El jefe de Podemos fomentó actitudes mafiosas que ahora se vuelven contra él

Ocho casos en los que a Pablo Iglesias no le importó el acoso a las familias de los demás

Después de años justificando los escraches, la extrema izquierda acaba de descubrir que la familia y el hogar son sagrados y que no todo vale en política.

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"No hay derecho a que mis hijos tengan que sufrir las consecuencias de las tareas políticas de sus padres". Esto lo dijo ayer Pablo Iglesias, en relación a insultos y pintadas amenazantes por las que ha tenido que cancelar sus vacaciones en un pueblo de Asturias. A mí estos actos de acoso me parecen repugnantes, y más cuando hay hijos pequeños. Lo que sí me llama la atención es que Pablo Iglesias nunca haya dicho en tercera persona lo que ayer dijo en primera.

Lo que dijo Pablo Iglesias cuando se trataba de las familias de sus rivales

Y que el jefe de Podemos no dijo nada cuando se trataba de los hijos de sus rivales, un acoso que él mismo alimentó cuando dijo que los escraches eran "jarabe democrático". Recordemos que tal día como hoy, hace sólo tres meses y siendo ya vicepresidente del Gobierno, el jefe de Podemos amenazó con escraches ante las viviendas de Isabel Díaz Ayuso, Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros, tres rivales políticos que también tienen hijos pequeños. Parece que de lo que se queja ahora Iglesias es de que le copien y le apliquen a él sus propias recetas.

Repaso a continuación otros casos en los que a Pablo Iglesias no le importó que hijos de rivales pudiesen sufrir el odio de extremistas de izquierdas:

1. El acoso contra la familia de Cristina Cifuentes

La expresidenta de la Comunidad de Madrid fue víctima de actos de acoso por parte de la extrema izquierda durante mucho tiempo, ya cuando era delegada del Gobierno en Madrid. Ayer recordaba su experiencia en Twitter: "mi familia fue acosada durante MESES. Se reunían junto al portal de casa e increpaban a mis hijos incluso cuando salían a tirar o basura. Eso duró hasta que nos mudarnos... y ninguno de ustedes salió a condenarlo".

2. El acto de acoso a la familia de Esteban González Pons

En marzo de 2013, el domicilio de este dirigente del PP fue el blanco de un acto de acoso de extremistas de izquierda de la llamada Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH): "Han entrado dentro del portal, han subido hasta la casa y han estado aporreando la puerta de la casa durante 45 minutos", señaló González Pons, añadiendo que en la vivienda estaban sus hijos. Dos meses y medio después, en medio de una ola de actos de acoso contra dirigentes del PP, Pablo Iglesias justificaba los escraches llamándolos "jarabe democrático":

3. El ataque incendiario contra un piso familiar por tener una Bandera de España

A comienzos de diciembre de 2017, el piso de una familia de Balsareny (Barcelona) con tres hijos pequeños fue atacado con un objeto incendiario simplemente por tener una Bandera de España en su balcón. Lejos de condenar el cobarde ataque contra esa familia, que pudo acabar en una desgracia mucho mayor, el dirigente de Podemos Pablo Echenique se lanzó a justificar lo ocurrido calumniando a la madre de familia, llamándola "neonazi" en unos mensajes de Twitter que después borró. Pablo Iglesias no condenó el ataque ni desautorizó los miserables comentarios de Echenique.

4. La difusión del domicilio del tuitero Pastrana

El 26 de enero de 2018, un tuitero de extrema izquierda difundió la identidad y la dirección del domicilio de un popular tuitero de derechas, Pastrana. Lo hizo en un hilo de Twitter. Pablo Iglesias compartió ese hilo de Twitter con sus 2,2 millones de seguidores. ¿El "crimen" del tuitero? Ser un alcalde del PP en un pequeño pueblo. A raíz de esa campaña de acoso, empezaron a circular en Twitter llamamientos para ir a agredir a Pastrana a su domicilio. Al día siguiente, Pastrana denunciaba insultos, acoso y amenazas contra él y su familia. Pablo Iglesias no condenó esos ataques.

5. La «alerta antifascista» de Pablo Iglesias contra Vox y sus efectos

El 2 de diciembre de 2018, en la noche de las elecciones andaluzas en las que Vox obtuvo 12 escaños de forma inesperada, Pablo Iglesias declaró una "alerta antifascista" y llamó a movilizarse contra el partido de Abascal. Empezó entonces una larga serie de ataques mafiosos contra Vox, que incluyó agresiones contra afiliados, actos de vandalismo contra sus sedes e incluso el incendio del coche de un miembro de Vox. En mayo, los matones de ultraizquierda pintaron una diana ante el domicilio familiar de Patricia Muñoz, coordinadora de Vox en el Vallés Occidental (Barcelona), junto con su nombre y un mensaje para que se fuese de su ciudad. Fue uno de los muchos ataques a Vox que Podemos no ha condenado.

6. La paliza sufrida por el hijo de un vocal de Vox en Murcia

En noviembre de 2019, ultraizquierdistas dieron una paliza al hijo de un vocal de Vox en El Palmar (Murcia). El joven ya había sido amenazado de muerte por cinco individuos que le gritaron "hijo de puta, atrévete a venir que te vamos a arrancar la cabeza, te vamos a matar, fascista". Su padre, Alejandro Urteaga (en la foto), es suboficial de la Guardia Civil retirado a causa de un atentado de ETA el 21 de noviembre de 2000. A día de hoy Podemos aún no ha condenado la agresión.

7. Los insultos y amenazas contra la mujer y los hijos de Santiago Abascal

El 11 de noviembre de 2019, Lidia Bedman, esposa del presidente de Vox, denunció insultos y amenazas contra ella en Instagram por la actividad política de su marido, mensajes como "ojalá te violen, ojalá violen a tus hijos, puta, guarra, gora ETA...". Ni Pablo Iglesias ni Irene Montero publicaron ningún mensaje de condena de esas amenazas ni de solidaridad hacia la mujer y los hijos de Abascal.

8. Los ataques a la mujer e hijos de un senador de Vox

El 16 de febrero de 2020, Jacobo González-Robatto, senador de Vox por designación autonómica, denunciaba los graves insultos contra su mujer y sus hijos en Instagram, y todo por la actividad política del padre de familia. Pablo Iglesias y Podemos no dijeron nada al respecto.

Así pues, lo que le está ocurriendo a Pablo Iglesias es el resultado de su propio fomento del matonismo en política. Lo más que él le puede criticar a quienes llaman a acosarle es el hecho de ser unos imitadores del jefe de Podemos. Es un buen momento para reconocer que se equivocó al justificar los escraches, pero personalmente no espero ese gesto de honradez por parte de un individuo tan soberbio y carente de escrúpulos, ni siquiera cuando él mismo y su familia están sufriendo las propias consecuencias de su irresponsable fomento de las actitudes mafiosas en España.

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Comentarios:

  1. Paula F.J.

    Cuando es contra la persona del Marquesito, su familia y sus acólitos, es imperdonable, pero si es contra alguien de derechas… Entonces es jarabe democrático. Hipocresía en estado puro, luego vais de tolerantes y honestos. Vergüenza de políticos de izquierdas.2

  2. wladimir

    Claro

    cuando se trata de Pablo Iglesias y sus secuades socualista-progres todo esta bien y son muy buenas personas…unos santitosq

    pero si se trata de los enemigos fachas de la derecha radical (y ya sabemos quienes) entonces es bueno aplicar el «jarabe democratico»,los escraches ,los ataques fisicos y las agresiones que sean con tal de defender los «valores democraticos» progres…ellos son los malos

  3. Luna

    Que yo sepa sólo apareció una pintada en la carretera del pueblo en donde estaba veraneando, cuyo texto era «Coletas rata». Si no me equivoco ya iba culpando a Vox en los medios de comunicación, pese a que se desconoce al autor de ese grafiti y no está firmado. Vamos, que cualquier excusa es buena para tirar contra el partido rival…

    Esto no es más que una cortina de humo para esconder el feo asunto del nuevo juicio que se llevan entre manos porque al parecer hay una probable «caja B», la contabilidad de Podemos no es demasiado verosímil o se metieron en unas obras en la sede que hay que explicar un poco al señor juez. Como el Coletas andaba despotricando contra su Emérita Majestad, no podía estar desaparecido por más tiempo y algo había que hacer para llamar la atención, la acusación de abusos sexuales del denunciante resultó ser falsa y el tema se va poniendo preocupante.

    Fulanito le dijo a su mamá que le habían llamado tonto. Su mamá le dijo a Fulanito que «lo importante no es que no te lo llamen sino que no lo seas», y alguien con una gomita en la nuca se debiera aplicar esta respuesta. Que se vuelva al Galapagar con sus Guardias Civiles a la puerta, no puede tener mejor compañía. Si quiere le recito la Sonatina de Rubén Darío, cada vez le encaja mejor.

  4. Jandro

    Pero ves todavía a gente que protesta por lo despreciable del acoso a Iglesias y a la vez no admite que deban condenar los acosos favorecidos por él. Como no saben por dónde salir, aluden a que el de Iglesias lleva mucho tiempo (debe de ser que el de Cifuentes, por ejemplo, no) o cualquier otra cosa. Están tan fanatizados que no saben abandonar su ombligo y reconocer que el acoso es intolerable en todo caso.

    Cuando el sectarismo llega a estas cotas, no queda sino perseverar y confiar en que algún día admitan que estaban equivocados.

    Es como cuando, pese al acoso sistemático constante y las colecciones de actos de violencia contra militantes y simpatizantes de Vox en todos los actos, he llegado a ver a algún sujeto que había recopilado supuestos casos de violencia (la mayoría, atestiguados por nadie) cometidos por personas afines a Vox, ante los que unos individuos reaccionaban como si creyesen que esa es la realidad imperante y los de Vox unos agresivos fascistas violentos, preguntándose hasta cuándo se iba a consentir esto. Vivir para ver, el mundo al revés.

  5. Felipe

    Hay algo que no cuadra en el «acoso de la ultraderecha» a Iglesias en Lena.

    https://twitter.com/N_Trastamara/status/1295687884348022784

  6. Alonso Quijano

    Particularmente me gustaría ver imágenes de ese scratche en Asturias. ¿Sólo una pintada en la carretera? Me suena a BULO y cortina de humo, para desviar la atención de todo lo que se le viene encima a podemos y a Pablo iglesias

  7. Luna

    Desde luego que lo hace para distraer de la investigación por malversación y trama financiera de Podem@s. También dicen los telediarios que en un bar o restaurante de este pequeño pueblo fue alguien a intimidarle por servir comida al Coletas o a algún afín. Desde luego que esto también es reprobable (en un bar se da de comer a quien vaya sin mirar si es rojo o facha) pero no parece haber nada más. Vamos, que quizá hay más pintadas contra él en las puertas de los lavabos de la sede de su partido que en este caso.

    ¿Qué dirán los jueces que viven en Cataluña cuando vean esta queja, hartos como están de que les llenen su calle y su casa de pintadas, de que les amenacen o les hagan el vacío constantemente?.

    Pero hay otra forma de ver esto: Si no custodian palacio los guardas, cien negros con sus cien alabardas, un lebrel que no duerme y un dragón colosal aparecen pronto las muestras espontáneas de un fervor popular que manifiesta lo que siente por este personaje. Es lo que hay, no haber difundido la noticia.

  8. pacococo

    Como no sigo los medios de masas, pues no tengo noticias del escrache, sólo por lo leído aquí, mayormente. Y parece que el escrache no ha existido, sino que ha sido un invento del Sr marqués para desviar la atención y culpar a los fachas.

    Hay algo que el sr marqué dice sobre que los hijos no deben sufrir por los actos de sus padres. Eso es cierto. sin embargo los padres deben llevar una vida ejemplar para que nadie tenga que recriminarles nada.

    Si te pasas la vida insultando a muchos, lo más probable es que algunos te insulten a ti. Y debe pensar en lo que dirán los hijos de tantos a los que insulta. No es agradable sentirse insultado en un telediario y que tus hijos lo vean.

    Espero que llegue S. Martín.

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