No puedes presumir de 'sentido de Estado' y no mostrarlo cuando España necesita unidad
EN"Estamos a tiempo de evitar que se consume la amenaza que se cierne sobre el Estado y de evitar un punto de no retorno".
«Nuestro modelo de convivencia se ha visto desafiado»
Lo que acabáis de leer son palabras pronunciadas ayer por Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, que añadió: "Nuestro modelo de convivencia se ha visto desafiado y la respuesta debe partir de la defensa del pacto que entre todos nos dimos para seguir avanzando y construyendo unidos un país mejor". Feijóo también afirmó que España ha sido capaz de "superar los desafíos que la amenazaban desde la unidad y el consenso, con altura de miras y respeto a nuestra Constitución".
Esa declaración suena muy bien, pero se convierte en palabras vacías si no van acompañadas de hechos. No se puede pedir unidad ante un problema común para todos los demócratas y al mismo tiempo actuar como si no lo fuese, como si la única fuerza política que está dispuesta a defender nuestro modelo de convivencia fuese el Partido Popular y no hubiese ninguna más. En los pactos alcanzados en varias regiones y ciudades, Vox ha demostrado estar dispuesto a entenderse con el PP con un objetivo común, que es la defensa de España y la Libertad.
Una actitud repelente del PP hacia Vox que es impropia de un momento así
Digo todo esto porque ante el desafío que España está viviendo a manos del gobierno de Pedro Sánchez y sus socios separatistas, el PP ha decidido convocar un "acto de partido" contra la amnistía y ha utilizado a sus medios afines para transmitir el mensaje de que no invitará a Vox, para evitar ser fotografiado con dirigentes de ese partido. Esto no es nada nuevo, y desde luego no es la actitud que el partido más votado debería tener en un momento tan crítico.
Hasta ahora, Vox ha actuado con mucha generosidad anunciando su apoyo a la investidura de Feijóo, un apoyo que el presidente del PP acabó agradeciendo. La tradicional actitud repelente del PP hacia Vox parecía haber cambiado con gestos como la reunión pública entre Feijóo y Santiago Abascal, presidente de Vox, el 5 de septiembre, en la primera foto que se ha podido tomar de una reunión entre ambos. Pero ahora el PP vuelve a su actitud mezquina de antes, a tratar a Vox como si fuese un partido apestado y a demostrar una escasa altura de miras en un momento como éste. No diré que me siento decepcionado porque hace ya muchos años que no espero gran cosa del PP.
¿Dónde está ese «sentido de Estado» del que tanto presume el PP?
La dirección del PP debería analizar críticamente la imagen que da con un acto como ése y con gestos como los que acaba de lanzar a Vox. Uno de los motivos del fracaso del centro-derecha en las elecciones de julio fue el afán del PP por tratar a Vox con repugnancia, contribuyendo a alimentar la campaña de la izquierda para demonizar a ese partido al mismo tiempo que Vox permitía al PP hacerse con varios gobiernos regionales y locales. Una actitud más bien ingrata y necia.
El PP lleva muchos años presumiendo de tener "sentido de Estado", pero a la hora de la verdad no lo exhibe precisamente cuando España necesita especialmente la unidad entre los constitucionalistas. El PP parece empeñado en repetir sus errores de hace dos meses, olvidando la situación a la que esos errores han conducido a España.
En una situación así, lo que España necesita es una movilización conjunta y unitaria en las calles, dejando las diferencias partidistas a un lado, y no un acto de partido. Es alarmante ver la escasa coherencia que exhibe el PP al hacer un diagnóstico de la situación como el que he indicado al inicio y actuar después como si nada de eso fuera cierto. Cada día que pasa entiendo menos a la dirección de ese partido.
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Foto: Vox Congreso.
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Comentarios:
JuanM
Feijoo una vez demuestra que es una persona como Pedro Sánchez. Su manifiesta limitación intelectual y cultural, como Pedro Sánchez, la suple con rencor, envidia y soberbia.
Su rostro no puede ni siquiera ocultar su rabia frente a Ayuso, viendo que ésta, sin aparente esfuerzo le está sacando las castañas del fuego.
Feijoo es colaborador necesario de Pedro Sánchez en el desmoronamiento de la nación española.
Y, no deja de ser ceguera intelectual decir que los diputados del PSOE son borregos cuando ninguno se atreve a cuestionar las órdenes del líder, siendo que los diputados del PP son tan borregos como aquéllos.
7:42 | 16/09/23
Pau
Muy de acuerdo con el artículo, pero quisiera volver sobre otros aspectos de la realidad del PP expresado en otros anteriores.
Hay dos elementos que muestran al PP actual. El primero, que no tiene ni ideario ni programa, y en consecuencia todo lo que hace es indefinido y tratando de acertar con lo ‘políticamente correcto’, la ideología totalitaria que nos oprime. Así en este caso, el acto es de partido pero no lo es, y se llama a la movilización, y lo único que queda claro es que no quieren ver por allí a VOX, que es el segundo elemento de su ser, la repulsión a VOX.
La aversión a VOX que le lleva a distanciarse, una incongruencia ya que es socio de gobierno en 5 CC.AA y 140 ayuntamientos, tiene dos razones, por un lado quieren quitarle legitimidad a su existencia por considerar que le “roba” a sus votantes, sin entender aún las razones profundas de que muchos le hayamos abandonado. Pero hay algo más, el PP detesta a VOX porque su ideología le resulta incómoda, es un espejo que le devuelve su imagen, lo que fue y ya no es, hoy es un partido abortista que ha asumido toda la ideología marxista que el PSOE ha introducido en la legislación española, mantenida por el PP de Rajoy y su mayoría absoluta de 186 escaños en el Congreso y 208 en el Senado en la Legislatura de 2011-2015.
El PP es un partido que se ha sumado a la ingeniería social marxista, por lo que se sitúa en el frente de demolición de la Civilización Occidental, que se hunde fundamentalmente por el crimen institucionalizado del aborto, el homicidio en el vientre materno que hasta el año 2021 ha costado la vida a 2.665.206 españoles. Sólo VOX está en la resistencia y en la regeneración política y moral de España.
11:10 | 16/09/23
Fernando19
Con esperanza recibí la noticia de una concentración para manifestar nuestra repulsa por el proyecto de amnistía con el que Sánchez pretende perpetuarse en el gobierno.
A las pocas horas, cómo jarro de agua fría, conozco que la manifestación sólo responde al interés de Feijoó de explicar a los concentrados por qué el PP se ha entrevistado con Junts y dado su beneplácito para que los partidos independentistas catalanes formen grupo en el Senado y cuáles son sus líneas maestras para abordar la investidura a la que concurrirá dos días después.
El desprecio por más de tres millones de votantes de VOX y de sus treinta y tres parlamentarios supera los límites de lo admisible.
Ubica la concentración en la plaza de Felipe II con el fin de evitar connotaciones pretéritas de la Plaza de Colón, renuncia a una mayor afluencia de público con el fin de evitar las críticas de la ultraizquierda.
Debería haberse quedado en su terruño. Hará bueno a Rajoy.
No asistiré, al igual que otros muchos, a escuchar su discurso moderado cuando está en en juego la supervivencia de España.
16:20 | 16/09/23
Armentarius
Mezquino, acomplejado ante los progres. Desagradecido y desatento con quien debería ser su aliado natural, el único con quien puede y debe contar en estos momentos. Así es, por desgracia, el líder (es un decir) del PP, ese Núñez a quien se reconocen cualidades de “buen gestor” –depende de para quién, desde luego-, pero que una y otra vez se revela incapaz de afrontar con lucidez y valentía el tiempo crítico que vivimos.
VOX tendría que tener esto siempre muy presente y trazar sus planes sin esperar nada de un sujeto que ha demostrado, por activa y por pasiva, cortedad de miras, apocamiento y escasa inteligencia. Su supuesto “sentido de Estado” se reduce a mera, y necia, estrategia de partido. Ellos sabrán lo que hacen y por qué lo hacen. Pero que no pretendan engañarnos: no es España lo que les importa.
Leo con interés los comentarios publicados. Creo que Pau acierta al decir que “el PP detesta a VOX porque su ideología le resulta incómoda, es un espejo que le devuelve su imagen, lo que fue”. Esa incomodidad es, en efecto, esencial para entender el comportamiento del PP. En la frase de Pau solo cambiaría algo el final; lo que el espejo devuelve al PP cuando se mira en VOX no es “su imagen, lo que (el PP) fue”, sino “lo que podría y debería haber sido”.
17:28 | 16/09/23
fersa
Es la mediocridad. Necesita alejar a VOX, incapaz de liderar una alternativa que incluya a todos los constitucionalistas y tire del carro. Lo primero es conseguir ellos el poder, ciertas similitudes con Sánchez. Un regalo para las izquierdas y separatistas.
23:45 | 16/09/23
escoces
Para los que no viven en Galicia, Feijoo demostró su ‘pasividad’ durante años al no hacerle frente al ‘mejor alcalde del mundo’ Don Abel Caballero Álvarez’ que durante AÑOS culpo a la Xunta de no hacer nada por Vigo incluido en no financiar todos los caprichos increíbles de este gran gúru del FEMP (ahora cesado) y proveedor de las mejores luces de Navidad incluido Nueva York (Time Sq.).
¿O no?
13:35 | 17/09/23
escoces
Por cierto. Estoy de acuerdo con vosotros en todo lo expresado en esta nota.
‘Ayuso for President!
13:42 | 17/09/23
Jandro
Lo que tendría que pasar es que los ciudadanos, hartos de estas tonterías del PP, contraprogramaran con una convocatoria propia que sonrojase a las gaviotas. Pero, claro, a ver quién es el guapo que convoca contra el poder mediático. Una vez más, el partido podrido ni come ni deja comer.
Pero hay algo positivo en el continuo marcar distancias de Feijóo: reafirma al votante de Vox. Es lo contrario de lo que siempre trata de hacer –y a veces, lamentablemente, consigue– Ayuso: disfrazarse de Vox para engañar al elector incauto. En este sentido, el PP cuenta con unas figuras en primera fila, las que apunta Carlos-Anticomunista, que se han encargado de acabar con las escasísimas posibilidades de que el voto que se les fue hubiese vuelto jamás.
Y, con permiso, voy a matizar todavía más la frase de Pau-Armentarius: el PP detesta a Vox mucho más de lo que ama a España –si es que ama algo a nuestra nación– porque Vox es un espejo que le devuelve la imagen de lo que el PP trató de hacernos creer que era.
20:55 | 17/09/23
wladimir
el PP es un partido contradictorio
ellos presumen tener sentido de estsdo…cuando en realidad nunca lo han tenido y por un lado atacaban a VOX y se acercaban al Regimen PSOE-Podemos y ahora despues se apartan del Regimen para acercarse a VOX…quien los entiende…
11:03 | 18/09/23
interprete143
Bajo este clima de repulsa que el PP demuestra hacia VoX y en medio de la turbia tormenta en la que nos encontramos tiene Abascal en mi opinión una oportunidad de oro.
Si como dice Cuca la convocatoria del próximo día 28 en Madrid es una convocatoria abierta bajo el lema, inocuo y timorato, propio del PP, «En defensa de la igualdad de los españoles», la aparición inesperada de Abascal en dicha convocatoria acompañado de las máximas autoridades de VoX sería noticia protagonista de la concentración
Imaginemos a Abascal y los suyos en medio de la plaza declarando ante los medios su firme voluntad de dejar a un lado miserias de partido para estar donde haga falta y hacer frente patriótico en la defensa de la unidad de España y de su constitución.
Imaginemos a un Abascal en su salsa, entre la gente, buscando la mano de los líderes del PP allí presentes para testimoniar pública y gráficamente dicho mensaje.
Una cosa así ¿No daría a la situación un golpe de efecto rotundo?
De un plumazo Vox marcaría el camino y el espíritu de unidad a seguir; VoX cobraría la iniciativa de la oposición y de paso, a coste cero, situaría a VoX en el centro perdido de la actualidad política.
Si esto ocurriera me atrevo a afirmar que poca gente en España no pensaría que la derecha española ha encontrado su Norte. Por fin.
20:58 | 18/09/23
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