No pasa un día sin que los separaristas exhiban su faceta más fanática e intolerante en España. Esta vez le toca a los separatistas catalanes.
El pasado sábado, Javier Rubio Donzé, fundador de Academia Play, publicó un mensaje en su cuenta de Twitter: "Mi padre es catalán. Nació en Barcelona, de madre catalana con apellidos catalanes. Mi padre nunca ha hablado catalán y nunca lo ha aprendido. Tampoco le ha interesado aprenderlo porque no lo ha necesitado. ¿Es un mal catalán?"
Como podéis ver en ese hilo, las respuestas de los separatistas no se hicieron esperar: mensajes insultando a ese catalán (incluso tachándolo de nazi), diciendo que es un mal catalán e incluso negando que sea catalán, por el mero hecho de no hablar en catalán o de tener el apellido "Rubio". Por si no llegaba con los ataques de los separaristas catalanes, el escritor separatista gallego Suso de Toro ha acusado a ese catalán de "franquista". Además de en las respuestas a ese tuiteo, los insultos también han llegado por los tuiteos citados, entre ellos mensajes llamando "colonos" a Javier y a su padre. El fundador de Academia Play lleva ya tres días recibiendo ese tipo de mensajes. Por supuesto, todo mi apoyo para él.
Lo que le ha ocurrido a Javier Rubio es una exhibición de intolerancia y de fanatismo muy frecuente en las regiones españolas con movimientos separatistas. Estos movimientos están haciendo justamente lo mismo que ellos criticaban del régimen franquista. Curiosamente, llaman "fascistas" a los que no opinan como ellos, mientras los separatistas actúan con la misma intolerancia y el mismo fanatismo que los auténticos fascistas, con quienes comparten el extremismo nacionalista y el afán de que el Estado controle por completo la vida de las personas, incluso la lengua en la que deben hablar.
La paradoja es que la semana pasada, y por exigencia de los partidos separatistas, los socialistas anunciaron que admitirán el uso de lenguas regionales en el Congreso invocando "la pluralidad y la diversidad" de lenguas de España. Una pluralidad y una diversidad que los separatistas no aceptan en sus respectivas regiones: están empeñados en desterrar el español a toda costa, incluso a base de insultos y de exhibiciones de intolerancia como la que está sufriendo Javier Rubio, un ejemplo de lo que tienen que vivir a diario muchos catalanes que no opinan como los separatistas.
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Foto: Libertad Digital. Una marcha de separatistas catalanes con antorchas, al más puro estilo nazi, el 11 de septiembre de 2014.
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Comentarios:
wladimir
en verdad estos…
personajes se pasan de la raya por su «independencia»…como es eso de mandar mensajes insultando a ese catalán tachándolo de nazi…y todo por no hablar el Catalan?…mas bien los Comunistas (?sovieticos) o nazis (?) parecen ellos los famosos indepes….
al parecer viven su «realidad» paralela sin darse cuenta que el mundo es realmente distinto a lo que ellos mismos se han inventado….
2:40 | 23/08/23
HijodeDios
simplemente el servicio publico de Sanidad Catsalud, solo te escribe en catalan y si vas a un centro publico de atención al ciudadano entras en la sede de un UNICO partido político. el golpista. Gracias PPSEO
19:40 | 23/08/23
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