La nacionalidad de los asesinos de mujeres en España: el dato que enmudece a las feministas

Elentir EN Jue 7·9·2023 · 7:17 5

Para cualquiera que tenga un mínimo de respeto por la lógica, todas las generalizaciones deberían ser aborrecibles. Todas sin excepción.

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El afán identitario por atribuir culpas a colectivos enteros

Como todas las ideologías identitarias, el feminismo de izquierdas atribuye culpas a colectivos enteros, simplemente por ser de una determinada condición, en vez de valorar a cada individuo por sus actos. Donde otros se dedican a señalar a los ricos, a los judíos o a los cristianos, el feminismo señala a los hombres. Es la segunda ideología que ha llegado más lejos en su afán irracional por criminalizar a otros por su identidad: señala sin más a media humanidad.

En esta obsesión por demonizar a las personas por su identidad, el feminismo izquierdista sólo se ve superado por el nacionalismo xenófobo, que va un paso más allá y considera malvados a todos los extranjeros. La diferencia es que hoy en día el nacionalismo xenófobo, en su máxima expresión, es algo puramente marginal. Son muy pocas las personas que odian a todos aquellos que no comparten su nacionalidad, mientras que son muchas las personas, instituciones y organizaciones que apoyan ese irracional feminismo misándrico.

El problema que encuentra el feminismo izquierdista a la hora de sostener su odio irracional a los hombres no sólo es lógico, sino también estadístico. Si las feministas demonizan a los hombres porque un porcentaje exiguo asesina y maltrata a mujeres (algo que nos provoca horror y repulsión a la amplia mayoría de los hombres), también debería demonizar a colectivos en los que esos delitos presentan porcentajes mayores, como por ejemplo los extranjeros en el caso de España.

Un 45,2% de los asesinos de mujeres en España son extranjeros

Este miércoles, The Objetive publicó: "El 45% de los asesinatos de mujeres en 2023 los han cometido extranjeros". La noticia se refiere a España y ese dato no ha sido fruto de una invención: aparece en un documento oficial del Ministerio de Igualdad (ver PDF), un departamento en manos de la comunista Irene Montero, del partido de extrema izquierda Podemos. Concretamente, el porcentaje es del 45,2%. Los que no saben muchas matemáticas se conformarán pensando que es una minoría frente al 54,8% de mujeres asesinadas por españoles. Sin embargo, y como bien señala The Objective, los extranjeros son el 12,63% de la población de España. Eso significa una mayor incidencia de esos crímenes entre la población extranjera que entre los españoles.

Una estadística que no es un retrato individual ni debe llevar a demonizar a los extranjeros

Como ya advertí aquí el año pasado al hablar sobre la inmigración y la delincuencia, las estadísticas son un indicador de la realidad social, no un retrato individual. Que haya una mayor proporción de delincuentes en general y de asesinos de mujeres en particular entre los extranjeros no significa que todos los extranjeros sean delincuentes ni asesinos de mujeres, de la misma forma que el resto de los hombres no somos culpables de los crímenes de una minoría. Tengo la firme creencia de que la gran mayoría de los extranjeros, al igual que la gran mayoría de los españoles, son buenas personas, que aman a sus hijos, cuidan de sus seres queridos y nunca hacen daño a nadie.

El Ministerio de Igualdad guarda silencio ante ese dato

Lo curioso de ese dato, como bien señala The Objective, es que el Ministerio de Igualdad ni siquiera ha comentado nada al respecto. Como también señalé el año pasado, lo que indican estas estadísticas es que hay graves fallos en las políticas de inmigración y de integración, unos fallos que acaban teniendo efectos en la seguridad. Si los inmigrantes de ciertas nacionalidades son estadísticamente más problemáticos que otros, por proceder de un entorno cultural donde la mujer sufre un claro menosprecio (como ocurre, por ejemplo, en la mayoría de los países musulmanes), esto debería tenerse en cuenta a la hora de regular los flujos migratorios, por una cuestión básica de seguridad nacional.

El silencio del feminismo ante los asesinatos de mujeres por extranjeros

Sin embargo, el mismo feminismo izquierdista que demoniza a todos los hombres, y que está empeñado en generar polémicas disparatadas incluso sobre besos inapropiados o sobre lo que llama "micromachismos" (en un afán por "reeducar" a todos los hombres en base a sus tesis misándricas), al mismo tiempo no ve ningún problema en la mayor proporción de asesinatos que se da entre los extranjeros (sería interesante, por cierto, conocer sus nacionalidades).

De hecho, en España ya hemos empezado a ver algo que también ha pasado en otros países europeos: el silencio del feminismo izquierdista cuando alguna mujer sufre una violación por parte de un inmigrante, como si ese caso importarse menos que una violación a manos de un español. Y es que entre los colectivos "oprimidos" que la izquierda trata como a seres de luz hay categorías: por encima de las mujeres está el colectivo LGTB (por eso gran parte del feminismo izquierdista no tiene reparos en apoyar leyes trans que son una amenaza para las mujeres), y por encima de las mujeres y del colectivo LGTB están los inmigrantes, especialmente si son musulmanes.

Las categorías de 'oprimidos' para la izquierda: dos ejemplos ilustrativos

Un ejemplo muy claro ilustra esas distintas categorías: hace dos años, un joven gay dijo haber sufrido una agresión en Madrid. Se montó un gran revuelo e incluso el presidente del gobierno Pedro Sánchez le dedicó un mensaje de apoyo y los socialistas culparon a los conservadores de Vox, a pesar de que no había ningún indicio que les relacionase con esa agresión. Al final, resultó que el supuesto agredido se lo había inventado todo, un caso conocido en España como "el bulo del culo". Unos días antes, un homosexual fue agredido a puñetazos en Melilla por un musulmán. El silencio fue casi total.

Así mismo, en noviembre del año pasado, un africano procedente de Costa de Marfil fue condenado a ocho años de prisión por intentar violar a dos mujeres. Los hechos en cuestión ocurrieron a comienzos de 2021 en la ciudad de La Coruña. A diferencia de lo ocurrido con otras agresiones, el gobierno municipal socialista no emitió ninguna declaración de apoyo a las mujeres agredidas, a las que ese africano intentó violar y estrangular, y no hubo ninguna manifestación feminista por lo ocurrido. Esto es lo que pasa con una izquierda que valora a la gente por su identidad y no por sus actos.

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Foto: Europa Press. La vicepresidenta segunda del gobierno de España, la comunista Yolanda Díaz, y la ministra de Igualdad, la comunista Irene Montero, dos de las figuras más conocidas del feminismo de izquierdas en España.