Gallardón y Rajoy contra el Tea Party

"Creo que no sería bueno de ninguna de las formas ni para el PP, que no es lo más importante, ni para la democracia española". Lo ha dicho hoy Gallardón sobre el Tea Party. Esa declaración tiene su lógica. Como nos recuerda hoy Ignacio Arsuaga en su blog, los principios básicos del Tea Party son menos intervencionismo estatal, una reducción de la presión fiscal, la recuperación del sentido de nación y una regeneración moral de la sociedad, que incluye el respeto de los derechos y las libertades fundamentales. En resumen: que el Tea Party defiende aquello que a Gallardón le importa un rábano o que sufre el maltrato de su política al más puro estilo socialista, basada en un despilfarro constante a costa de machacar a impuestos a los madrileños.

Es un sarcasmo que Gallardón considere que el Tea Party no es bueno para la democracia. Precisamente el Tea Party apela a las raíces de la democracia para lograr su regeneración y más participación de los ciudadanos en la vida pública. A esta actitud netamente democrática el Alcalde de Madrid le opone un alegato antidemócratico, criticando "que se formen fuera de los partidos políticos, o colaterales o tangenciales a los partidos políticos, corrientes de opinión que puedan condicionar el discurso del mismo". O dicho de otro modo: que Gallardón no admite que nadie discuta a los partidos políticos el monopolio que creen tener del debate democrático, como si para poder opinar sobre asuntos que nos afectan a todos e influir en la vida pública fuese imprescindible tener el carnet de un partido. Lo que el señor Gallardón defiende es una democracia secuestrada por los partidos políticos y, más concretamente, por los aparatos que dirigen los partidos. Una partitocracia, en fin, en la que los gobernados no incordien con sus quejas a los gobernantes.

Rajoy opone sus fracasadas recetas al exitoso Tea Party

Pero el Alcalde de Madrid no ha sido el único que ha mostrado su desagrado por el movimiento social conservador hoy tan pujante en Estados Unidos: Mariano Rajoy se ha mostrado más crítico con el Tea Party que con Obama, y ha opuesto a ese movimiento ciudadano lo que él define como un PP "moderado y centrado", es decir, tibio y dedicado por entero a heredar el poder de Zapatero aunque eso implique renunciar a la defensa de los derechos y libertades más elementales, como ya ha demostrado el PP con su traición a sus promesas de libertad lingüística en Galicia, su abandono de las víctimas del terrorismo y su distanciamiento del movimiento social por el derecho a vivir.

Esta tibieza y la falta de liderazgo y de valor que demuestra Rajoy al renunciar a esos principios -una renuncia que ya le ha costado la derrota en dos elecciones generales- tiene ahora un efecto en las encuestas electorales, en las que el PP apenas consigue captar los votos que pierde el PSOE. Entre tanto, el Tea Party se ha convertido en la principal amenaza para Obama en las urnas, sosteniendo un discurso de principios, de regeneración de la democracia y de protagonismo de la sociedad frente a la clase política, un discurso que por su transversalidad consigue llegar a todo tipo de votantes. Que Rajoy y Gallardón no capten la idea es la más clara muestra de que ellos no son la solución a los males de nuestra democracia, sino parte del problema.

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(Foto original: EFE/Juanjo Martín)

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Comentarios:

  1. Ahora me explico porqué no pueden ver a Hazte Oír.

  2. Así es, Gazz. Ni HazteOir.org, ni Voces contra el Terrorismo, ni el Instituto Juan de Mariana, ni ninguna otra organización ciudadana que no esté controlada por el PP ni rinda pleitesía a ese partido.

  3. Randall

    Yo lo que percibo en sus declaraciones es un miedo atroz a que algo similar al Tea Party se empiece a mover en España, con la correspondiente «fuga de votos».

  4. Al actual aparato político del PP le dan miedo las convicciones políticas y los valores de las bases del partido y de sus votantes, a los que se supone que deberían representar. Están demasiado pendientes de la encuesta electoral: se parecen en eso a ZP y al PSOE.

  5. Por favor, la actual Tea Party es una broma, nada que ver con los fundadores del movimiento. Pese a todo lo mal que lo hace Rajoy no creo que este precisamente sea el punto donde mas se le pueda criticar.

  6. Jacko: «la actual Tea Party es una broma»

    Pues uno de los senadores de esa «broma», Marco Rubio, es hoy por hoy un más que posible candidato a la Casa Blanca, con bastantes opciones de ganar a Obama.

    Y por cierto, los creadores del Motín del Té del siglo XVIII se disfrazaron de indios y se subieron a un barco para arrojar la mercancía al mar. A lo mejor te parece que el movimiento actual no tiene relación con aquello por ese detalle, porque por lo demás comparte su rechazo a las cargas fiscales exageradas, su patriotismo y su defensa del libre comercio.

  7. pacococo

    Es natural que así piensen, si un movimiento similar triunfara aquí, a más de uno lo iban a correr a gorrazos.

    Es que son parte del problema y esa es la alternativa. Pues que se anden con ojo que puede que la gente prefiera lo muy malo conocido.

  8. Juana de Arco

    ¡¡Genial Elentir!!. Así es. El problema de España son estos politicos estacionados en una dictadura, en conseguir el pdoer a toda costa y como sea.

    El problema de estos dos partidos es la crencia de democracia y de libertad. Son el cáncer de la sociedad.

    Como el PP no lleva pintas de regenerarse, tenemos que movilizarnos todos los españoles, con el Tea Party español: HazteOir.org.

    Los politicos dictadorzuelos como Rajoy Y Zapatero tienen pánico a que se les acabe el chollo, a que los mandemos a sus casas.

    ¿Despabilaremos los españoles de una vez, y sacaremos nuestros respetables traseros de nuestros sofás para hacer algo por nuestros niños y jóvenes? ¿o esperamos a que otros nos saquen las castañas del fuego?

    Una Constitución como la de EEUU pedimos a gritos, que evite este dominio de dos gatos y se larguen a los ocho años, que sirvan a los ciudadanos, en lugar de robarnos y servirse de nosotros, incluso a costa de vidas humanas.

    Rajoy es el Zapatero II en todo, solo entiende de economía y punto. Ni criterios decentes, y ni mucho menos valor aguno.

  9. Yo no pienso apoyar a la Tea Party porque apoye la reducción de los impuestos. Sencillamente hay muchas de sus ideas politicas que para nada comparto y que me parece de todo menos liberales, como la de establecer leyes que promuevan la discriminación en contra de los extranjeros a la hora de conseguir un puesto de trabajo. Quizás desconozcan por completo que precisamente su país es a dia de hoy lo que es por haber sido abierto a la gente de fuera.

  10. Francisco Hoyos

    Hemos pasado de unos reyes absolutistas a unos partidos políticos absolutistas. Reinan para ellos y sin la participación del pueblo. Retuercen leyes, fuerzan voluntades y arrasan haciendas. Ya sólo nos falta la horca y el cuchillo para completar el cuadro. A los dinosaurios se los llevó un meteorito. A estos se los llevará el Tea Party. Es imperioso exigir el fin de la partitocracia y rehacer la Constitución para que el poder vuelva al pueblo soberano.

  11. Cierto. Pero no todos los miembros del Tea Party defienden eso, ni es uno de los rasgos distintivos de ese movimiento.

  12. Lo importante es que ni Gallardón ni Rajoy critican al Tea Party por ideas discutibles que puedan tener (tampoco creo que sepan qué piensan: un ejemplo puede dárnoslo el mismo Rajoy opinando sobre las decisiones económicas de Cameron).
    Lo importante es que lo critican porque es «antidemocrático». Si la democracia es el Gobierno del pueblo para el pueblo y por el pueblo, no puede haber nada «antidemocrático» en que la gente decida qué es lo que quiere hacer con su país (sanidad, educación, defensa, poder judicial, etc.).
    Lo que ocurre, como han dicho otros antes, es que saben que están abusando y que la gente se está cansando de los n+1 asesores, de los sueldos y pensiones que cobran y se suben en plena crisis, de las mentiras, de la poca preparación de la clase política, de la falta de consideración de las ideas y valores de sus votantes, del despilfarro de los dineros públicos, etc.
    Si el Tea Party ha tenido una consecuencia muy buena, ha sido demostrar que, si existe democracia, los electores, por sí mismos, incluso con los partidos en contra, pueden cambiar significativamente el sentido del voto, siendo fieles a sí mismos y a sus ideas. No veo qué tiene eso de malo o de «antidemocrático». Será «antipartitocrático» pero eso en España sería bueno e higiénico para la democracia.

  13. Rajoy y, sobre todo, Gallardón son los cabecillas de eso que llaman “centro reformista” que no es otra cosa que socialismo en marcha corta. Se parecen mucho más a Obama que al Tea Party, así que no es sorprendente en absoluto.

  14. aris

    creo que la raíz del pensamiento de Gallardón y Rajoy es que confunden su persona con el partido, de ahí que Rajoy diga que quiere a un PP donde se sienta cómodo, etc,… eso tiene mucho peligro.

    saludos

  15. te for tube

    Dino-Rioja dijo el día 4 de Noviembre de 2010 a las 11:52:37:
    El movimiento yanqui Tea Party produce la misma esencia que el zumo de la zanahoria ibérica destiló hace unos años. Lógicamente, salvando las diferencias de cantidades, culturas, nombres, costumbres, contextos, etc., en que se desarrollan estos primeros pasos de oposición social oficiosa, a la nueva “gobernanza” de y en los distintos países. El núcleo doctrinario de esas protestas trata de la defensa de la Nación y su legado civilizatorio, frente a unos advenedizos peligrosos y agresivos en el poder político, que pretenden convertir a las sociedades en campos de concentración primero, para después acabar con la vida de los ciudadanos. Dicho así puede parecer exagerado, pero a los visibles hechos hay que rendirse para no parecer un ingenuo inocentón, víctima propicia de este nuevo ogro asesino y sus adormecedoras nanas difundidas por los medios.

    Sin embargo, el Tea Party, que ha iniciado recientemente su recorrido, debe sufrir en su camino toda clase de zancadillas y traiciones, porque el enemigo no descansa y va adaptándose a las novedosas coyunturas como el camaleón se funde con su entorno. Y así, en el seno de ese enorme movimiento político de base que ha condicionado a los republicanos, surgen voces de pacto con Obama después de la “paliza” electoral, como también Barakc acepta la conveniencia de tal pacto. (¡Qué remedio ahora!, pero ha llamado “enemigos” a quienes no convinieran con sus políticas, como en España es de “derecha extrema” quienes no acepten el trágala del rojerío). Tal fenómeno no es nuevo en España ni para los zanahorios, que ya han experimentado ese curso con algunos fracasos organizativos para neutralizar sus ideas, o donde el gobierno y su decorativa oposición se ven obligados a retirarse de la escena pública a las tinieblas del trastero para continuar sus labores destructivas…. A pesar de todo eso, el Tea Party, con esa u otra denominación en lo sucesivo, ya ha roto espectacularmente con la mortecina inercia política en los Usa y en el mundo, irrumpiendo en los órganos Nacionales de la República y aportando esperanza a unas sociedades que acabarán comprendiendo masivamente la magnitud de esta guerra mundial y la necesidad de aunar esfuerzos ciudadanos internacionales para poder ganarla.

    El artículo del Boston Globe (*) en Febrero, da cuenta de la situación. El desarrollo de los acontecimientos desde entonces señala que la pugna entre los diferentes sectores de mandamases no hace sino subir de tono y color, por mucho que sus autores traten de esconderlo. Esas diferencias en público son las que acentúan popularmente la necesidad de prepararse para la guerra civil cruenta y defensiva que indefectiblemente está arribando en la presente tesitura política del planeta, aunque en unas partes se inicie antes que en otras.

    (*)
    http://www.votoenblanco.com/IDIOTS-AND-CRIMINALS-Idiotas-y-criminales_a3494.html

  16. Alicia Llorente

    Democracia y Libertad en el PP, democraciaylibertadpp.es : Regeneración en el PP, ya. Desde aquí, queremos denunciar a todo el mundo, el gran deterioro de valores, principios e ideas que están llevando a nuestro partido. No tenemos democracia dentro del Partido Popular. Juntos podemos hacer una rebelión contra la deriva del PP. Queridos militantes, simpatizantes y votantes, unámonos todos a la Plataforma Nacional Democracia y Libertad en el PP.

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