Los daños provocados por un bombardero B-52 en RAF Fairford al carretear en diagonal

@DefensaAviacion EN Lun 17·7·2023 · 19:37 0

El B-52 es un bombardero magnífico que lleva muchos años en servicio y que seguramente jubilará a los más modernos B-1B Lancer y B-2 Spirit.

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No obstante, el B-52 tiene un ligero problema de tamaño. Es un avión grande: su fuselaje mide 48,5 metros de largo y la distancia entre las puntas de las alas es de 56,4 metros. Además, sus alas son de diedro negativo, es decir, que están inclinadas hacia abajo. Esa inclinación es más acentuada cuando está en tierra. Además, el B-52 tiene un tren de aterrizaje atípico, llamado de doble bicicleta, con cuatro juegos de ruedas en vez de tres, que es lo habitual en la mayoría de los aviones.

Este peculiar tren de aterrizaje le otorga ventajas cuando tiene que tomar tierra con viento cruzado, ya que puede orientar los cuatro juegos de ruedas en el mismo ángulo y hacer el carreteo en diagonal, algo que los aviones con tres juegos de ruedas no pueden hacer. Para evitar perder el equilibrio y que las puntas de las alas rocen el suelo, el B-52 tiene dos pequeñas ruedas retráctiles en el tramo final de sus alas. Estas ruedas no suelen tocar el suelo, salvo que una de las alas estén muy inclinada.

El pasado fin de semana, un B-52H de la USAF, el número de serie 61-0029 (cn 464456), perteneciente al 93º Escuadrón de Bombardeo "Indian Outlaws", con base en Barksdale AFB, Luisiana, participó en The Royal International Air Tattoo, el gran festival aéreo anual que se celebra en RAF Fairford, Inglaterra. El bombardero estratégico hizo una exhibición aérea durante la cual despegó, hizo dos pasadas y aterrizó, carreteando a continuación en diagonal mientras seguía al coche del "Follow me". Epicaviation47 ha publicado un vídeo en el que muestra esta exhibición:

Como se ve al final, en su carreteo en diagonal, el B-52 empezó a dañar las luces de un lado de la pista, hasta 18 en total, según señala el autor del vídeo. No parece que este carreteo en diagonal se hiciese por viento cruzado, pues el avión aterrizó recto. Más bien parece que el piloto quiso hacer una demostración de la capacidad del avión de carretear estando girado. Parace que no midió bien los posibles efectos. Podéis ver aquí algunas capturas del vídeo en las que se aprecian los daños.

En la imagen de arriba, el B-52 ya ha tocado una de las luces (se ve menos intensa). En la siguiente imagen vemos como el avión toca otra luz y la tumba.

Finalmente, la luz acaba apagada. Algunas quedaron dañadas y otras destrozadas. Así hasta 18 luces, según la cuenta hecha por Epicaviation47.

Hay que reconocer que el piloto americano tuvo buena puntería. Incluso queriendo hacerlo a propósito, sería difícil llegar a dañar 18 luces de pista...

+ ACTUALIZADO 22:24h: Elwyn R también ha publicado el vídeo de la exhibición del B-25H en el RIAT, pero en este caso no se observa la rotura de las luces: