido conviven desde liberales hasta conservadores, pero que se creen? cuanto tardaría el psoe en volver a aprobar una ley en favor del aborto si aznar la hubiese derogado?. –

  10. Mac Over, para defender el derecho a vivir de los más inocentes no hace falta ser ni un teocrático ni un puritano. Basta con tener una pizca de ética y de respeto por el ser humano.

    Desde luego, tu comentario me confirma que algunos peperos tenéis una torrija progre que no os la aguantáis…

  11. Mac Over, ni yo ni otros que escribimos aquí tenbemos que entonar el mea cualpa, a lo mejor el problema lo tiene tú en tu conciencia. Nosotros no. Nosotros, durante el gobierno de Aznar, estuvimos en la lucha provida, estuvimos en los inicios de las asociaciones de la sociedad civil que han sido el germen de las respuesta por la protección de la vida, la mujer y la maternidad. Usamos desde entonces internet porque era libre, y porque los medios, unos afines al PSOE y otros al PP, eran completamente impermeables a la denuncia provida. Algunos, nos jugamos el puesto de trabajo y sufrimos consecuencias personales y profesionales por enfrentarnos a medidas abortivas que había aprobado el PP (píldora del día después, investigación con embriones, etc). Cierto, entonces la sociedad civil aún no tenía el desarrollo ni la capacidad de movilización que ha tenido luego, cuando un loco peligroson como ZP ha ocupado la Moncloa.

    Pero no deformemos las cosas: el PP favoreció el aborto a pesar de un electorado masivamente contrario al aborto. Sería realmente difícilmde califiacr que ahora desde el propio PP se echara ala culpa a su electorado. Aunque no sé por qué, no me sorprende. Es penoso que haya que parafrasear al Pepiño Blanco para defender al PP, con aquel: «cuando estaba Aznar no dijisteis nada». Cosas veredes…

  12. José Sáez

    Si Aznar rectificase de verdad y reconociese que se equivocó, bienvenido sería a la lucha por la vida. Pero no basta con que vaya a una manifestación o hable contra la nueva ley de Zapatero. Debe admitir públicamente que metió la pata hasta el fondo y rectificar de verdad. Aún así, no me sería fácil olvidar que durante su mandato, no sólo no derogó la ley actual, sino que miró a otro lado ante el coladero en que se había convertido.

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