Rima VIII

Cuando miro el azul horizonte
� � � perderse a lo lejos
a través de una gasa de polvo
� � � dorado e inquieto,
me parece posible arrancarme
� � � del mísero suelo,
y flotar con la niebla dorada
� � � en átomos leves
� � � cual ella deshecho.

Cuando miro de noche en el fondo
� � obscuro del cielo
las estrellas temblar, como ardientes
� � pupilas de fuego,
me parece posible a do brillan
� � � subir en un vuelo,
y anegarme en su luz, y con ella
� � � en lumbre encendido
� � � fundirme en un beso.

En el mar en la duda en que bogo
� � � ni aún sé lo que creo:
¡Sin embargo, estas ansias me dicen
� � � que yo llevo algo
� � � divino aquí dentro.

(Gustavo Adolfo Bécquer)

Hace tiempo que no publicaba ningún poema, y me apetecía. La charla con Olimpia tras el poema de Los cantos de los niños, de Machado, me ha hecho recordar que no publicaba ninguno desde marzo. Si el comienzo de la primavera es buena época para publicar poemas, también lo es el amanecer del otoño, cuando las noches empiezan a hacerse más largas y podemos ver "las estrellas temblar, como ardientes /� pupilas de fuego".

No te pierdas las novedades y contenidos que te interesan. Recibe gratis el boletín diario en tu correo electrónico:

Comentarios:

  1. Agnetem

    Muchas gracias, Elentir. Me gusta mucho Bécquer, aunque ya sabes quién es mi favorito. Y como, desde hace unos días mi estado de ánimo es proclive a la tristeza, al leer tan bonita rima me he acordado de algo que leí anoche. Es de García Lorca, de Poeta en Nueva York:

    Poemas de la soledad
    en University Columbia.

    Vuelta de paseo

    Asesinado por el cielo,
    entre las formas que van hacia la sierpe
    y las formas que buscan el cristal,
    dejaré crecer mis cabellos.

    Con el árbol de muñones que no canta
    y el niño con el blanco rostro de huevo.

    Con los animalitos de cabeza rota
    y el agua harapienta de los pies secos.

    Con todo lo que tiene cansancio sordomudo
    y mariposa ahogada en el tintero.

    Tropezando con mi rostro distinto de cada día.
    ¡Asesinado por el cielo!

    Sé que para algunas personas es demasiado abstracto, pero no me digáis si al leerlo, aun sin entenderlo, no os evoca soledad, tristeza, desamparo, nostalgia… Hasta el cielo le da la espalda. Más aún, le mata.

  2. Ei,ei, que no quiero verte triste, rapaciña, así que arriba ese ánimo, ¿okis? 🙂

    Piensa que, como dice Bécquer en el poema, todos llevamos «algo divino aquí dentro», y eso siempre es motivo de alegría, incluso en los días cubiertos. Por cierto, que si quieres ver un cielo triste, vente hoy a Galicia: llevamos tres días de temporal… pero esto también tiene su lado bueno. El agua hace que Galicia esté más verde. Todo tiene un porqué, aunque a veces no nos demos cuenta o nos cueste entenderlo (incluso el mero hecho de que yo haya publicado este poema). 😉

    Un abrazote y ¡ánimo!

  3. Agnetem

    Uy, uy. Ha sido solo un momento, elfo. Gracias de verdad que el poema y tu me habéis alegrado el día ;).

    De todas maneras, el Bécquer que me enternece es que leí con los ojos de la adolescencia. Y aprendí por entonces que Bécquer tuvo un único amor en su vida: Julia Espín, que sería su musa y a la que nunca dejó de amar. Esa determinación le convirtió en un referente de lo que para mí era el amor de verdad, el eterno.

    No sé si cuando llegue a Galicia estará el cielo triste, pero como te veré, seguro que el día será alegre. De hecho, yo creo que tuve ese momento porque aquí es el cuarto día que llueve y ya echo de menos un rayito de sol.

  4. Jeje, ay, ay… me estás trayendo un recuerdo de Granada, del viaje que te conté. Recuerdo que cuando llegué a Granada (era diciembre) estaba un día gris. Luego lloviznó. Tenéis las calles llenas de cantos rodados, por cierto: basta que chisporroteen las nubes para dar unos resbalones de campeonato…

    La cuestión es que me dijo alguien de por allá que en Granada, si has quedado con alguien y de repente se pone a llover, la gente considera cancelado el plan. Me quedé así: 😯 Si en Galicia hiciésemos eso, en todo el invierno no veríamos la calle… 🙂

    Lo que pasa es que los andaluces sois personas muy alegres, en buena parte por el buen tiempo del que disfrutais en esa preciosa tierra vuestra. Los gallegos siempre hemos sido un pueblo más melancólico, supongo que por la lluvia. Pero nos hemos acostumbrado a ella, por lo menos yo… aunque reconozco que tengo algún que otro motivo para estar contento. 😉

  5. Agnetem

    Oleeeeeeeeee y oleeeeeeee 😀 😀

    ¡Ya estoy feliz! ¿Magia élfica? Puede ser… pero de llover no ha parado ¿eh?

    La verdad es que es cierto, cuando llueve un poco no, pero cuando llueve una media hora, todo el mundo da por supuesto que el plan se terminó ;). De hecho, si tienes interés hay que llamar para confirmar.

  6. Tse, tse… Quieta pará, mi arma: los elfos no hacemos magia, sino encantamientos. Aunque se haya extendido una cierta idea de la magia como cosa buena, piensa que los elfos no la entendemos así. Sino, pregúntaselo a Galadriel (uis, si la encuentras en las Tierras Imperecederas, claro…). 8)

    Por cierto, la lluvia es una fuente de fertilidad, hace crecer las cosas. En fin, confirmo lo que me dijeron en Granada sobre cancelación de planes. De todas formas, algún día te hablaré de un maravilloso invento que, si no me equivoco, procede de China. Es muy útil en días como el de hoy. Se le conoce en Galicia como «paraguas». 😛 Es practiquíiiismo… 😉

  7. Agnetem

    Bueeeno, es verdad.

    Y que conste que como no soy experta en ESDLA acabo de preguntar a un amigo que le encanta y sabe de esto un montón y hablando con él me ha pasado ésto para aclararme 🙄 :roll::

    «La Reina de Lorien, dice a Sam hablando sobre sus propias artes: esto es lo que tu gente llama magia, aunque no entiendo claramente qué quieren decir, y parecen que usaran la misma palabra para hablar de los engaños del Enemigo.»

    Y algún día contaré como a ese maravilloso invento, apreciadísimo elfo, aquí se le conoce como sombrilla ¿porqué será? :mrgreen: :mrgreen:

  8. Justamente, muy buena la cita. Me dejas aliviado, veo que no he perdido por completo mi buena memoria… 8)

    Sobre la… ¿»sombrilla»? Suena muy andaluza la palabra. Si es lo que yo imagino, aquí sirven de poco, se las lleva el viento. 😆 Es más práctico y más seguro un invento de los esquimales, lo utilizaban para cazar. Se llama «gafas de sol». :mrgreen:

  9. Agnetem

    Jo, porque tengo que salir y no me va a dar tiempo a contar el porqué ese invento esquimal no sirve para proteger la cabeza del sol o no mojarte el pelo 8) 8)…

  10. ¿Cómo que no? ¿Has probado a hacerte un sombrero o un paraguas uniendo y pegando docenas de gafas de sol? Sería «super-fashion»… :mrgreen:

  11. Esto parece más un chat que un blog 😆 :mrgreen:

  12. ¡Bienvenido al chat élfico, tito Hurssel! :mrgreen: 😆

  13. Olimpia

    Agneterm:
    A mí también me encanta Lorca. Y, para mi sorpresa, también a mi hija desde que tenía tres años.
    «La luna vino a la fragua,
    con su polisón de nardos.
    El niño la mira, mira,
    el niño la está mirando…»

  14. Agnetem

    Olimpia, perdona que no me haya conectado en algún tiempo. Pero, por fin, ya se solucionó el impedimento ;).

    Yo aprendí a leer a Lorca muy tarde. Tendría unos 20 ó 21 años. Antes de entonces, debo confesar que no lo entendía; pero un profesor de la Facultad (lo siento, Elentir, ya sé que esta historia te la sabes, pero quiero repetirla :oops:) me invitó a unas tertulias de poesía donde había que leer y estudiar una poesía para comentarla después. Con infinita paciencia, me fueron enseñando como interpretarlo. Sobre todo la plasticidad tan asombrosa del drama en «La casa de Bernarda Alba» o «Bodas de sangre». Pero era tan versátil que como muy bien dices hasta los niños disfrutan con su poesía, como esa que citas, que es parte del «Romancero Gitano» o «Los amores de Perlimplin con Belisa en su jardín». Una comedia estupenda.

  15. Olimpia

    Me encantan los surrealistas del 27.
    En realidad, me encanta la poesía en general.
    La semana pasada les expliqué a mis alumnos el poema «Para la libertad» de Miguel Hernández y alucinaron. Era la primera vez que los veía tan atentos en clase.
    De comentarios de texto mejor no me hables. Aprendí a hacerlos con catorce años, gracias a una excelente profesora y después estudié Filología Hispánica. Me encantan los comentarios de texto. Me gustan tanto que no disfruto la poesía como un ser normal, sino que disfruto comentando los textos. Por esa razón cada día tengo que conocer más acerca de escritores, costumbres y épocas determinadas. Es una curiosidad enfermiza. Tanto es así que hasta que no desentraño el significado completo de un poema no paro. A veces tardo años.
    Me alegro de poder compartir contigo esta inquietud y este placer.
    De «La Casa de Bernarda Alba» podría hablarte durante horas. Aparte de la poesía me encantan el teatro y la novela. «Bodas de Sangre» la vi representada y me impactó muchísimo. Tomaron el recurso de enfocar con luz roja el escenario a medida que se iban sucediendo los acontecimientos climáticos en la tragedia. El efecto era impresionante.
    ¿Qué te parecen los «saltos jabonosos de delfín»?

  16. Ay, amig@s, como me he divertido leyendoos!:D:D:D

    jajajaja

    Pues no sabia yo eso de que si llueve se da por supuesto que se rompe la cita. Ay.

    También la rima de Bécquer, me ha gustado, y la ilustración de estrellas, me encanta.

    Estoy pensando, ahora mismo, que es muy bonito el apellido Bécquer, es especial, sus letras son diferentes a las que se usan en los apellidos normales. Es un apellido con clase. Me gusta. Sí. Me gusta mucho. Si un día decido escribir esta novela que deseo escribir; mi personaje principal se apellidara Bécquer. ¿Qué os parece amig@s?

    Y, como la Rima de Bécquer, es sobre las estrellas, y a mi, las estrellas y las flores me dan una sensación semejante; no igual, pero semejante, con el permiso del amigo Elentir, pongo seguidamente un poema mío. Espero que os guste.:D

    ERASE UNA FLOR

    Me explicó una flor
    Que el rocío de la mañana
    Eran sus lágrimas.
    Derramadas por los recuerdos
    Del día anterior.

    Me abrió su corazón, la flor;
    Y me dijo:
    El bien que le hacía
    El rocío de cada día.

    «… No creas que mi belleza
    Se deba sólo a causas de la Naturaleza:
    Mi belleza es debida
    A que cada mañana
    Es un empezar el día.

    Sin rencores, sin odios
    Ni envidias ni celos…
    Ya que el rocío
    Borra todo lo acontecido.

    Y, tengo todo un día por delante.
    Día nuevo…
    Día pleno de cosas y sentimientos,
    que a la madrugada siguiente:
    Lloro, y borro lo que podría endurecer mi senblante.

    Por eso dicen de mi Belleza.
    Por eso dicen que soy bonita:
    Por comprender de la vida,
    Y saber nacer cada día».

    … Me explicó la linda flor
    Que el rocío de la mañana
    Eran sus lágrimas.
    Derramadas por los malos recuerdos
    Del día anterior.

    … La ví: ¡Aún más hermosa!
    Su hermosura penetró en mi interior
    Se sumergió en mi espíritu
    Y enamoró mi alma solitaria.

    Sentí agradecimiento,
    Y, nació el amor:
    El amor universal;
    Por la Madre de Dios: …Mi linda Flor.
    (María José*)

Opina sobre esta entrada:

Debes iniciar sesión para comentar. Pulsa aquí para iniciar sesión. Si aún no te has registrado, pulsa aquí para registrarte.