Nazis y comunistas tienen en común que sus dictaduras convirtieron los procesos judiciales en burdas parodias de lo que es la Justicia en países civilizados.
Las diferencias entre la Justicia democrática y la totalitaria
En un país democrático, los tribunales tienen el deber de impartir Justicia examinando los hechos a la luz de la ley. En los regímenes totalitarios, los tribunales no tienen otro fin que proporcionar un burdo disfraz a una represión inhumana y caprichosa como la practicada por nazis y comunistas.
En una democracia, todo el mundo es inocente hasta que se demuestra lo contrario, sea cual sea su condición. Por el contrario, para los totalitarios, la culpabilidad depende de la condición del acusado: si es afín al poder no puede ser culpable, ni tan siquiera puede ser juzgado, pero si se opone al régimen o pertenece a un colectivo señalado (judíos, burgueses, católicos...), su inocencia no importa: es culpable por ser quien es y los hechos no importan.
La Audiencia de Madrid condena a Pablo Echenique por calumnias
Esta semana, la Audiencia de Madrid confirmó la condena contra Pablo Echenique por calumniar a una víctima de asesinato. La sentencia obliga al diputado de Podemos a pagar 80.000 euros a la familia del asesinado y a pedir perdón públicamente por llamar violador a un inocente. ¿Y por qué hizo eso? Pues porque el calumniado fue víctima de un asesinato por el que fue condenada como cómplice una mujer que luego sería candidata de Podemos.
Este caso retrata la actitud miserable del partido de extrema izquierda ante la Justicia. Si Podemos elige como candidata a una condenada por asesinato, el crimen se justifica sin tapujos y se calumnia a la víctima, sin importar nada lo que estableciese la Justicia sobre el caso a la luz de los hechos. Según la aberrante visión de la realidad que tienen en ese partido, si la asesina es de Podemos, entonces tiene que ser la buena y el asesinado el malo, y ya está. Es el mismo sectarismo atroz que siempre exhiben todos los totalitarios.
Echenique atribuye la condena a la clase social del juez
Ayer, en un ejemplo más de lo bien que conoce Podemos el nivel intelectual de muchos de sus votantes, Echenique no tuvo mejor ocurrencia que culpar de su condena al hecho de que el juez tenga apellidos compuestos. Otra vez la vieja monserga totalitaria que criminaliza a alguien por su condición, en este caso al juez por su clase social, y justifica al autor de un delito por su ideología. Es increíble que a estas alturas de la historia, y después de todas las atrocidades que perpetró el comunismo apelando al odio de clase, aún haya gente que compra ese discurso perverso y mentiroso. Es la consecuencia, tal vez, de no haber hecho con el comunismo un proceso como el que se hizo en Nüremberg con el nazismo.
El caso de la jueza María Lourdes Afiuni, condenada por Hugo Chávez
No es la primera vez que la extrema izquierda se lanza a difamar a un juez como lo hizo ayer Echenique. En 2009, durante la dictadura de Hugo Chávez en Venezuela, la jueza venezolana María Lourdes Afiuni puso en libertad a un preso político cuya detención fue calificada como arbitraria por el grupo de trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU, que había solicitado su liberación. Por entonces ya era habitual en ese país que alguien fuese detenido sin pruebas, por el mero hecho de ser señalado por el régimen. En este caso, desde un programa de televisión, Hugo Chávez ordenó condenar a la jueza Afiuni a 30 años de cárcel.
Afiuni fue encarcelada, torturada y violada en prisión
Que un presidente de gobierno dicte sentencias condenatorias e indique el castigo correspondiente a su capricho en un programa de televisión era un claro ejemplo de esa parodia de la Justicia que tanto les gusta a los comunistas. Hay que recordar que por entonces la fundación CEPS, germen de Podemos, trabajaba para el régimen de Chávez cobrando sumas de dinero millonarias por asesorar al dictador. En ese mismo régimen al que dirigentes de Podemos han defendido tantas veces, la jueza Afiuni fue encarcelada, torturada y violada en prisión, siendo puesta en arresto domiciliario en 2011 y en libertad condicional en 2013, tres meses después de la muerte de Chávez y tras una amplia campaña internacional de denuncia sobre su caso.
En noviembre de 2014 el Comité de la ONU contra la Tortura denunció las torturas y abusos sufridos por los opositores venezolanos, emitiendo un informe basado en 30.000 denuncias. Ese organismo constató "palizas, descargas eléctricas, quemaduras, asfixia, violación sexual y amenazas" a los presos políticos en Venezuela, entre ellos la jueza Afiuni, citando expresamente el caso de su violación y el hecho de que el funcionario que la violó resultase impune.
Podemos votó contra una resolución europea que citó el caso de la jueza Afiuni
El 17 de diciembre de 2014, el Parlamento Europeo aprobó una resolución de condena de la represión contra la oposición democrática en Venezuela y citando el caso de la jueza Afiuni. Como cabía esperar de ese club de fans de la dictadura chavista, Podemos votó en contra de la resolución de condena. Tres meses después, el 12 de marzo de 2015, Podemos votó contra otra resolución europea de condena de la represión en Venezuela, en este caso un texto que denunciaba el asesinato del niño de 14 años Kluivert Roa a manos de un policía chavista que le disparó un tiro en la cabeza a sangre fría.
Los elogios de Podemos al tirano criminal que condenó a la jueza Afiuni
El 17 de marzo de 2013, cuando la jueza Afiuni aún no había sido liberada, el entonces líder de Podemos Pablo Iglesias ensalzó a Hugo Chávez, diciendo de él que "ya cabalga como estandarte y referencia de su patria grande", una declaración repugnante dedicada a un dictador criminal que mandó a prisión injustamente a una jueza para que la torturasen y la violasen. Un año más tarde, el 5 de marzo de 2014, la hoy dirigente de Podemos Yolanda Díaz acudía a un homenaje a Hugo Chávez en Vigo. Así es como se retrata un partido que echa pestes del sistema judicial de un país democrático como España, después de colmar de elogios a un tirano que dictaba sentencia en directo por la tele.
La justicia totalitaria de Chávez es la que gusta a todos los comunistas, entre ellos a Podemos. Es la misma farsa judicial que sirvió para encarcelar, torturar y violar a una jueza por liberar a un preso político, unas torturas que Podemos nunca ha querido condenar. Un partido así no debería ser legal en una democracia. En una sociedad democrática no vale todo, empezando por aquellos que quieren destruir la democracia desde dentro, como hicieron sus colegas en Venezuela.
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Comentarios:
FaramirGL
Magnífico y espantoso retrato del comunismo, una de las tres versiones más monstruosas de esa enfermedad que es el socialismo.
Comunismo, feminismo y nacional-socialismo son demasiado tóxicos como para poder convivir con ellos en libertad, son enemigos acérrimos de la vida y la democracia.
Y tienen que ser prohibidos en la misma constitución, tanto española como europea.
11:25 | 14/11/21
wladimir
de acuerdo…
ese engendro politico llamado socialismo que esta tan claramente presentado en este articulo..jamas debio existir…cuando un paiz cae en este sistema politico…solo puede encontrar destruccion, pobreza,ruina,desolacion,etc…y cuando ellos se asientan en el poder es muy dificil sacarlos….
ellos desprecian la democracia y la libertad..y lo peor de ahora es que han aprendido a usar las reglas democraticas para precisamente destruirla por dentro…
al Comunismo no debe permitirsele ninguna oportunidad de surgimiento…o todos lo vamos a lamentar…
9:03 | 15/11/21
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