En 2009 un cineasta independiente le encontró allí y le hizo una entrevista

El hombre que vivió durante más de 20 años en un túnel ferroviario debajo de Nueva York

Aquí hemos hablado sobre túneles ferroviarios en algunas ocasiones. Es un lugar en el que no imaginas que podría vivir ningún ser humano, pero a veces es así.

La bellísima estación fantasma del Metro de Nueva York que fue diseñada por un español
Church Hill: un túnel ferroviario en el que están sepultados dos hombres y un tren

Nueva York es una ciudad enorme y cuyo subsuelo está recorrido no sólo por un amplio sistema de metro, sino también por túneles ferroviarios. Uno de esos túneles, perteneciente a la red de Amtrak, es el Freedom Tunnel (Túnel de la Libertad), que pasa por debajo de la autopista de West Side y que es conocido por los murales que pintan los grafiteros de Nueva York en su paredes, y también por las personas sin hogar que se refugian allí.

En ese túnel vivía un vagabundo llamado Walter. No era un mero transeúnte que pernoctaba ocasionalmente allí: tenía un pequeño hogar en el túnel debajo de la calle 80. Su forma de vida consistía en reparar ordenadores estropeados que encontraba por la calle, revender libros que otros ya no querían y reunir latas para vender el metal. Entre los vagabundos que vivían en el túnel, Walter era un afortunado, pues al menos él tenía algo parecido a un hogar.

En 2009, el cineasta independiente Erik K. Swanson encontró a Walker durante una exploración de esos túneles, y tuvo la ocasión de entrevistarle y conocer su curioso hogar. Hace unos meses Erik publicó el vídeo de aquella experiencia (el vídeo está en inglés, pero puedes activar los subtítulos automáticos en español en la barra inferior del reproductor):

Según apunta Erik en la descripción del vídeo, Walter estuvo más de 20 años viviendo en ese hogar, hasta que en 2012 murió atropellado por un tren. Unos años más tarde, las autoridades sacaron a todos los vagabundos del túnel y limpiaron la zona. Actualmente, la Policía de Nueva York hace barridos periódicos para comprobar si aún viven gente allí.

Podéis ver aquí algunas capturas del vídeo. Bajo estas líneas, uno de los túneles que Erik recorrió en 2009 para llegar al Freedom Tunnel.

Resulta difícil imaginar que haya gente viviendo en un lugar así, ¿verdad?

Algunos de los túneles son espaciosos y tienen escombros. Es el espacio que aprovechan los vagabundos que se refugian allí.

En el hueco que aparece arriba a la izquierda es donde Walter vivía hasta que murió atropellado en 2012.

Una imagen de Walter y su pequeño hogar. Tenía un ordenador que él mismo reparó, una radio y no pocos libros, además de una pequeña cocina.

Sabe Dios qué fue lo que llevó a Walter a vivir allí, y a qué se dedicó en su pasado. Sirvan estas líneas como un recuerdo de este hombre del subsuelo de Nueva York en el décimo aniversario de su muerte. Descanse en paz.

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Comentarios:

  1. wladimir

    interesante…curiosa historia…

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